Afirma que un punto de quiebre fue un viaje que hizo a Francia, donde vivió dos años y medio, y, sin imaginarlo, dedicó parte de su tiempo a enseñar su idioma natal. “Ahí me di cuenta de que la enseñanza era lo mío”, confiesa. En abril pasado, la especialista llegó a la PUCP para dar cátedra a los alumnos de la Facultad de Educación, dictar seminarios a los profesores y realizar una pasantía de investigación en el Departamento de Educación, con el apoyo de la Comisión Fulbright. Estas son sus apreciaciones en la materia.

Está realizando una investigación titulada “Exploración de la formación del docente en una nueva época de evaluación y rendimiento”. ¿En qué consiste este proyecto?

La idea del proyecto es conoce de cerca la formación que tienen los docentes aquí en áreas de la enseñanza como la evaluación en el aula. Me interesa saber cómo incluyen este tema en la currícula y ver cómo los profesores enseñan en la Universidad. También tomaré en cuenta las experiencias de los estudiantes. Esto incluye las estrategias educativas que usan los profesores y las actitudes de los alumnos frente a este tipo de evaluaciones.

¿Cuál es la diferencia entre la evaluación del aprendizaje y la evaluación para el aprendizaje?

En Estados Unidos y en muchos otros países hay una diferencia notoria. La evaluación del aprendizaje es la más tradicional. Consiste, básicamente, en dar notas, calificaciones y obtener información al fin de un determinado curso. Pero no se trabaja a fondo con los estudiantes. En cambio, la evaluación para el aprendizaje es usar la evaluación para propósitos más formativos, usar la información para que los estudiantes sepan qué tienen que hacer para mejorar y aprender más. Tiene un componente que toma en cuenta las metas en su aprendizaje. Existen estudios que muestran que el uso de las estrategias de evaluación para el aprendizaje aumenta el aprendizaje de los estudiantes.

¿Desde cuándo se aplica este tipo de evaluación?

Desde siempre. Es una estrategia de la buena enseñanza y tiene características muy particulares.

¿Cuáles son?

Una de estas características es involucrar a todos los alumnos en los procesos educativos, especialmente a aquellos estudiantes que saben cuáles son los objetivos del aprendizaje del curso y que retroalimentan su formación con los aportes otorgados por el profesor. Aquí se hacen metas, planes para mejorar y aprender más. Los alumnos ya no son los participantes pasivos en el aprendizaje. Otra característica de la evaluación para el aprendizaje es la autoevaluación. Los estudiantes evalúan también a sus pares. Y otra consideración es que el profesor utiliza los resultados de las evaluaciones para cambiar sus planes de enseñanza.

Esa es una evaluación de profesor a alumno.

Sí, pero es también una evaluación del alumno a sí mismo y del alumno a otros. Lo que es muy importante es que el estudiante se comporta como un actor activo, ya que está involucrado en la evaluación. No es alguien que, simplemente, se sienta a escuchar la clase y recibe una nota al final del curso.

¿Y esto no toma en cuenta la evaluación a los profesores, la calidad de enseñanza?

Sí, también es parte de la noción de la evaluación para el aprendizaje. Está implícito que el profesor usa los resultados de la evaluación para reflexionar sobre lo que está funcionando en su enseñanza, para saber qué es lo que los estudiantes no comprenden y qué cosas hay que cambiar. La idea es considerar nuevas alternativas para mejorar la enseñanza. Hay que señalar también las encuestas que comúnmente se les hace a los docentes, que son los aportes o los puntos de vista del alumno.

¿Cómo encuentra la labor de los docentes en la PUCP?

He notado aquí que los profesores de la Facultad de Educación son muy abiertos. Me parece que hay un clima de colaboración muy fuerte entre ellos, y eso es muy positivo en términos educativos.

¿Cuál debería ser el rol del Estado?

El Estado debe asegurar que tengamos buenos profesores en las aulas, y debe identificar los estándares del aprendizaje y sus objetivos. Pero si el Estado, como sucede en EE.UU., va a castigar a los profesores porque los alumnos no tienen buenas notas en las evaluaciones, debe antes proveer entrenamiento a los docentes y formación para saber cómo enseñar con nuevos métodos. En esa línea, yo creo que el Estado tiene la responsabilidad de dar formación a los profesores.