¿Qué tan importante es un sistema de transporte público para una ciudad?

Uno no puede hablar de la transformación urbana sin hablar del sistema integral de transporte público. El metro es clave. En Medellín se construyó entre 1987 y 1995. Sin embargo, hay ciudades que todavía no cuentan con un metro. Para que exista eso tiene que haber un cambio en la mentalidad política de las administraciones de turno. Que realmente quieran hacer una intervención continuada y coherente. El sistema metro permite crear un proceso de articulación. Por ejemplo, Bogotá no tiene metro. En la administración de Enrique Peñaloza se hizo el Transmilenio. Es un sistema alternativo, más flexible, que permite operar, a menos costo, una mayor longitud y movilizar más gente. Pero a pesar de eso, se ha demostrado que si uno quiere crear un sistema integrado de transporte, debe tener como columna vertebral el metro. En los últimos años el debate en Bogotá fue si se hace metro o no. Sin embargo, en la última elección la pregunta ya no fue esa, sino cuál debe ser el trazado del metro. Ya no estaba en discusión la creación del metro.

¿Toda ciudad grande debe tener un metro?

Sí, y todos los expertos están de acuerdo. Una gran ciudad que tiene alta movilidad, grandes problemas de congestión, enormes disfuncionalidades, está en la obligación de tener un metro. Todos estos problemas generan grandes pérdidas económicas. Pero un metro no como un único elemento, sino como uno de los elementos, el central de todo un sistema integral de transporte.

¿La construcción de un metro puede impactar mucho a una gran ciudad?

Dependerá de las condiciones geográficas y topográficas de la ciudad. Hay que ver en dónde se va a intervenir. Qué tramos se tienen que hacer subterráneos y en dónde se pueden hacer a nivel. Con todo lo que ha avanzado la tecnología, hacer subterráneos no es ningún problema. Ahora vemos construcciones como el Eurotunel que une Europa continental e Inglaterra, e inclusive se está proponiendo un túnel que comunicará Nueva York y Moscú. Se está planteando, y es un proyecto para el 2042. Los problemas son los costos. Si se tiene la capacidad de pago, se puede hacer todo. Un metro en la actualidad depende mucho de las condiciones geográficas, topográficas y la capacidad de endeudamiento.

Cuando menciona características de una ciudad caótica siento que habla de Lima. ¿Conoce algo de la realidad limeña?

La conozco poco. Pero se nota un desorden que viene desde hace mucho tiempo. Hace diez años vine y la primera advertencia que me hicieron fue que cuando vaya a tomar un taxi, negocie. Era la época de Fujimori y había libertad de transporte. Era rarísimo que no hubiera taxímetro, que no estuviera reglamentado. Es muy extraño negociar con los taxistas y pasar de uno al otro, con una gran cola que espera. Eso ya crea caos y esa es una forma inadecuada de manejar el transporte. Sé que moverse en la ciudad es caótico y que se demora un tiempo exagerado para movilizase. Es difícil que el caos cambie si no hay un sistema integral de transporte.

¿Qué otros beneficios nos brinda un buen sistema de transporte público?

Una de las condiciones fundamentales del mejoramiento de la calidad de vida de una ciudad es el menor tiempo invertido en la movilidad. Si el tiempo de donde habitas hasta donde trabajas es un recorrido amable, con gran calidad escénica, gran calidad paisajística y vivencial, es decir que uno no sea pasajero sino ?paisajero?, todo cambiará. Imagínese disfrutando del paisaje urbano, sentirse parte del paisaje; no sufrirlo, sino vivirlo y habitarlo. Sería muy diferente. Nosotros tenemos que habitar toda la ciudad. A veces pensamos que habitar es solo habitar la casa. Habitar no implica tanto dónde estás sino lo que recorres y vives cada día. Si yo voy en el transporte público y puedo leer en el recorrido, disfrutar, estar más cómodo, definitivamente voy a sentirme mejor.

¿Un caso con buen sistema es el de Londres?

Claro. Ahí, por ejemplo, las estaciones se vuelven puntos de referencia y reunión. Elementos fundamentales de la espacialidad público urbano. Son lugares de encuentro y socialización. Los alrededores se convierten en lugares de posibilidad de estar. Lugares de ocio y recreación. O sea, no solo es el recorrido en términos funcionales, sino lo que se genera a partir de estos sistemas integrales de transporte como sistema de movilidad urbana.

Hay gente que podría decir que en Europa lo hicieron antes y nosotros ya no podemos. ¿Se puede soñar?

Se puede soñar y es necesario. Si las administraciones públicas son responsables deben comprometerse con eso. Nosotros tenemos ciudades compactas. Con la idea de ciudad automóvil que nos vendió Estados Unidos se crearon las ciudades periféricas, los suburbios, tramos extensos que pensábamos que podríamos solucionar con el automóvil. Perdimos esa posibilidad de crear ciudades más compactas, más densas y menos extendidas en el terreno, y con eso perdimos una oportunidad de hacer soluciones masivas de transporte (menos impactantes, más compatibles con el medio ambiente). Hay que hacer un sistema integral de transporte urgentemente. Por ejemplo, es fundamental no solo el metro, sino el tranvía. Debemos pensar en todo sistema en superficie que complemente al metro. Medellín, por ejemplo, está por iniciar el sistema de tranvía eléctrico, como línea complementaria al eje del metro rígido.

Entrevista y fotografía: Jack Lo