En 1899, Mark Twain publicó El hombre que corrompió Hadleyburg. En este cuento, el autor estadounidense plasma el poderoso relato de una ciudad que se creyó inmune a las tentaciones morales. Sin embargo, cuando se presente la posibilidad de adquirir una enorme fortuna, los ciudadanos sacarán a relucir sus verdaderas intenciones. Más de un siglo después, la historia regresó como parte de la iniciativa Ven al teatro, en el estreno llevado a cabo el 14 de octubre en el teatro NOS PUCP.

A través del humor, el suspendo y la música, esta adaptación teatral invita a cuestionarnos sobre la fragilidad ética y los cimientos de la sociedad. Todo esto en una esmerada puesta en escena, producida por la Pontificia Universidad Católica del Perú, con la dirección Mateo Chiarella Viale, la dirección adjunta de Lucho Tuesta, y con la actuación de destacados actores y actrices nacionales como Alfonso Santistevan, Haydée Cáceres, Alberto Isola, Luis Peirano, Víctor Prada, Celeste Viale, entre los más de 20 artistas y músicos que conforman el elenco.

"El hombre que corrompió a una ciudad" ofrece al espectador la posibilidad, a veces incómoda pero siempre necesaria, de analizar la sociedad peruana y, a su vez, reflexionar sobre sus propios principios morales.

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• Temporada: 14 de octubre al 19 de noviembre
• De jueves a sábados a las 8:00 p.m. Domingos a las 7:00 p.m.
• Lugar: Teatro NOS PUCP (Av. Camino Real 1037, San Isidro)
• Adquiere tus entradas en la boletería del teatro o ingresando aquí.

Artistas PUCP en «El hombre que corrompió a una ciudad»

El hombre que corrompió a una ciudad es una de esas obras que irrumpen en escena para dejar huella. Se trata de un ambicioso montaje, en el que las actuaciones, el vestuario, la dramaturgia y la composición musical demuestran, una vez más, que en el Perú se puede hacer un teatro de amplio alcance. Todo esto no hubiera sido posible sin el trabajo conjunto de artistas y creadores de la PUCP, que contribuyeron al éxito del proyecto.

Así lo señaló el director Mateo Chiarella, director y docente PUCP, para quien «esta pieza permite mostrar el trabajo que se viene haciendo desde la Universidad por la cultura y el arte desde hace muchos años. Es una muestra clara de que entre nuestras filas tenemos a profesionales que definitivamente han marcado un hito en el teatro peruano».

En esta misma línea, para Alberto Isola y Luis Peirano, profesores PUCP y protagonistas de la obra, esta fue también una oportunidad para reencontrarse y trabajar con sus alumnos. «Ha sido una experiencia muy divertida. Este equipo reúne a muchas generaciones. Nos estamos juntando con varios de nuestros estudiantes. Es un trabajo en familia, pues todos tenemos en común la experiencia de la Universidad», sostuvieron.

Repensarnos como sociedad e individuos

La obra propone una ciudad ficticia para referir una amenaza muy real, presente en cualquier grupo humano: la corrupción. Durante la representación, la rectitud moral de los personajes será puesta a prueba, poniendo en debate la posibilidad de una sociedad auténticamente incólume.

Esta discusión, si bien es universal, es particularmente interesante en un contexto como el nuestro, en el que la corrupción es un tema cotidiano. Siendo así, El hombre que corrompió a una ciudad ofrece al espectador la posibilidad, a veces incómoda pero siempre necesaria, de analizar la sociedad peruana y, a su vez, reflexionar sobre sus propios principios morales.

Para el actor Alfonso Santistevan esta es precisamente la función del teatro. «Siempre habla sobre la realidad. Aquí se pone en evidencia la importancia de los valores, pero también su fragilidad ante el dinero, que puede ser un agente corrosivo».

De este modo, la PUCP continúa con su labor de reflexionar y ofrecer respuestas a las tensiones de la realidad social desde distintas disciplinas. Así lo observó, en el estreno de la obra, el Dr. Aldo Panfichi, vicerrector de Investigación, quien señaló: «en la Universidad hemos venido construyendo una capacidad de entender el país y conectarnos con sus problemas desde la creación artística».