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ESPECIAL LIMA METROPOLITANA 2023-2026

Transporte: retos principales a los que se enfrenta la nueva gestión de Lima Metropolitana en los próximos cuatro años

La reforma del transporte es vital para una Lima más ordenada y segura. Sin embargo, desde 2019 ya no depende exclusivamente de la Municipalidad Metropolitana de Lima. Para Mariana Alegre, profesora PUCP y directora ejecutiva de Lima Cómo Vamos, el principal objetivo de la nueva gestión debe ser garantizar el bienestar del ciudadano en términos de movilidad y diseño de la ciudad.

  • Texto:
    Vanessa Romo Espinoza
  • Fotos:
    Agencia Andina/Archivo PUCP

Resolver el sistema de transporte en Lima Metropolitana es una urgencia ciudadana y los últimos estudios realizados en la ciudad lo evidencian: según Lima Cómo Vamos, el 22% de sus encuestados considera que la calidad del transporte público es un problema grave de Lima. Además, en julio pasado, un estudio de El Comercio e Ipsos señaló que un 30% cree que el ordenamiento del tráfico vehicular es el principal problema que debe solucionar el nuevo alcalde de Lima.

Sin embargo, ya que desde 2019 la Autoridad de Transporte Urbano de Lima y Callao (ATU) asumió las funciones de esta reforma del transporte, la nueva gestión municipal no puede garantizar la realización de obras al respecto. «Todo lo concerniente al transporte público ya no es competencia del alcalde de Lima, pero sí cuenta con dos asientos en el consejo directivo de la ATU», precisa Mariana Alegre, profesora en la Facultad de Gestión y Alta Dirección de la PUCP.

Entonces, ¿la Municipalidad Metropolitana de Lima puede ejercer alguna acción en temas de transporte? Mariana Alegre señala que la nueva gestión municipal tiene el gran reto de gestionar la ciudad, desde la priorización al peatón, la inclusión del ciudadano en el diseño de la movilidad urbana, y, no menos importante, ser la voz del habitante limeño en la ATU.

Una buena gestión para lograr fluidez en las calles

En una ciudad con un 60% de usuarios que dedica un promedio de 2 horas diarias en sus desplazamientos -según el Análisis de Movilidad Urbana de Moovit-, la gestión del tránsito es un primer reto para la Municipalidad de Lima. «Esto tiene que ver con pistas y veredas, principalmente en vías metropolitanas. Por ejemplo, en la Vía Expresa o Javier Prado, se debe hacer mantenimiento, se pueden hacer obras como la gran cantidad de bypass que hay en Lima. Pero para ello el municipio no tiene fondos, así que debe trabajar con el gobierno nacional», comenta.

Para la experta Mariana Alegre, el nuevo gobierno de Lima Metropolitana debe entender que se tiene que impulsar la fluidez del tránsito. «Hay que dar prioridad a los peatones, ciclistas y transporte público dentro de este modelo, que es diferente a promover la rapidez del tránsito», detalla.

Una mejor gestión de paraderos para el transporte público permitirá menos colectivos ilegales en las calles. Foto: Andina

¿Cómo se promueve la fluidez? Alegre precisa que se puede comenzar ofreciendo carriles exclusivos a los buses, tener más paraderos y mejor ubicados para que haya menos colectivos ilegales. «Así vas quitando vehículos de la pista», dice. También señala que debe mejorar la semaforización. «Debe ser inteligente y que sirva para la imposición de papeletas a través de las cámaras», señala. Con esto se lograría menos congestión, menos desorden, menos estrés y hasta menos siniestros viales, comenta la especialista. «El diseño vial estaría organizado en las movilizaciones y en la señalética, con lo que ofrecemos un mejor contexto a la gente que se mueve por la ciudad», dice.

«No hay que dejar al peatón al borde de la vereda, ni empujar al ciclista o hacer esperar demasiado a los buses, cuando ellos son los que cargan más gente en el tránsito. Si uno se enfoca en la velocidad, está trabajando para conductores de autos particulares, es decir, una minoría. Pero cuando nos enfocamos en el transporte público, se puede esperar una mejor gestión», agrega.

Sobre el uso de las bicicletas, Alegre opina que creció la oportunidad para que haya más ciclistas, pero que lamentablemente las ciclovías no se terminaron de consolidar. Según Lima Cómo Vamos, el empleo de este vehículo se incrementó de 3.7% a 6.2% durante la pandemia. «Se necesita corregir el diseño de muchas de estas ciclovías. El nuevo alcalde podría promover su implementación, sobre todo en el cercado de Lima y la creación de zonas con tráfico calmado. Esto significa que haya espacios donde los vehículos transiten a una velocidad menor, así activas la calle y la vuelves segura para todos», comenta.

