Los sueños de un campeón sudamericano de kung-fu
Mauricio Ortiz, estudiante de Antropología de la PUCP, ganó tres medallas (una de oro y dos de plata) en el Campeonato Sudamericano de kung-fu, realizado el 12 y 13 de noviembre en Buenos Aires. Aquí su historia.
Texto:
Akira MaeshiroFotos:
Roberto Rojas
«Yo era fanático de los Power Rangers y, como todo niño, quería ser uno de esos superhéroes que siempre veía por televisión». De esta manera, Mauricio empezó a practicar wushu, arte marcial conocido popularmente como kung-fu, cuando tenía solo cinco años, imaginando ser uno de esos personajes que eliminaban a criaturas monstruosas.
Hoy, 18 años después, mientras sostiene las medallas de diversas competencias nacionales e internacionales que ha ido ganando -incluidas las que obtuvo recientemente en Argentina-, se percata de que sus sueños fueron bastante más lejos de los que tuvo de niño. Y en sus recuerdos se ve cantando con emoción nuestro himno nacional, con la bandera del Perú en hombros y derrotando a los favoritos locales.
Mauricio Ortiz (23 años), estudiante de Antropología de nuestra Universidad, participó en el Campeonato Sudamericano de kung-fu, realizado el 12 y 13 de noviembre en Buenos Aires. “Siento orgullo de representar a Perú. En promedio van delegaciones de otros países con 100 deportistas. Nosotros solo fuimos once y terminamos muy bien posicionados”, dice . Y, así, Mauricio consiguió dos medallas de plata (una en la modalidad grupal mano libre y otra en duilian masculino) y una de oro (en la modalidad hung gar masculino).
“La sensación de ganar fue como la primera vez que obtuve medalla en un torneo sudamericano en el 2013”, cuenta. La pandemia, sin duda, generó un espacio de incertidumbre y una sensación de empezar de cero para muchos. Entonces, recuerda: “No teníamos competencias y a pesar de que no se podía salir, he intentado practicar en todo momento”.
Me interesó la Antropología porque me ayudaba a entender la cultura desde un punto de vista distinto. Por ejemplo, el wushu es una comunidad en sí y tiene sus propias características. Y la carrera que elegí me permite ver cómo funcionan este tipo de comunidades”.
Y fue en ese escenario de dificultades que nuestra Universidad representó un espacio esencial para Mauricio. “Mi preparación para el Sudamericano ha sido, básicamente, las competencias en Fedup, que me han permitido mantenerme en ritmo. Que en la PUCP se practique el wushu me sirvió mucho para poder entrenar”, cuenta.
Asimismo, nos relata que, durante el torneo, el hecho de empezar ganando la medalla de plata en la modalidad grupal, con todas las complejidades que esto representaba no solo en la propia competencia, sino también para los entrenamientos (muchas veces virtuales), le dio más seguridad para su presentación individual en la que resultó ganador.
Kung-fu: una forma de vida
Si Mauricio Ortiz entró al wushu como un simple juego de niños, con el tiempo fue descubriendo un universo nuevo y complejo que se convirtió en una manera de vivir. «Uno piensa que el wushu solo es golpear, pero en realidad es mucho más. Hay modalidades y toda una filosofía detrás de respeto a tus compañeros, a tu maestro, a los rivales y a los jueces en las competencias. Por ejemplo, por lo general, los jueces son maestros y, por más que no estemos de acuerdo con sus decisiones en los torneos, hay que respetarlos”, complementa.
Y es así que esta disciplina, poco a poco, se convirtió en su identidad. Incluso, hasta la elección de su carrera respondió a ello. “Me interesó la Antropología porque sentí que me ayudaba a entender la cultura desde un punto de vista distinto. Por ejemplo, el wushu es una comunidad en sí y tiene sus propias características. La carrera que elegí, justamente, me permite ver cómo funcionan este tipo de comunidades”, expresa.
Para Mauricio, este arte marcial se ha convertido en una parte esencial en su vida. “No puedo dejar de practicarlo. Ya es parte de mí. No lo considero un hobby, sino una forma de vida, una pasión”, finaliza.
Sus logros
- 12 veces campeón nacional
- 16 veces campeón metropolitano
- 5 veces campeón sudamericano
- 3 veces campeón panamericano
- Sexto puesto en el World kung-fu championship
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ENRIQUE ALVA CAHUASA
Felicitaciones, Mauricio, te iniciaste en le ESCUELA TRADICIONAL SHAOLIN TZU HONG CHIE CHUEN, aprendiste a tener seguridad y confianza en tus prácticas del Kung Fu, aun recuerdo tu mirada tímida y nerviosa cuando llegaste, ahora eres un gran guerrero, tuviste buena base y fortaleza en el estilo tradicional, bajo la guía del Profesor Edwin Alva Calero y Maestro Enrique Alva Cahuasa.
Sigue adelante. Cumple tus metas, en el área profesional y Marcial, Dios te bendiga.