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"La tecnología aumenta la productividad, pero no se ha reducido el esfuerzo humano"

El caricaturista y ensayista Carlos Tovar “Carlín” tratará el tema “Trabajar cuatro horas para que todos tengan trabajo“, durante el Viernes Económico que se organiza en nuestro campus. La cita es el 13 de setiembre, a las 4 p.m., en el auditorio Gustavo Gutiérrez de la Facultad de Ciencias Sociales.

  • Carlos Tovar "Carlín"
    Arquitecto, caricaturista y escritor
  • Texto:
    Eduardo Alcántara
  • Fotografía:
    Felix Ingaruca

A su modo de ver, la solución de la crisis económica mundial está en reducir la jornada laboral a cuatro horas. ¿De qué manera?

Podemos resolver la crisis mundial, no solo económica, sino social y política; reduciendo la jornada. Aunque parezca complejo, esto sí es posible, porque la contradicción fundamental del capitalismo se da por la diferencia que da el avance de la tecnología, que produce un aumento de la productividad, y la incapacidad del capital para traducir este avance tecnológico en la reducción del esfuerzo humano.

La tecnología, entonces, no ha facilitado la vida de la personas.

Debería haber sido así, pero no. Karl Marx dice que la maquinaría que debería servir para facilitar la vida de los seres humanos, en manos del capital, se convierte en un arma para esclavizar al ser humano. Con el avance de la tecnología, en los últimos 30 años, se ha duplicado la productividad de todas las personas. Lo que debió pasar, si el sistema hubiera sido sensato, es que nuestro trabajo se reduzca a la mitad o que los salarios aumenten.

¿Si la jornada laboral es de cuatro horas, también se reducirían los salarios?

No tienen por qué reducirse. Nosotros hemos duplicado nuestra productividad. Lo justo es que se reduzca la jornada laboral, sin reducir los salarios. El desempleo se produce por el avance de la tecnología, la maquinaria ha reducido el personal. Con esta medida suprimiríamos el desempleo y la pobreza (con el pleno empleo mundial). Estaríamos haciendo que más personas tengan empleo, y solucionaríamos el cuello de botella donde no crece la demanda agregada, en otras palabras, donde no crece la capacidad adquisitiva de los compradores.

¿Esto implicaría que los países cambien su modelo económico?

Solo estoy pidiendo que se reduzca la jornada laboral, no me meto con el modelo económico. Pero la reducción de la jornada sí significaría un cambio fundamental en el modelo económico.

¿Por qué cree que esa fórmula podría funcionar en todas las sociedades?

Tendríamos que preguntarnos: «¿Por qué no?». El mundo está globalizado y tenemos economías similares. Eso lo hace posible, pero también indispensable. No podría aplicarse esta medida (la jornada de 4 horas) si no es de manera universal. Esto se daría con una huelga mundial, por supuesto pacífica.

¿Cómo podríamos poner esta propuesta en práctica?

Para comenzar, pediría que se implante esta medida a los trabajadores que cumplen con un horario y son asalariados. A los que son independientes no les impondría nada, pues es muy complicado y pueden protestar, porque seguro quieren trabajar más de 14 horas diarias y la ley los ampara. Bastaría con los asalariados para resolver el problema, porque son la mayoría. Las empresas que tienen personal asalariado, convocarán a aquellos que trabajan independientemente. Los independientes serán absorbidos por ofertas de empleo ventajosas, con mayores beneficios, y tendrán una alternativa laboral más atractiva.

¿Y qué pasaría luego?

Si conquistáramos la jornada de cuatro horas, volveríamos a medir la productividad de aquí a 20 años, para volver a reducir la jornada a tres horas, y luego en otro periodo, a dos horas, y trabajaríamos cada vez menos. La verdadera liberación del ser humano está en dejar de trabajar. El trabajo no es más que esclavitud, el ser humano se realiza en su actividad libre, fuera del trabajo.

Debo suponer que usted trabaja cuatro horas al día…

No tendrías por qué suponerlo. Yo no le exigiría a nadie trabajar cuatro horas, porque las condiciones del mercado nos impone trabajar más tiempo. Pero sí, trabajo cuatro horas diarias. Es una decisión, además cuento con tecnología para hacer mi trabajo más rápido. Cobro por mi trabajo lo suficiente para vivir con tranquilidad y poder manejar a mi gusto el tiempo que me queda libre.

Para saber más sobre este evento visita nuestra Agenda PUCP

El Perfil

Nombre: Carlos Tovar «Carlín»

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