La PUCP reconoce como profesor emérito del Departamento de Artes Escénicas al Dr. Luis Peirano Falconí
La Universidad otorga este reconocimiento al Dr. Luis Peirano por su destacada dedicación a la docencia universitaria, y a su relevante contribución a la fundación y crecimiento de los estudios universitarios en comunicaciones y artes escénicas en la PUCP. La ceremonia se realizará el jueves 25.
Texto:
Fiorella PalmieriFotos:
Archivo PuntoEdu, Archivo PUCP
El Dr. Luis Peirano Falconí es uno de los más reconocidos directores nacionales de teatro y ha forjado un fuerte vínculo con nuestra Universidad. El jueves 25, se realizará la ceremonia en la cual se le otorgará la distinción de profesor emérito del Departamento Académico de Artes Escénicas de la PUCP. El reconocimiento obedece a su destacada dedicación a la docencia universitaria y a su relevante contribución a la fundación y crecimiento de los estudios universitarios en comunicaciones y artes escénicas en nuestra Universidad.
A mí me ha dado mucho la Universidad. No puedo entender mi vida sin la Católica".
El destacado artista e intelectual trabajó por el desarrollo de las artes y la cultura desde múltiples frentes. Actuó y dirigió innumerables puestas en escena del teatro peruano. En el ámbito educativo, fue presidente de la Comisión de Gobierno, y primer decano de la Facultad de Ciencias y Artes de la Comunicación. Asimismo, fue decano encargado de la Facultad de Artes Escénicas (Fares). Ya con una trayectoria consolidada, fue ministro de Cultura en el periodo 2011-2013.
El profesor Luis Peirano en la PUCP
Desde que ingresó como estudiante en 1964, hizo de la PUCP uno de los principales escenarios de su vida, vínculo inquebrantable que mantiene durante casi 6 décadas.
“A mí me ha dado mucho la Universidad. No puedo entender mi vida sin la Católica, por eso no me he ido ni me voy a ir todavía”, dijo el veterano director y productor en una entrevista en el 2017 en ocasión del centenario de la Universidad.
Su inclinación por los escenarios surgió espontáneamente en nuestra antigua Facultad de Letras. En aquel momento de exploración, ingresó al Teatro de la Universidad Católica (TUC), que desde 1961 funcionaba en una casa aledaña al claustro académico de la Plaza Francia.
Guiado por Ricardo Blume, fortaleció una vocación a prueba del tiempo. “Blume viene de una escuela clásica. Él decía: ‘yo les voy a enseñar la retaguardia, después ustedes pueden hacer la vanguardia’. Y fue verdad, porque apenas comencé a dirigir, hice obras de teatro documento, obras con autores chilenos o Brecht, con la seguridad de que yo sabía decir el verso clásico español, sabía analizar una obra, un texto”, expresó.
El patio de Letras
En la década de 1960, Peirano alternó sus estudios de Letras con su formación en el TUC. Inspirado por profesores como Luis Jaime Cisneros, Honorio Ferrero o Lucho Soberón, optó por la Sociología. Impulsado por una curiosidad infinita por aprender, obtuvo varios grados académicos: fue licenciado en Sociología y doctor en Humanidades por la PUCP; y gracias a una beca, en 1972, dejó la dirección del TUC para realizar la Maestría en Comunicaciones en la Universidad de Wisconsin, Madison (EE.UU.).
Todos estos conocimientos fueron útiles en sus facetas como investigador y periodista cultural. Es autor de 51 publicaciones académicas y 13 investigaciones en temas de comunicación, sociología, educación, teatro y cultura.
Espíritu de la casa
En esta, su alma máter, logró poner en marcha dos anhelados proyectos: la creación de la Facultad de Ciencias y Artes de la Comunicación, de la que fue decano por una década (1998-2008); y contribuyó a la formación de la Fares, en la que se desempeñó como presidente de la Comisión de Gobierno, decano encargado y docente.
Mucho antes, recién graduado como magíster en la década de 1970, presentó la propuesta para crear una facultad de comunicaciones en la PUCP. Más de 20 años pasaron para que la idea se concretara con el apoyo del hoy rector emérito, el Dr. Salomón Lerner Febres.
La nueva unidad académica, que incluyó a la Especialidad de Artes Escénicas, fue la semilla de lo que más adelante sería la Fares, que brinda formación profesional en cuatro especialidades: Creación y Producción Escénica, Danza, Música, y Teatro. Ambas facultades forman parte del espíritu de la Universidad, inconcebible sin las artes.
Luis Peirano y el arte de vivir
Muchas cosas han cambiado para los artistas desde la época en la que el joven Peirano hacía teatro a escondidas de su madre. “A cualquier persona que haya hecho teatro en ese momento le decían: ‘¿cuál es su profesión, de qué vive?’. Hasta ahora pasa eso, aunque ya no tanto”, recordó hace unos años.
Como director de teatro, el doctor Peirano ha dirigido numerosas producciones teatrales a lo largo de su trayectoria, entre las que se cuentan los autos sacramentales El gran teatro del mundo y La vida es sueño, de Pedro Calderón de la Barca; Galileo Galilei, de Bertolt Brecht; e Historia de un gol peruano, de Alfredo Bushby. Como actor, Peirano ha protagonizado el montaje Patrón Leal, escrito por Alfonso Santistevan, adaptación de El rey Lear, de William Shakespeare. En el campo de la comunicación escrita, ha publicado diversos ensayos sobre medios de comunicación y la cultura peruana, tales como “Risa y cultura en la TV peruana” y “Educación y comunicación popular en el Perú”.
“La memoria más importante es la que sustenta el quehacer del teatro (…). Es la que hace que un texto que fue escrito cuatro siglos antes de Cristo tenga vigencia hoy. El teatro no es pasado ni es futuro, es presente continuo”, comentó en el 2017, año en el que también dirigió el auto sacramental El Gran Teatro del Mundo, megaproducción que presentó en el atrio de la Iglesia San Francisco.
Su legado se mantiene vigente como parte de la historia de nuestra Universidad y en la memoria del público que apreció su trabajo en 69 producciones escénicas.
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