Después de dos años, los alumnos regresan a las aulas para retomar sus estudios de forma semipresencial. Durante la pandemia fuimos afectados por la falta de socialización dado el latente riesgo de contagio del virus, pero el golpe más duro ha sido la pérdida de un ser querido. La mayoría no pudo despedirse de sus seres amados a través de los tradicionales rituales del velorio y entierro debido a los protocolos de la COVID-19, convirtiendo esta situación en una más dolorosa.

“A la Universidad le preocupa el bienestar de los estudiantes y eso incluye la forma en la que ellos han manejado el duelo durante la pandemia», explica la psicóloga e investigadora del Departamento de Psicología, Mónica Cassaretto. Este equipo, la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAES) y el Instituto de Analítica Social e Inteligencia Estratégica, Pulso PUCP, realizaron un estudio que derivó en el informe «Resultados de la encuesta sobre pérdida, duelo y crecimiento en estudiantes universitarios de la PUCP» . A través de estas conclusiones, se espera que los servicios de atención se ajusten a las requerimientos de los alumnos.

Cassaretto agrega que se planteó la investigación con un universo de jóvenes mayores de edad en pregrado. «Se ha indagado varios aspectos ligados a la pérdida, como datos objetivos, pero también las necesidades tras este duelo”, detalla.

Más que cifras

El estudio pone en evidencia que el 56% de estudiantes encuestados –cinco de cada nueve– perdió uno o más seres queridos a causa de la COVID-19 o por complicaciones derivadas del contexto de pandemia. Pero también se da cuenta sobre las formas en las que los estudiantes de la PUCP afrontaron el duelo.

Entre los hallazgos más resaltantes está el duelo múltiple, especificamente en un 60.7% de los estudiantes que sufrieron pérdidas. «Un porcentaje significativo de alumnos ha perdido a varios familiares directos. Eso nos coloca en un escenario más complejo. Hemos encontrado que uno de los elementos que genera estrés durante el proceso de duelo es la carga académica», comenta Tesania Velázquez, profesora e investigadora del Departamento de Psicología. Para ella, en ese espacio se encuentra la oportunidad de la Universidad para generar espacios que puedan incorporarse en la formación y estar alertas a los signos que puedan presentar los alumnos.

Sobre su relación con la persona o las personas fallecidas, el 10.3% declaró haber perdido a su papá o tutor principal; y el 3.4%, a su mamá o tutora. Por otra parte, seis de cada nueve estudiantes indicaron haber tenido que abandonar proyectos personales o académicos importantes debido a la pandemia, otro tema que los afectó emocionalmente.

Un porcentaje significativo de alumnos ha perdido a varios familiares directos. Eso nos coloca en un escenario más complejo. Hemos encontrado que uno de los elementos que genera estrés durante el proceso de duelo es la carga académica".

La unión de comunidad PUCP hace la fuerza

La profesora Tesania Velázquez señala que, en este contexto de retorno a la presencialidad, no podemos voltear la página y hacer como si nada hubiera pasado en estos dos años. «Necesitamos implementar los espacios de acompañamiento, tener un espacio de memoria”, reflexiona.

“Hay una suerte de disociación que viven los alumnos de ‘yo estoy viviendo mi duelo, pero no en la Universidad’. Y si a eso le sumamos la carga académica y el ‘ando distraído, con sueño, con poca motivación’, es más complejo», agrega la psicóloga Mónica Cassaretto. Para ella, muchos no hacen uso o desconocen los servicios de psicología que brinda la Universidad. «Hay que desarrollar prácticas simbólicas, como las misas, los monumentos, murales y collages, que recuerdan a las personas que se han ido. Vamos a sugerir conversatorios, círculos de conversación y conmemoración”, señala.

Hay una suerte de disociación que viven los alumnos de ‘yo estoy viviendo mi duelo, pero no en la Universidad’. Si a eso le sumamos la carga académica, es más complejo".

El estudio brinda también una serie de pautas para diseñar una estrategia institucional de apoyo a estudiantes. Si de algo están seguras ambas psicólogas es que en algún momento volveremos a la normalidad, pero más fuertes. 

Si necesitas pedir ayuda, te contamos que cada facultad cuenta con un representante de la DAES, pues la PUCP cuenta con una Red de Bienestar. Es importante que lo identifiques para que te pueda guiar o derivar a la Oficina de Bienestar Psicológico.