La protección y respeto a nuestra originalidad es trabajo de todos y cada uno.

Cada uno de nosotros expresa su originalidad en el día a día a través de trabajos académicos, expresiones artísticas, desarrollos arquitectónicos, obras fotográficas, literarias o musicales, también lo hacemos cuando desarrollamos nuevos equipos o procedimientos, creamos softwares o diseñamos creativamente; es decir, para crear no existe otro límite que los sueños y el talento.

La protección y respeto a nuestra originalidad es trabajo de todos y cada uno. No se trata solo de reclamar en caso alguien afecte nuestros derechos sino, también, de respetar los derechos de los demás, lo que significa un cambio importante de conductas y valoraciones; así, respetamos el trabajo y esfuerzo del otro en gestos tan simples como cuando compramos libros originales, citamos los fragmentos de los textos de terceros, adquirimos licencias de software o contratamos servicios de provisión de contenidos audiovisuales para ver nuestras películas favoritas, por ejemplo.

En los últimos meses hemos visto casos lamentables que ponen en evidencia el poco respeto que algunos tienen por el trabajo de los demás y, especialmente en el mundo académico, es un pecado imperdonable. Quien ve la vida de una forma simplista y carente de valores verá como una opción el aprovecharse del esfuerzo del otro, a través de conductas tales como el plagio y, así, quien comienza en actos menores cada vez va excediendo más los límites de lo permitido para acabar en grandes fraudes que pueden traer abajo vida y obra de aquel que siguió por el mal camino.

Y esto no es exclusivo de nuestro país, con frecuencia políticos, académicos, empresarios y tantos otros líderes ven sus nombres y prestigios desaparecer cuando se descubren sus tropelías; en consecuencia, ¿qué es mejor a largo plazo: el riesgo de lo ilícito o el crecimiento fruto del esfuerzo propio? Sin lugar a dudas nuestra imagen se construye cada día, no ahoguemos nuestro potencial con malas prácticas que van a traer consecuencias trágicas para nuestro futuro. Seamos originales, demos a conocer nuestro talento y valía y, en cada paso, la propiedad intelectual nos acompañará como garante y guía. Valoremos nuestra creatividad, respetemos a los demás y celebremos con alegría este día tan nuestro y tan humano.

En agenda:

Evento: Celebración del Día de la Originalidad en el cierre del Mes de la Investigación
Organiza: Oficina de Propiedad Intelectual
Día, horario y lugar: 29 de septiembre, de 12 a 2 p.m., en el jardín frente a la cafetería de Arte
Ingreso: libre