La última Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) se celebró entre el 31 de octubre y el 12 de noviembre de este año en la ciudad de Glasgow, Reino Unido. El evento atrae cada vez más atención internacional debido a la creciente amenaza que representa la crisis climática para el mundo. Acudieron delegados de alrededor de 200 países y el Perú no fue la excepción. Entre quienes asistieron representando a nuestro país se encuentran varios miembros de la comunidad PUCP. Aquí reunimos algunas de sus experiencias. 

Representando a la juventud 

Cuando estudiaba Ingeniería Industrial, Valery Salas se inició en la lucha por cuidar el medio ambiente. En ese entonces Valery se unió a la organización Clima de Cambios, y, cuando a Perú le tocó ser anfitrión de la COP20, fue voluntaria en la Conferencia de Juventud y Cambio Climático (COY10). 

La cumbre de Glasgow es la segunda COP en la que participa y le ha permitido encontrarse con otros jóvenes activistas de todo el planeta. “Ello me inspira a seguir trabajando en nuestro país por medidas más ambiciosas para el bienestar de la comunidad desde un enfoque intergeneracional”, señala.  Valery resalta el rol que tuvo la juventud en la delegación peruana de esta cumbre. “Después de muchos años de lucha del movimiento climático juvenil en Perú, hoy se cuenta con representación joven ante la Comisión Nacional de Cambio Climático, que pudo estar presente en las negociaciones”, afirma. 

La joven ingeniera señala que su experiencia en Glasgow la ha dejado con “sentimientos encontrados”. “Se hizo un llamado a disminuir el uso de carbón, y los temas de daños y reparaciones en favor de los países vulnerables han cobrado mucha relevancia, pero al final no hubo una decisión al respecto”, afirma. 

Después de muchos años de lucha del movimiento climático juvenil en Perú, hoy se cuenta con representación joven ante la Comisión Nacional de Cambio Climático, que pudo estar presente en las negociaciones”.

Tras la COP, Valery espera que en Perú haya más iniciativas en conjunto entre el sector público, el privado y la sociedad civil para adaptarnos a los cambios que vengan, poniendo a las comunidades más vulnerables en el centro de las decisiones. 

Promoviendo cumbres más inclusivas

El Dr. Víctor Nomberto, egresado de nuestra Especialidad de Sociología, lleva más de dos décadas participando en las cumbres climáticas. En la histórica COP3 de Kioto, fue parte de la elaboración del Artículo Número 12 sobre mecanismos de desarrollo limpio. 

A la COP de Glasgow fue con la meta de lograr un acuerdo para llegar con emisiones cero de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero. Respecto a las negociaciones sobre ese punto, el Dr. Nomberto se muestra satisfecho. “Hubo distintas posiciones pero hemos avanzado y en la COP 27 o 28 llegaremos al acuerdo definitivo”, dice optimista. 

En general, su balance de esta cumbre es positivo. Para el futuro, espera lograr mayores medidas para la protección del litoral peruano, un problema que él considera urgente de resolver. “Mi mayor preocupación es el cuidado del Océano Pacífico y evitar que arrojemos desechos, especialmente plásticos, a las costas de nuestro país, porque eso causa mucho daño al litoral y a las especies marinas”, explica. 

Quisiera asegurar que los pueblos indígenas, las organizaciones no gubernamentales de todo el mundo y los jóvenes puedan participar en las conferencias y hacer oír sus voces"

Fomentando el desarrollo responsable

Melissa Marengo es egresada de Derecho, con Especialidad en Derecho Ambiental. Actualmente, trabaja como experta en Políticas Públicas Ambientales y Financiamiento Climático en el Ministerio de Economía y Finanzas. Su interés por el cambio climático y la problemática ambiental surgió a inicios de su carrera. 

“Entendí que puedo emplear mi profesión para generar un impacto que trascienda mi esfera personal y se traduzca en un resultado positivo en beneficio del país”, afirma. “El desarrollo de la COP 26 ha sido particularmente retador”, dice Melissa sobre la cumbre. “Esta ha sido una conferencia que ya llevaba un año de retraso debido a la pandemia y las expectativas de alcanzar un resultado realmente ambicioso eran bastante altas”, sostiene. 

Y aunque reconoce que existe la percepción de que los resultados de la COP 26 no han sido suficientes, considera que se han generado avances importantes, como la eliminación gradual de la energía generada con carbón y los acuerdos en materia de financiamiento. 

Para la abogada, las políticas de desarrollo deben poner especial énfasis en dichos aspectos. “La adaptación es un reto, pero también puede ser vista como una oportunidad para que el Perú encauce sus sendas de crecimiento hacia un desarrollo resiliente al clima”, resalta.

Entendí que puedo emplear mi profesión para generar un impacto que trascienda mi esfera personal y se traduzca en un resultado positivo en beneficio del país".

La importancia de actuar oportunamente

Como Melissa, Miriam Somocurcio es abogada especialista en derecho ambiental. Actualmente, estudia un doctorado en esa área en nuestra Universidad. Mientras realizaba una maestría en Francia, Miriam se involucró más en el activismo ambiental. Su primera cumbre fue la COP 20 en nuestro país y al año siguiente acudió a la de París. 

Tras la reunión de Glasgow, Miriam considera que siempre queda la sensación de que se pudo ser más ambicioso en las decisiones y compromisos. “Pero así es que se avanza”, comenta. “Debes avanzar tres pasos, pero avanzas dos”, agrega. Aun así, Miriam rescata varios compromisos importantes que se han hecho en esta COP. «El principal es la Declaración de Glasgow sobre protección de bosques, que implica una serie de medidas para reducir los cambios de uso del suelo, uno de los principales factores que contribuye a la deforestación en Perú», detalla. 

Para Miriam, es esperanzador ver que los jóvenes se están involucrando y participando en espacios como la COP. “Es bueno saber que no estamos solos, ver que hay tantas personas que han entendido lo urgente que es actuar frente a ese problema”, afirma. Lo más conmovedor es encontrarse con personas que provienen de los países más vulnerables, indica. 

 “Ellos están ahí para decirle al mundo ‘necesito que actúes y que hagas más, porque de tus decisiones depende el futuro de mi pueblo’. Eso para mí es una lección increíble”, concluye. 

Es bueno saber que no estamos solos, ver que hay tantas personas que han entendido lo urgente que es actuar frente a ese problema".