A Francisco Durand
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Rosa Alayza
Directora de la Especialidad de Ciencia Política y Gobierno y profesora del Departamento de Ciencias Sociales.
Para recordar a Paco Durand Arp Nissen, nuestro colega y amigo que nos dejó el 2 de febrero, hagamos pinceladas de su trayectoria. Egresó de la PUCP en 1978, tras terminar la licenciatura y maestría en Sociología. A diferencia de la mayoría de sus compañeros que estudiaban los movimientos populares, Paco se enfocó en los grupos de poder empresarial. Años después, ingresó a la Universidad de Berkeley (EE.UU.), donde completó sus estudios de doctorado en 1991 e inmediatamente fue convocado como profesor en la Universidad San Antonio en Texas (1991-2013), donde lo nombraron profesor emérito.
Regresó al Perú en 2014 y se reincorporó al Departamento de Ciencias Sociales como profesor en la sección de Ciencia Política, de la que fue coordinador (2015-2018) y miembro del consejo de facultad. En esos años publicó nueve libros con el sello editorial PUCP y varios más con otros sellos. Continuó hasta el final con sus investigaciones y dejó algunas en el camino.
Su gran producción describe el poder concentrado de las grandes empresas y sus lazos con el Estado peruano. Dos de sus éxitos editoriales por sus numerosas reediciones fueron Los doce apóstoles de la economía peruana (2017) y Odebrecht, la empresa que capturaba gobiernos (2019). Ciertamente este ha sido un trabajo prolífico y crucial para comprender los cambios que ocurrieron en las esferas del poder económico y político del Perú, marcados por las reformas neoliberales.
Pero su conocida trayectoria académica no es lo único que valoramos de Paco. Es sobre todo su forma personal de hacer las cosas, que nos revela esa dimensión humana que se dejaba entrever en su discreta generosidad con tantas personas, así como su disponibilidad para compartir sus conocimientos dentro y fuera de la universidad, tanto con estudiantes, asesorados y egresados, periodistas de investigación, jóvenes activistas y otros tantos grupos que colaboraron en sus estudios. Paco integraba grupos interdisciplinarios con los que analizaba los procesos contemporáneos y escribía artículos que hacían parte del debate público. Además, participó activamente en las redes sociales, ejercitando su análisis de coyuntura aprendido en las aulas y que se convirtió en una herramienta cotidiana. No me queda duda de que Paco ha sembrado muchas semillas en la vida de muchas personas y en la academia. Esas semillas darán sus frutos.
Detrás de su personalidad tímida, emergía en Paco una actitud auténtica que constantemente lo llevó a empujar ciertos límites y correr riesgos cuando buscaba echar luz sobre las zonas ocultas del poder económico, sistematizando e interpretando luego sus cambios y novedades. Él señalaba que no era tolerable que el Estado peruano se haya convertido en el patio de los grandes grupos de poder, algo que le ha permitido direccionar a su favor políticas públicas y financiamientos, dejando de lado la atención a sectores populares que demandan el cumplimiento de su ciudadanía. Fueron estos ciudadanos quienes alimentaron en Paco su hambre de conocimiento y su persistencia en la vida pública.
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