Los logros alcanzados por los alumnos y alumnas de Ingeniería Biomédica PUCP-UPCH esta vez brillan ante los reflectores. Siete estudiantes de esta carrera son participarán del video realizado por los 50 años de la Fundación BBVA, organización que desde el 2022 ha financiado 14 proyectos creados para combatir la COVID-19. 

Como se recuerda, nueve trabajos de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) y cinco de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH) ganaron el Concurso de Proyectos de Investigación Científica de la Fundación BBVA, un evento realizado en el marco del convenio que tiene la organización con la carrera de Ingeniería Biomédica. Además, dos de esos proyectos, uno por universidad, pasaron a una segunda etapa y ahora recibirán S/ 30 mil cada uno.

Bárbara David, responsable de proyectos sociales de la Fundación BBVA, comenta que desde hace medio siglo han trabajado a favor de la cultura, la educación y la sostenibilidad, también enfocados en la investigación científica. “Por ello, el convenio fue importante para poder financiar proyectos para luchar contra la COVID-19. Para nosotros, es fundamental apostar por los estudiantes porque son el futuro del país”, resalta David.

El convenio fue importante para poder financiar proyectos para luchar contra la COVID-19. Para nosotros, es fundamental apostar por los estudiantes porque son el futuro del país".

En el marco de la grabación de este video, pudimos conversar con estos siete estudiantes que participaron en ambas etapas del convenio para conocer el impacto social que tuvieron y cómo este apoyo aporta a su crecimiento profesional.

Un proyecto de telemedicina que salvará vidas

En principio, el proyecto “Teleecografía asíncrona para tamizaje de daño pulmonar causado por la COVID-19” estaba dividido en tres grupos de trabajo que ganaron la primera etapa del concurso de la Fundación BBVA. Sin embargo, unieron esfuerzos para seguir avanzando y conseguir financiamiento.  

Este equipo reforzado trabajó con inteligencia artificial aplicada a la teleecografía para medir el daño pulmonar. Se usaron datos de Pasco y Áncash, regiones donde se comprobó que utilizando dicho ecógrafo puede darse un diagnóstico. El alumno Francis Reyes cuenta que tuvo a cargo la implementación del hardware para el sistema de adquisición de los equipos y la conexión entre ellos. También contribuyó en el diseño de la interfaz gráfica del sistema, buscando que sea amigable para el usuario.

«Nuestro proyecto consta de un sistema basado en tres cámaras, un acelerómetro, una computadora y un ecógrafo. El video y los datos del acelerómetro son capturados y guardados en una computadora para posteriormente ser subidos a la nube y ser descargados por un médico. Esperamos que pueda replicarse en zonas rurales, pues ofrece una solución a la escasez de radiólogos en el país».

Francis Reyes
Estudiante de Ingeniería Biomédica

Con optimismo, el estudiante afirma que, además de detectar el daño pulmonar, este equipo permitirá obtener ecografías para realizar controles a gestantes y sus bebés, así como para descartar patologías de hígado y la presencia de tumores.

Un proyecto de Ingeniería Biomédica con mucho potencial

Este proyecto es asesorado por el magíster Stéfano Romero, profesor del Departamento de Ingeniería. Él está a cargo de este trabajo que busca solucionar un problema que se da sobre todo en localidades sin acceso a recursos tecnológicos y clínicos. Para él, la articulación de la empresa con la academia ha sido fundamental.

“A través del financiamiento podemos comprar insumos, ecógrafos o computadoras que puedan procesar algoritmos. Se invierte en las personas y su aprendizaje. Este proyecto tiene mucho potencial en la medida que se pueda explorar y que se use la ecografía como un medio”, comenta el Mag. Romero. 

Él señala que esta no es una tecnología costosa y permite poder adquirir información de forma en tiempo real, rápida. “Gracias a los protocolos asíncronos, se puede manejar de forma un poco más accesible”, agrega. 

A través del financiamiento podemos comprar insumos, ecógrafos o computadoras que puedan procesar algoritmos. Se invierte en las personas y su aprendizaje”.

El equipo continúa trabajando arduamente en la continuación de su trabajo y a fines de marzo de 2023 entregará un prototipo funcional probado en laboratorio, un artículo científico, y un video de difusión que explique los logros alcanzados y su impacto en la población.

«Trabajé en un proyecto complementario al Telecovid, que busca lidiar con la dificultad de envío de información obtenida con la ecografía. En zonas rurales, la señal de Internet es nula o pésima. Lo que buscamos es transmitir toda esta información de una forma simple. Primero, identificamos la información clave del video. Luego, la reconciliamos en una sola imagen. Esa reconstrucción llegará al médico inmediatamente, pues una imagen pesa mucho menos que un video”.

Naomi Guevara
Egresada de Ingeniería Biomédica

Implementando tecnología en las regiones

Leslie Urdiales y Andrea López agradecieron el apoyo que la Fundación BBVA le dio a su proyecto Hayñiq Kay MASI, seleccionado entre los 14 de la primera etapa. Ellas afirman que este trabajo les permitió conocer otras realidades del Perú y buscar soluciones poniendo en práctica todo lo aprendido. El objetivo era adaptar el ventilador MASI a una ciudad con más de 2 mil metros de altura, como lo es Chachapoyas. Pero también fue una experiencia que les permitió definir su línea de carrera.

«En el Hospital Regional Virgen de Fátima, encontramos otros equipos de la unidad de cuidados intensivos que necesitaban ser calibrados para que funcionen de manera correcta. Hicimos ajustes en monitores de funciones vitales, bombas de infusión, bombas de perfusión, por lo que pudimos aportar a la sociedad en un momento de crisis como la pandemia”.

Leslie Urdiales
Estudiante de Ingeniería médica

Una intervención no invasiva de MASI

El estudiante Germán Leyva fue parte de este proyecto que realizó ajustes en el ventilador mecánico MASI para lograr que sea menos invasivo, ya que este sistema -afirma- puede tener efectos secundarios perjudiciales en los pacientes de la COVID-19, incluso después de ser sometidos a terapia.

«La ventilación no invasiva previene que se tenga que intubar a un paciente y es una manera más segura de poder tratarlo. Haber tenido la oportunidad de liderar este equipo me abrirá puertas a futuros proyectos y me permitirá crecer en el mundo laboral».

Germán Leyva
Estudiante de Ingeniería Biomédica