En el 2010, el manager general de Sony en Latinoamérica vaticinó que, a mediano plazo, la industria de videojuegos en la región sería la cuarta más poderosa del mundo, detrás de EE.UU., Japón y Reino Unido. ¿Comparte su percepción?

No solo la comparto, hoy sabemos que eso ya es una realidad. La empresa Newzoo publicó a comienzos de este año un estudio de preferencia y gastos en videojuegos (2011 National Games Surveys) en donde Brasil figura en cuarto lugar, después de EE.UU., Rusia  y Alemania. En esta investigación no se consignó datos sobre China, que seguro estaría sobre todos. Si sumamos toda Latinoamérica estaríamos muy cerca de EE.UU.

¿Cómo ha sido la evolución de la industria en Brasil?

El consumo total de videojuegos en el mercado brasileño siempre ha sido grande pero el volumen de venta formal hace cinco años era muy pequeño, debido a la piratería. En los últimos años, el modelo de negocios ha cambiado bastante y hoy se puede comprar juegos por canales digitales, sin tener que ir a una tienda para comprarlos de caja. Cuando ese modelo se solidificó en todo el mundo, mostramos toda nuestra capacidad de consumo. El brasileño que no gastaba $100 dólares en un juego original de consola, ahora sí gasta $10 por una descarga digital.

Sin embargo, en otros países del mercado latino, la piratería sigue siendo un problema grande…

Sigue siéndolo, pero solo para un segmento del mercado, que es el de las consolas (Xbox, Wii, PS3). En otros nichos ya no hay o existe en un porcentaje pequeño.

Ante el auge de nuevas plataformas de distribución de videojuegos, como los aparatos móviles, los juegos en redes sociales o en línea, ¿cuál será el futuro de las consolas?

En un futuro cercano, las consolas van a seguir existiendo porque son una de las mayores fuentes de recursos para la industria mundial, pero a largo plazo están bastante amenazadas. No obstante, aún tienen un nicho: las empresas desarrolladoras de videojuegos para consolas garantizan una experiencia de calidad para el usuario, a diferencia de los modelos de distribución digital, donde se pierde un poco este control. Atari era la consola que predominaba en la década de los ochenta; sin embargo, cuando permitió que se empiecen a desarrollar gran cantidad de videojuegos sin pasar por un adecuado control de calidad, la empresa quebró. Hoy en día, no puedes hacer un juego para el PS3 si la Sony no te da la autorización ni las herramientas para hacerlo.

¿Cuál es el ciclo de vida de una consola?

Se calcula que desde su lanzamiento hasta la aparición de un modelo nuevo, el ciclo de vida de una consola dura cinco años. Los modelos actuales han pasado esta cifra debido a la aparición de nuevos sistemas de interacción, como el Kinect para el Xbox 360 o el PlayStation Move para el PS3, lo que les dio una sobrevida de dos años. Pero lo más seguro es que Microsoft y Sony tienen que presentar una nueva consola el año que viene, presionados por la aparición de Wii U, anunciada para noviembre.

Se tiene la percepción que los videojuegos solo sirven para entretener y que más bien, aquel que juega en demasía está “perdiendo el tiempo”…

Johan Huizinga denomina al hombre como “homo ludens”. Necesitamos el entretenimiento, la ludicidad es algo estructural para el ser humano. El que no se distrae, se vuelve loco. Muchas veces, estas distracciones son las que nos empujan a trabajar. ¿Acaso no trabajas también para ir luego a un restaurante, viajar con tu familia o salir al cine? Decir que jugar es una pérdida de tiempo es una tontería.

Pero por otra parte, los videojuegos son un nuevo medio interactivo, una nueva forma de contar las cosas y distribuir contenido de comunicación. Por eso, es muy común emplear videojuegos para muchas otras cosas que no son puramente entretenimiento: simuladores, juegos serios, ambientes de entrenamiento, entrenamiento y selección de candidatos en empresas, etc.

¿Cuál es el perfil del desarrollador de videojuegos?

Para elaborar un videojuego, se necesitan los dos lados del cerebro: el creativo y el matemático. Es difícil que una persona desarrolle ambas, por lo que se requiere de muchos profesionales con visiones y conocimientos distintos. Un juego es sobre todo un software (requiere un programador), pero también es una obra de arte (animadores en 2D y 3D, diseñadores web, etc.), un proyecto multidisciplinario (un gerente de proyectos), un producto (un profesional del marketing) y un simulador (uno o más profesionales que entiendan qué se quiere recrear).

¿Qué características reúne la nueva Diplomatura en Desarrollo de Videojuegos?

Esta diplomatura permitirá reunir en un programa dos áreas formativas distintas: la producción artística y la programación. Además, generará tecnología en todas las ramas del sector: quien hace un videojuego, después será capaz de hacer simuladores, realidad virtual, animación, etc. Muchos alumnos se juntarán y más adelante crearán excelentes negocios y oportunidades, que contribuirán al desarrollo de la industria en el país.

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El Perfil

Nombre: Esteban Clua