Cuando Sandra estaba frente a la página en blanco pensando cómo empezar la carta de motivación que debía enviar a la Universidad de Salamanca en España para postular a una beca, pasó por su mente todo lo vivido en sus apenas 23 años. “Tengo la impresión de que soy alguien que aprendió a percibir la realidad por contraste de un desencuentro de experiencias, estudié en un colegio estatal, egresada de una universidad pública, que tuvo que trabajar y estudiar al mismo tiempo, que viajó a Estados Unidos por una beca y estudio en una de las universidades más diversas culturalmente en el mundo, como George Mason, que viajó y conoció a líderes latinoamericanos en México, que debatió temas de comunidades indígenas en Bolivia con otros estudiantes, que realizó un intercambio en la PUCP, y que trabajó en varias ONG y proyectos buscando su espacio en el mundo”, dice un fragmento de dicha carta. A su corta edad, su esfuerzo y dedicación fueron premiados con grandes experiencias. Una de ellas fue su paso por las aulas de nuestra Universidad y sus actuales estudios de maestría en España.

Nuevas perspectivas

Sandra Phoco Cruz nació en una comunidad campesina de Pumaorcco, en Cuzco, lugar que tuvo que dejar con sus padres siendo muy pequeña, debido al clima de inseguridad y violencia que el conflicto socio-político de nuestro país provocó. Ella pasó la mayor parte de su vida en Trujillo, y pese a todas las carencias y desafíos que se presentaron al finalizar la escuela, ingresó a la Universidad Nacional de Trujillo, donde empezó su travesía por el mundo del Derecho. “De esa vida bifurcada, fue que nació mi vocación para el Derecho, porque, a través de los relatos y pasajes de la vida de mis padres, entendí que el país tenía una serie de conflictos por resolver con su propio pasado, y que el Derecho me iba a permitir entender esa realidad y lograr interpretarla a través de mis propias experiencias”, comentó Sandra.

Estando en quinto ciclo de la carrera, Sandra postuló al programa de movilidad estudiantil de la Red Peruana de Universidades (RPU), y obtuvo una vacante para realizar un intercambio en la PUCP. “Fue muy emocionante para mí, porque significaba mucho más que un tiempo fuera de Trujillo. Para mí, era libertad, esa que me iba a permitir dedicarme exclusivamente al ámbito académico. Tenía claro lo que quería hacer”, expresó la joven.

El factor determinante que impulsó a que Sandra eligiera la PUCP fue la oportunidad de demostrarse a sí misma que podía competir en igualdad de condiciones con un grupo muy diverso de personas. “Si algo puedo decir de la PUCP, es que hay espacios para la diversidad, para las oportunidades, para el desarrollo de la crítica y de las ideas por más diferentes que estas sean. Hay espacios para la libertad”, comentó Sandra.

Al finalizar su carrera, decidió postular a una beca en el programa Máster de Análisis Económico del Derecho en la Universidad de Salamanca, en España, sin embargo, las dudas empezaron a rondar por su cabeza. Por esta razón, se comunicó con el Dr. Enrique Ghersi, docente de nuestro Departamento de Derecho, quien la ayudó a concretar esa decisión. “Recuerdo cuando conversamos por celular. Yo estaba en Trujillo, dudando si postular a hacer la maestría en España, y me dijo: ‘siempre existen formas y modos de salir adelante, apuesta por ti, porque apostar por los sueños nunca nos llevan al fracaso’. Y eso hice”, expresó la estudiante.

Sin duda, la vida le tiene preparada a Sandra muchas oportunidades más en el camino, y ella está lista y dispuesta a aprovecharlas. “He conocido a gente maravillosa en el mundo, a tanta gente de tantos lugares, culturas, idiomas y que han marcado de forma importante mi vida, y la han cambiado para siempre”, finaliza.