Ir al contenido principal Ir al menú principal Ir al pie de página

"Es inevitable contar con una garantía de que las actividades de las universidades son de calidad"

Las universidades están en la obligación de garantizar su calidad a los estudiantes y a las empresas que los emplean. El Lic. Boris Isla nos explica qué funciones cumplen o deben cumplir los estudiantes y administrativos para la acreditación. El especialista nos visitó para participar en el conversatorio internacional “Aseguramiento de la Calidad en la Educación Superior”, organizado por la Dirección de Asuntos Académicos.

  • Boris Isla
    Director general de Gestión Institucional de la Universidad Católica de Temuco
  • Texto:
    Solange Avila
  • Fotografía:
    Giovani Alarcón

¿Todas las universidades deberían acreditarse?

Las universidades hoy están enfrentadas al dilema de demostrar la calidad y dar garantías públicas a sus propias comunidades académicas, a los empleadores que los acogen y a los organismos certificadores. Por lo tanto, es inevitable contar con algún sello que garantice que los procesos o actividades que se desarrollan al interior de las universidades son de calidad. Todas las universidades nos vamos a ver enfrentadas cada vez más a este tipo de requerimiento por parte de los ministerios o de la sociedad en general. Por tanto, los estudiantes deberían preocuparse fundamentalmente en que sus universidades cuenten con un reconocimiento respecto de la labor que desarrollan.

¿Cuál es el rol del estudiante en el aseguramiento de calidad?

Debemos abrir el espacio para que haya una participación sustantiva de parte de los estudiantes en los procesos de acreditación. Si bien sería logísticamente imposible, es necesario que todos tengan oportunidad. En la Universidad Católica de Temuco tenemos 8,500 estudiantes y necesitamos que haya una representación estudiantil al momento de evaluar la calidad de nuestro trabajo.

Buscamos que los dirigentes estudiantiles puedan interactuar con los decanos y directivos de sus propias unidades sobre los procesos de autoevaluación. A través de ellos se puede capturar la información de los estudiantes, también mediante aplicación de encuestas o grupos focales. No es una opinión más, es una de las más importantes.

¿Las universidades deberían ser evaluadas internamente o por especialistas externos?

La filosofía de la Universidad Católica de Temuco es que debemos internalizar las capacidades para desarrollar procesos de evaluación. Indudablemente tenemos que observar críticamente pero desde un enfoque propositivo, para reconocer las falencias y proyectarlas en un marco de mejoramiento. No hay que tener miedo a reconocer las debilidades, por el contrario, debemos temer a los puntos ciegos que no nos permiten ver dónde nos equivocamos.

Para detectar los errores, es relevante la perspectiva del especialista externo, que puede observar desde mayor distancia y, por lo tanto, entrega un aporte sustancial. Y si bien ambas perspectivas son sumamente importantes, me orientaría por el liderazgo interno, que cuenta con una perspectiva analítica y reflexiva, que no es reemplazable por la del especialista.

¿Cuáles son las principales amenazas que enfrentan las universidades para el aseguramiento de la calidad?

Una de las amenazas más importantes que sufrimos en Chile es haber vinculado los procesos de acreditación con las opciones de financiamiento público de las universidades. Esto, a veces, desvirtúa el propósito más profundo en el proceso de acreditación, debido a que empezamos a buscar la certificación para postular a estos financiamientos en vez de hacerlo por el mejoramiento continuo, el perfeccionamiento de los procedimientos o la profundización del análisis al interior de un equipo.

Por otro lado, no podría menospreciar lo que significa el movimiento estudiantil en Chile, pues, gracias a este, gran parte de las reformas se están instalando; sin embargo, en muchas ocasiones, atenta contra la misma calidad esperada. Cada vez que hay un movimiento estudiantil importante, se paralizan las funciones o la actividad de la universidad y muchos estudiantes que se retiran. Eso impacta notablemente en indicadores de la universidad y afecta su desempeño.

Una universidad debe plantear un plan de desarrollo institucional para cuando vengan cambios importantes en el sistema de educación superior del país, para que puedan hacer ajustes y respondan oportunamente a los cambios. A lo primero que tenemos que responder es al cumplimiento de nuestra misión e identidad, que deben estar expresas en lo que hacemos, y debemos proyectar hacia el futuro los planes de desarrollo. La primera instancia con la que debemos acreditarnos es, entonces, con nuestros propios estudiantes.

Deja un comentario

Cancelar
Sobre los comentarios
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los comentarios pasan por un proceso de moderación que toma hasta 48 horas en días útiles. Son bienvenidos todos los comentarios siempre y cuando mantengan el respeto hacia los demás. No serán aprobados los comentarios difamatorios, con insultos o palabras altisonantes, con enlaces publicitarios o a páginas que no aporten al tema, así como los comentarios que hablen de otros temas.