"La psicología de la religión es tan antigua como la psicología misma"
Profesor del Departamento de Psicología de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica y de la Facultad de Psicología y Pedagogía de la Universidad Libre de Ámsterdam, Jozef Corveleyn será reconocido este miércoles 14 de octubre como profesor honorario de la Católica, en mérito a sus investigaciones en psicología. El destacado psicoanalista belga conversó con nosotros sobre su trabajo y sus recientes estudios.
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Jozef Corveleyn
¿Qué relación existe entre la psicología y la religión?
La psicología de la religión es la investigación del comportamiento humano en el contexto religioso o antirreligioso. Se trata de utilizar la psicología para comprender la conducta respecto de la religión; por lo tanto, el ateísmo y el agnosticismo son también estudiados. Al hablar de comportamiento no solo me refiero a las actividades religiosas que se puedan observar, como los rituales y ceremonias, sino también al modo de pensar y de sentir respecto de la religión.
Usted es autor del libro Cien años de la psicología de la religión. ¿Cómo ha cambiado en un siglo esta rama de la psicología?
La psicología de la religión es tan antigua como la psicología misma. Desde el comienzo de la psicología como una ciencia, ha habido investigadores interesados en el comportamiento religioso. En un primer momento, la psicología de la religión estaba más interesada en los sentimientos religiosos y cómo se desarrollaba el comportamiento religioso durante la vida. Hoy, esta rama de la psicología usa técnicas cuantificativas, herramientas como las encuestas y la observación directa, para investigar, principalmente, cómo la religión guarda relación con una vida saludable.
¿Y qué relación existe entre ambas?
Se ha comprobado que la mayoría de las personas que están en contacto con una comunidad religiosa viven vidas más saludables y felices. Así también, las personas que sufren alguna enfermedad y pertenecen a una comunidad religiosa tienen probabilidades de sanarse antes que aquellas que no tienen vínculos de este tipo.
En los últimos años, hubo muchos en los que la religión es la razón de ataques y atentados terroristas. ¿La psicología de la religión estudia estos casos?
Creo que la religión puede ser usada por el hombre para muchos fines exteriores a ella como, por ejemplo, ganar poder político. El fundamentalismo es un claro ejemplo de esto. El hombre puede usar la religión para justificar muchas cosas; sin embargo, estas no son parte de la esencia de la religión.
La próxima semana ofrecerá la charla titulada ¿Es la Depresión una Enfermedad Física? ¿Lo es?
En los últimos veinte años, se han llevado a cabo muchas investigaciones en el campo de la psiquiatría y de la psicología clínica que demuestran que la depresión no solo es el resultado de factores somáticos, sino que es causada por la interacción de factores genéticos –constitutivos de la persona–, el ambiente social en el que se desenvuelve y su desarrollo psicológico.
¿Por qué se pensó lo contrario?
La razón principal fue que los antidepresivos parecían dar excelentes resultados. La eficacia de algunos medicamentos dio la impresión de que la depresión podía ser curada únicamente de manera somática. Pero las investigaciones prueban lo contrario. Hay factores somáticos en la depresión que pueden ser aliviados con pastillas, pero estas no eliminan todas sus causas.
Entonces, los antidepresivos no son la única solución para la depresión.
No, algunas personas necesitan otro tipo de tratamiento. Dependiendo del subtipo de depresión, el temperamento del paciente y el ambiente en que este se desenvuelve, muchas veces es necesaria una terapia a largo plazo que acompañe a las pastillas. Por ejemplo, una persona perfeccionista que sufre de depresión necesita una terapia psicoanalítica a largo plazo. Si bien puede tomar pastillas por un corto tiempo, la verdadera ayuda para superar su cuadro será la terapia.
Entrevista: Verónica Uribe
Fotos: Franz Krajnik
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