Los precios de los departamentos y viviendas en el Perú suben cada vez más, y es inevitable parar a preguntarse si el sector inmobiliario vive su mejor época o solo se trata de una “burbuja” que finalmente estallará provocando una gran crisis económica.

“Lo que existe es un aumento de precios de las viviendas y todavía esos precios están por debajo de los que hay en la región. Vivimos el ‘boom’ de construcción no solo en el sector inmobiliario, sino también en el sector comercial”, señala el docente del Departamento de Economía de la PUCP, Ismael Muñoz, quien niega que exista tal “burbuja”.

Según el especialista, la inversión de construcción ha crecido y sigue creciendo, aunque a un ritmo menor del que se ha venido desarrollando en los últimos años, debido a que hay un impacto de expectativas por problemas en la economía internacional y la caída de los precios de los productos que exportamos.

“No existe una ‘burbuja’ según la evidencia, lo que hay es un ritmo acelerado de construcción, además de un incremento del precio de las viviendas porque el costo de los terrenos ha subido el doble”, afirma.

¿Cómo evitar la “burbuja”?

La Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) es la entidad encargada de frenar una burbuja en gestación, poniendo restricciones en el crédito hipotecario y en la segunda vivienda (que en muchos casos se compran para alquilar o revender creando expectativa).

“El problema con el crédito hipotecario es cuando no es posible pagarlo en el plazo fijado. Uno tiene que tener un plan de ingresos, que le permita pagar el crédito. Los bancos ponen como condición que uno coloque un monto inicial alto para desincentivar el préstamo, ese monto llega a veces hasta a un 30%”, indica Muñoz.

Muchas opciones

La oferta de viviendas por año en el Perú asciende a 40 mil, y más de la mitad se venden en Lima. Aunque el mercado tiene potencial para desarrollarse, este número es bastante menor, comparado a las cifras de otros países de la región (en Chile se han vendido 80 mil viviendas por año, mientras que en México, una sola empresa inmobiliaria oferta la misma cifra).

“La industria de la construcción se mueve lentamente, debido a las restricciones de los bancos y los permisos municipales”, indica.

Si tú estás interesado en comprar una vivienda entre tanta oferta, el economista sugiere tomar en cuenta la proyección de tus ingresos y los intereses que estás dispuesto a pagar.

“Lo primero que se debe elegir es si el departamento es nuevo o de segunda. Lo siguiente en dónde y lo tercero es pedir el crédito al banco (qué tasa de interés, y qué facilidades de pago tendrás). Lo más importante es el plan de ingresos, que te haga saber que podrás pagar la deuda. Tener ahorros previos es una gran ayuda. Para los jóvenes, programas como Mi Vivienda es otra buena opción”, finaliza.