Las propuestas la nueva gestión municipal de Lima en temas de transporte

  • Ampliar el Metropolitano en la avenida Universitaria en coordinación con la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU)
  • Desarrollar un expediente técnico para agilizar la conexión subterránea del Metro de Lima
  • Brindar el servicio de tren de pasajeros en la ruta Chosica-Lima-Callao
  • Construir un teleférico que interconectará el Metro de Lima en San Juan de Lurigancho, y el Metropolitano entre Independencia y Comas
  • Reformular el sistema de transporte, a través de la ATU, priorizando el uso de transporte público y ciclovías
  • Instalar un sistema de ventilación en el Metropolitano y negociar el incremento de flota de buses
  • Con inversión privada, desarrollar un tranvía universitario que una a los distritos de San Martín de Porres hasta Carabayllo

Fuente: Plan de trabajo presentado por Rafael López Aliaga al Jurado Nacional de Elecciones.

Una eficiente articulación con la ATU

Sobre la coordinación con la ATU, Alegre comenta que la municipalidad deberá conversar sobre la base de los planes estratégicos que la autoridad de transporte ya ha planificado. «Es allí donde tienen que evaluar junto si se puede agregar un proyecto nuevo o si hay un espacio dentro del plan maestro que la ATU está trabajando. Lo más importante es la articulación para efectos del transporte público», precisa.

La profesora PUCP señala que la ATU tuvo poco tiempo antes de la pandemia para poder consolidarse, pero considera que está avanzando. «El foco tuvo que ser la pandemia y no la red vial. Aunque vaya lento el proceso, hay que siempre apostar por la institucionalidad», comenta. Para la especialista, como para los mencionados encuestados al inicio de este texto, el mejoramiento del sistema de transporte público de la ciudad es lo más urgente que la ATU debe solucionar. «Eso implica avanzar con la reforma, consolidar y ampliar los corredores, que se termine de construir la línea del Metro, hacer crecer al Metropolitano y mejorar el servicio. Nada de eso está en manos del alcalde», dice.

Sin embargo, sí es necesario que la nueva gestión municipal pueda promover y hablar en consejo sobre lo que necesita el ciudadano limeño. «Él es el primero que debe exhortar a la ATU para que cumpla su trabajo, debe convocar alianzas», añade Alegre.

Las competencias de las municipalidades metropolitanas en temas de transporte

  • Emitir normas para la aplicación de los reglamentos nacionales dentro de su respectivo ámbito territorial
  • Declarar, en el ámbito de su jurisdicción, las áreas o vías saturadas por concepto de congestión vehicular o contaminación
  • Instalar, mantener y renovar los sistemas de señalización de tránsito en su jurisdicción, conforme al reglamento nacional respectivo
  • Establecer las disposiciones necesarias para el cumplimiento y fiscalización del derecho al pase libre de las personas con discapacidad severa en el transporte público
  • Formular, diseñar y ejecutar proyectos de infraestructura ciclista. Promover el uso de bicicletas y vehículos menores no motorizados
  • Ejecutar directamente o concesionar obras de transporte en coordinación con otros gobiernos locales aledaños como corredores viales, vías troncales o puentes. Construir, rehabilitar y mantener la infraestructura vial que esté bajo su jurisdicción

Fuentes: Ley General de Transporte y Tránsito terrestre, Art.17; Decreto Supremo 003-2017-MIMMP, Art. 4; Ley Orgánica de Municipalidades, Art.79.

Objetivo: alcanzar el bienestar ciudadano

Transitar por la ciudad no debería ser peligroso, dice Mariana Alegre. «Lograr que Lima sea un espacio de bienestar no significa que todo debe ser perfectamente fluido y que nunca haya estrés, pero debemos aspirar a tener una ciudad en la que nos podamos mover dignamente, sin tener miedo. Entonces creo que ese debería ser un foco para que se propicie una transformación», enfatiza. La profesora PUCP dice que se puede hacer varias gestiones con respecto a la atención del tránsito, pero siempre de forma articulada con los distintos niveles de gobierno.

«Es un sistema complejo, pero si se gestiona desde una mirada integral, se puede avanzar. No se puede solo trabajar en una intersección o una calle cuando no estás entendiendo ni atendiendo la lógica del sistema, es decir, por dónde llegar los carros, a dónde van, cuáles son las motivaciones de la gente para moverse, qué necesita», explica Alegre.

Asimismo, advierte que esta mirada debe ser inclusiva, con un enfoque para la población vulnerable, como los niños, por ejemplo. «¿Qué está pasando alrededor de las escuelas? ¿Se están generando rutas seguras para recuperar las calles? También hay que considerar la accesibilidad de estas rutas a personas con discapacidad. Si todo esto se toma en cuenta, sería un gran paso», concluye.

Ficha personal de la especialista

Nombre: Mariana Alegre Escorza

Estudios: magíster en Derechos Humanos por la PUCP. Master in Science en City Design and Social Science por London School of Economics (LSE) 2012-2013. Becaria Chevening.

Trayectoria: directora ejecutiva de Lima Cómo Vamos y fundadora de la estrategia de generación de espacios públicos Ocupa Tu Calle. Profesora en la Facultad de Gestión y Alta Dirección, y profesora de Derecho a la Ciudad en la Maestría de Arquitectura, Urbanismo y Desarrollo Territorial Sostenible de la PUCP. Columnista de Perú 21.

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