Propusimos al vicerrector administrativo la posibilidad de premiar a los tres mejores programas y nos dieron un pequeño fondo para estos premios. Presentamos los resultados de la evaluación al Consejo de la Escuela de Posgrado y definimos quiénes eran los ganadores.

Cabe resaltar que si bien no han obtenido premio, hay otros tres programas que tienen el mayor nivel de graduación: la Maestría en Fonoaudiología, Maestría en Educación con mención en Dificultades en Aprendizaje y la Maestría en Estudios Teóricos en Psicoanálisis. A esos programas vamos a reforzarlos para que mantengan este nivel.

Un segundo indicador es el alto número de docentes con muy buen nivel, que investigan, que realizan una publicación o que participan en eventos nacionales e internacionales; contamos con un equipo de docentes muy bien posicionado. Además, vale mencionar que este año, la Escuela ha tenido un incremento de más del 20% en la cantidad de postulantes, cosa que es muy buena. Cuanto más postulantes tengamos, mayor capacidad para escoger a los mejores tendremos.

Desde que un alumno ingresa, tiene que tener en claro que la tesis es parte de todo el proceso, de toda la estructura del programa, no es cuestión que primero estudias y después la haces. Y esto va de la mano con otro indicador que también sale bajo: el hecho de que los alumnos cuenten con condiciones para el desarrollo de la tesis; tenemos que concentrarnos en generarlas.

Queremos instalar una cultura de calidad en la Escuela. La calidad no es solamente trabajar para el momento en que te van a evaluar, o para conseguir una acreditación: tiene que ser una cosa constante, cotidiana. Todo el tiempo tenemos que estar pensando qué hacemos para mejorar y elevar el nivel de lo que ofrecemos.