El especialista nos recuerda lo importante que es mantenernos hidratados. “El metabolismo es la suma de todas las reacciones físicas y químicas del cuerpo, por eso necesita moléculas de agua para que funcione de forma óptima”, explica el nutricionista. Si no tomas entre 6 y 8 vasos diarios, tu rendimiento físico e intelectual disminuye.

La clave de la hidratación es la variedad. No es necesario beber solo agua, también puedes ingerir infusiones, jugos y refrescos naturales. Asimismo, para que el cuerpo se mantenga en equilibrio, se debe consumir frutas y verduras, así como evitar a toda costa las bebidas no naturales, debido al alto contenido de colorantes, preservantes, saborizantes y otras sustancias que podrían generar un impacto negativo en el organismo.

Si optas por tomar gaseosas o energizantes para tener más energías para estudiar o trabajar, no sabes lo que ocurre en tu cuerpo como consecuencia. “Tan solo con el consumo regular de gaseosa se sobreestimula el sistema nervioso, pues de la misma forma que hace subir el nivel de azúcar en el cuerpo, también lo baja. A esto se debe añadir que la hipoglucemia influye en un bajo rendimiento intelectual en el sistema nervioso y sobreestimula el apetito”, detalla.