Mauricio Díaz recuerda cuándo decidió regresar al Perú, tras pasar varios años fuera del país. Fue durante una de sus tantas vueltas que, jugando con sus sobrinos, cayó sobre la tierra y sintió el llamado de la Pachamama con un objetivo claro: contribuir al desarrollo de su tierra natal y mejorar la calidad de vida de las comunidades andinas. «Tenía que vivir acá y poner en práctica lo que había recolectado en mi vida», nos dice cuando lo visitamos en su tierra, tras contarnos sobre su paso por Cusco, la PUCP, Brasil, Alemania y ahora, nuevamente, de vuelta en Cusco.

En el CITE Textil Camélidos Cusco, Mauricio se dedica a implementar soluciones innovadoras para optimizar la cadena de valor de las alpacas y vicuñas, desde la crianza hasta la comercialización de sus productos. Su enfoque en el uso de blockchain promete transparencia y eficiencia, beneficiando a los productores locales y garantizando productos de alta calidad para el mercado global.

Queremos que los productores reciban un pago justo por su trabajo y que los consumidores puedan confiar en la calidad de lo que compran".

De Písac a la PUCP: un viaje marcado por la perseverancia

El magíster Mauricio Díaz recuerda con nostalgia su infancia en las montañas de Písac y Urcos, donde creció rodeado de ganado de ovejas y alpacas. Pero también en el taller de mecánica de su abuelo. «Eso inspiró mucho mi creatividad en el tema de mecánica. Pienso que soy ingeniero mecánico debido a esa experiencia», dice con una sonrisa. Su determinación lo llevó a la PUCP, donde se formó como ingeniero mecánico y descubrió su pasión por la tecnología.

En la Universidad, Mauricio encontró las herramientas para llevar sus sueños a la realidad. «La PUCP me dio las bases necesarias para poder conversar de igual a igual con ingenieros de Brasil, Alemania y otras partes del mundo», comenta. Durante sus años universitarios, no solo adquirió conocimientos técnicos, sino también una comprensión profunda de las dinámicas sociales y culturales que moldean a la sociedad. Su viaje desde las alturas de Cusco hasta los laboratorios de la PUCP fue solo el comienzo de una misión que hoy lo lleva de vuelta a sus raíces, con un arsenal de ideas revolucionarias y un espíritu incansable.

La PUCP me dio las bases necesarias para poder conversar de igual a igual con ingenieros de Brasil, Alemania y otras partes del mundo".

Mauricio Díaz en Brasil: aprendizajes y visión de futuro

El CITE Textil utiliza la fibra de alpaca para varias aplicaciones: exoesqueleto y guante inteligente con fibra de alpaca, diseñado para rehabilitar artritis y artrosis, combinando tecnología avanzada con propiedades termorreguladoras y repelentes a la humedad de la fibra.

Después de pasar por las aulas de la PUCP, Mauricio se dirigió a Brasil para hacer su maestría en la Universidad de Sao Paulo para luego estudiar en el Instituto Tecnológico de Aeronáutica (ITA). Durante este tiempo, tuvo la oportunidad de trabajar en proyectos tecnológicos de alto impacto. «Brasil me mostró el poder de la tecnología para transformar industrias enteras», afirma. Estos años fueron cruciales para entender cómo las innovaciones podían aplicarse a contextos específicos y mejorar vidas. En las bulliciosas ciudades brasileñas, entre conversaciones vibrantes y desafíos tecnológicos, Mauricio encontró la chispa que encendería la visión que aplicaría en el Cusco.

Quiero que las comunidades andinas sean parte de la revolución tecnológica global".

Con esta experiencia, Mauricio regresó a Cusco con una visión clara: aplicar lo aprendido en Brasil para desarrollar el sector de los camélidos en Perú. «Quiero que las comunidades andinas sean parte de la revolución tecnológica global», explica. Su meta es empoderar a los productores locales, brindándoles herramientas modernas que respeten y potencien sus tradiciones. Este enfoque integrador es el corazón de su proyecto en el CITE Textil Camélidos Cusco, donde la modernidad y la tradición se encuentran en una danza armoniosa.

Blockchain: innovación al servicio de las comunidades

La implementación del blockchain permite la transparencia en cada etapa del proceso productivo de la lana camélida, desde el cuidado de la fibra de los animales hasta la venta de los productos finales.

La tecnología de blockchain se basa en una cadena de bloques de operaciones descentralizada y pública. Al mismo tiempo, produce una base de datos a la que tienen acceso sus participantes, ya que es compartida. Ellos pueden rastrear cada una de las transacciones que se hayan realizado. La implementación de esta tecnología en la cadena de valor de los camélidos es una de las iniciativas más ambiciosas de Mauricio Díaz. «Lo que hace el blockchain es conectar a los actores de esta cadena, y al conectarlos se pueden contactar y hablar digitalmente», señala con entusiasmo. Además, ofrece transparencia en cada etapa del proceso, desde el cuidado de la fibra de los animales hasta la venta de los productos finales. En su oficina en Cusco, el ingeniero despliega con orgullo las nuevas aplicaciones que ha desarrollado, mostrando cómo cada fibra de lana puede ser rastreada hasta su origen.

Mauricio está convencido de que esta innovación beneficiará directamente a las comunidades andinas. «Queremos que los productores reciban un pago justo por su trabajo y que los consumidores puedan confiar en la calidad de lo que compran», dice. Su visión es crear un modelo sostenible que no solo mejore la economía local, sino que también preserve el patrimonio cultural de los Andes. A través de esta tecnología, busca conectar a los criadores de alpaca con los mercados globales, asegurando que cada producto cuente una historia de tradición y autenticidad.

Para él, la clave del éxito radica en la combinación de tecnología y tradición. Y su trabajo en el CITE Textil Camélidos Cusco es un testimonio de su compromiso con esta visión. Una que promete un futuro más justo y próspero para todos los involucrados en la cadena de producción de los camélidos.

Así, mientras el sol se oculta detrás de las montañas del Cusco, Mauricio contempla orgulloso el camino recorrido y, al mismo tiempo, el horizonte que se abre frente él. Siempre convencido de que la unión de innovación y cultura puede transformar vidas y forjar un futuro brillante.