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"El problema es que socialmente se ha desvinculado la relación entre fe cristiana y belleza"

La semana pasada nos visitó el doctor Rossano Zas Friz De Col S.J., profesor de teología espiritual de la Facultad Teológica de la Italia Meridional en Nápoles y de la Universidad Gregoriana de Roma. El director del Instituto de Espiritualidad y Mística en Nápoles y de las revistas de investigación teológica Ignaziana y Mysterion hablo sobre La belleza como camino de trascendencia en una sociedad secularizada. La sociedad posmoderna aleja al arte de lo religioso más no de la dimensión espiritual ni de lo bello.

  • Rossano Zas Friz de Col

¿Cuál es el vínculo entre espiritualidad y arte?

Se podría decir que toda expresión artística manifiesta una disposición espiritual, pero no todo lo espiritual es artístico. Más bien habría que pensar en la relación entre la belleza y la espiritualidad. Aquí sí se podría decir que todo lo verdaderamente bello tiene una connotación de espiritualidad porque la belleza se transporta de un nivel sensible aparente a un mundo invisible donde aparece lo bello.

¿En qué momento surge el divorcio entre el arte y la religión?

Hay que tener en cuenta que cuando se habla de lo espiritual no es lo mismo que religioso. La relación entre arte y espiritualidad no es la relación entre arte y religión. El arte continúa siendo espiritual. Este divorcio se da fundamentalmente en occidente con varios fenómenos. La reforma protestante, las guerras de religión, la revolución intelectual con la ilustración y la revolución científica. Es un proceso que empieza hace 500 años y tiene que ver con el paso de la modernidad a la posmodernidad. Es la secularización, que se evidencia cuando la vida de las personas ya no está impregnada de valores que se reconocen como religiosos. No es que se deja de ser espiritual sino religioso.

¿Cuál es la diferencia entre la espiritualidad y la religión en el arte?

La espiritualidad es una dimensión antropológica propia del ser humano. Es la capacidad de trascender el aquí y el ahora. La experiencia del aquí y del ahora no está enmarcada dentro de la experiencia de fe cristiana y no se expresa más en un arte religioso. En la colonia el arte religioso expresaba el drama de la existencia humana, en términos artísticos e iconográficos desde la experiencia de la fe cristiana. Cuando la sociedad deja de regirse por los valores cristianos, vehiculiza otro tipo de valores, se interpreta la muerte de otro modo por ejemplo.

¿El arte contemporáneo muestra una dimensión espiritual?

Tengo la impresión que el arte contemporáneo muestra la dimensión de la espiritualidad yendo mas allá de lo que una racionalidad científica presenta. Entonces, se trata de ir hacia lo abstracto, de recurrir a todas aquellas regiones donde la razón racional, por decirlo así, no tiene acceso. Me parece que todo comienza con el Romanticismo, es ahí donde en términos artísticos se inicia un proceso serio de laicización o secularización del arte.

Es inquietante hablar de lo bello porque no es algo fácil de definir.

Desde un planteamiento teológico la cosa bella remite a una experiencia de belleza. La presencia de lo bello en esa experiencia estética, en la que uno siente que se encuentra con lo bello, es en términos de fe cristiana la presencia de Dios. En el ámbito de la fe cristiana, la belleza entra en relación como experiencia espiritual y encuentra que la experiencia de lo bello se expresa en Dios, como revelación de Dios. Cuando uno entra en la lógica de la fe cristiana esta experiencia de lo bello se concretiza en la persona de Jesucristo y aquí se puede explicar por qué todo el arte religioso enfoca principalmente la vida de los santos y de Jesús. El problema dentro de la vivencia de la fe cristiana es que socialmente se ha desvinculado la relación entre fe cristiana y belleza.

El Perfil

Nombre: Rossano Zas Friz de Col

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