En agosto se anunciaron a las seis obras experimentales ganadores. El propósito de este concurso es reconocer la producción de obras experimentales peruanas y ampliar los paradigmas audiovisuales, motivando la creatividad de formas no convencionales. Los directores de las obras ganadoras recibirán premios de 15 mil soles cada uno, tres de los cuales han sido destinados a cuatro directores ex alumnos de la PUCP. Los ganadores de nuestra comunidad académica son: Alonso Depaz Inoue por “María la Marimacha”; la dupla José Fernández del Río y Liliana Albornoz Muñoz por “Hecho en Perú”; Ivan D’Onadío Muñoz por “Órgano”, quien además tuvo una mención honrosa por «Nacimiento» en el mismo concurso por “Nacimiento”.

“María, la Marimacha”, de Alonso Depaz

Pese a la carencia de los medios materiales, Alonso y su equipo se las  ingeniaron para construir un lenguaje simbólico y confluir en la propuesta de esta obra experimental, que es una adaptación de la historia de “María, la Marimacha”.

“El cuento es conocido por todos, pero el título de la obra es muy significativo para mí. Leí «María Marimacha. Los caminos de la identidad femenina”, un libro del Fondo Editorial PUCP, en el que hablan del tema. Es muy interesante porque en realidad es un cuento de género, «aleccionador». María es una chica desobediente y la describen como marimacha. Siempre juega con hombres, que nunca la llevan a integrar al grupo, pero ella está rompiendo su rol”, explica Depaz.

Además, el director deja en evidencia algunos elementos importantes de la historia: María es castigada por un personaje masculino, quien deja sus restos en la cocina, como regresándola al lugar al que supuestamente pertenece. “Es un cuento machista, pero yo quise abordar este contenido no como una apología, sino dejando en evidencia estos símbolos”, señala Alonso, quien, satisfecho por este logro, tiene pensado hacer más cortometrajes de ficción y un documental.

“Hecho en Perú”, de José Fernández y Liliana Albornoz

“Si bien un premio no cambia tu vida y sigues siendo el mismo de siempre, esto es un respaldo a tu trabajo. Un video arte muchas veces tiene una vida muy corta, porque no tiene muchas posibilidades de ser expuesto. Esto ayuda a muchos a entender que implica esfuerzo y que hay un concepto detrás”, declara José Fernández, director de la obra. “Hecho en Perú”, empezó como una idea sobre la vivencia de Liliana Albornoz, que refleja la condición del migrante, sobretodo latino. “Esta es una creación colectiva y nosotros creemos mucho en el trabajo colaborativo. Todos somos hacedores, cada uno propone desde su herramienta, articulando un trabajo orgánico”, comenta Daniel Lauz, ex alumno PUCP que también cumplió un rol fundamental en la realización del experimental.

La obra expone la acción de caminar una distancia considerable con un saco del mismo peso de Liliana, quien al ejercer esta performance experimenta el verdadero agotamiento físico, generando una simbología del migrante al cruzar una frontera. “Hay una relación directa y de complicidad con quien observa, por eso es un video performance y no un simple registro de un acto. Este es un esfuerzo colectivo por captar las sensaciones que fluían en el lugar, como el sufrimiento”, explica Liliana.

“Órgano” y «Nacimiento», de Iván D’Onadio Muñoz

A lo largo de esta obra experimental se muestran diferentes texturas que orientan al espectador. La premisa principal es ver desde otro ángulo algo que es familiar o íntimo puede ser desconocido, oscuro o externo. “Me gusta trabajar con las formas, que éstas no sean exactamente lo que son, sino dar otras sensaciones de lo que normalmente se ve: transformar un cuerpo en otra cosa” detalla Iván, director del corto experimental. “Hay una temática que me gusta más: cómo lo íntimo se puede convertir en algo desconocido o viceversa. Es una transición psicológica, casi inconsciente”, agrega.

No es la primera vez que Iván gana un premio por realizar una obra experimental. Además obtuvo una mención honrosa en este mismo concurso por otra obra que presentó. «Nacimiento” es la exploración en un muelle abandonado y hecho ruinas en el mar, pero que en determinado momento del día se llena de vida, de aves. “Decidí explorar por el proceso de la noche, el nacimiento de la vida, hay un juego visual de las luces, los reflejos, el mar. Intento hacer un concepto de nacimiento”, finaliza.