Como parte de la 19ª edición del Encuentro Internacional de Teatro Universitario, organizado por la Universidad de Granada (España), un grupo de estudiantes de nuestra Facultad de Artes Escénicas (Fares) y el profesor Alberto Ísola fueron seleccionados para presentar la obra El maleficio de la mariposa, de Federico García Lorca. Este encuentro se realizará del 2 al 12 de noviembre y la puesta en escena será transmitida el jueves 11 de noviembre a las 10:30 a.m. a través del canal de YouTube de la universidad que la organiza.

«El teatro es un trabajo en equipo, no es de uno solo», señala la actriz Amanda Alvarado, estudiante de noveno ciclo de la Especialidad de Teatro, quien interpreta a los personajes principales «Mariposa» y «Curianita» en El maleficio de la mariposa.

Alberto Ísola dirige la obra y Amanda Alvarado, estudiante de noveno ciclo de la Especialidad de Teatro, interpreta a los personajes principales «Mariposa» y «Curianita». También forman parte del elenco actoral los estudiantes Stefanie Castro, Vanessa Escudero, María Jesús Moreno, Camilo Negrón y Gianella Ocampo.

La obra fue realizada para el curso de Actuación 5, al que se denomina rupturas con realismo. El profesor Alberto Ísola nos explica que la elección de El maleficio de la mariposa fue porque en el curso «se hacen textos que salen del realismo fotográfico-psicológico. Teníamos que cubrir el simbolismo y el surrealismo, entonces pensé en Federico García Lorca que había estado en las dos corrientes«.

Teníamos que cubrir el simbolismo y el surrealismo, entonces pensé en Federico García Lorca que había estado en las dos corrientes".

Amanda señala que la preparación de la obra duró las 16 semanas del curso, del cual ella participó en el ciclo 2020-2. Asimismo, la obra se volvió a presentar en la muestra de fin de año de la Fares. Para poder participar en este encuentro de teatro, los ensayos se retomaron en enero de este año. «Todo ha tomado bastante tiempo», agrega la actriz.

Teatro en pandemia

Hacer teatro en el contexto actual de pandemia tuvo varias dificultades, tanto en dirección como en actuación, pero todos se comprometieron con este nuevo reto. «Lo que hicimos desde el comienzo fue asumir que esta era una manera distinta de hacer las cosas y que había que hacerlo. Una de las cosas buenas que ha tenido la pandemia a nivel teatral es que te obliga a ser mucho más esencial y te permite imaginar mucho más» comentó el director Alberto Ísola.

«Llevar el curso en pandemia fue un golpe bien fuerte y creo que lo fue para todos los estudiantes. Yo decía que me iba a inscribir al curso cuando acabara la pandemia, pero no sabía cuándo iba a ser eso y cuánto iba a seguir posponiéndolo», expresó Amanda. Al mismo tiempo, resaltó la ayuda de Alberto como profesor, quien acompañó a sus alumnos en todo el proceso y facilitó su adaptación. Por otro lado, uno de los descubrimientos que ella tuvo al realizar el teatro de manera virtual fue el darse cuenta de que se tiene que ser mucho más enfática porque las expresiones se notan mucho más en cámara».

Para Ísola, esto último fue uno de los beneficios que trajo la virtualidad. «Cuando eres profesor, a mí lo que me gusta es que ves muy cerca a los alumnos, miras sus expresiones, porque normalmente en el escenario los actores y las actrices se miran entre sí. Si bien puede ser una distracción para ellos, para el profesor es estupendo porque ves exactamente la conexión, el feedback entre uno y otro«, comenta.

Otra de las dificultades que hubo en el proceso fue entender e interpretar el texto de la obra. Al recibir el guion, Amanda trató de leerlo e intentó buscarle una lógica al texto, lo cual no tuvo éxito y no la dejó avanzar en su interpretación de sus personajes. «No entendía que tú tienes que ser el recipiente del personaje, no puedes entenderlo todo, tienes que hacerlo y a la par entenderlo» expresó.

Alberto, quien es admirador de la obra de Federico García Lorca, explicó que muchas veces es difícil el acercamiento al texto porque no se tiene una imagen clara de lo que te brinda el dramaturgo y no se puede conectar a algo que se ha percibido. «Es importante ir probando para que el texto se pueda anclar en tu inconsciente, en tus propias imágenes. Yo creo que en el teatro todo tiene que partir de una cosa real para ti», expresa.

Luego de semanas de ensayo y grabación de la obra para que sea presentada en el encuentro de teatro, Alberto y Amanda culminan este proceso con varias enseñanzas. Alberto las toma desde dos perspectivas: «Creo que la enseñanza ha sido doble, comprender cómo alguien transformaba su propia vivencia en algo más universal, como lo hizo Federico en esta obra, y ver cómo el teatro ofrece una serie enorme de lenguajes«.

Por otro lado, Amanda reconoce como una de las enseñanzas principales el trabajo en equipo con sus compañeros, ya que el apoyo en la carrera de teatro es fundamental. Igualmente, desde su papel como actriz, siente que ha tenido un gran avance en la comprensión de los textos y guiones. «Creo que estaba idealizando tantas cosas, cuando lo que tienes que hacer, como dice Alberto, es traerlo a ti y luego trabajarlo«, cuenta.

Finalmente, ambos nos dejaron consejos para estudiantes y futuros miembros de Fares. «Esta fue la primera experiencia que tuvimos vía Zoom. Creo que el secreto está en tomarlo como un lenguaje distinto, lo importante es disfrutar, sacarle el jugo y permitir que sea un estímulo para la creatividad», comenta Alberto. «En general, algo que trato de recordarme a mí mismo siempre es que cada vez que aparece un desafío, hay que entregarse, hacerlo a fondo y tomarlo como un impulso«, agrega.

Como estudiante de Fares, Amanda recomienda lo siguiente: «Está bien tener miedo, pero no dejes que ese miedo te consuma porque te puede llevar por caminos no deseados. Además, recuerda que el teatro es un trabajo en equipo, no es de uno solo y eso es lindo».