La primera infancia es una etapa vital del desarrollo humano. Desde antes del nacimiento, ya se forman las estructuras del cerebro y esto es determinante para el aprendizaje. Por eso es crucial que el Estado genere políticas que prioricen este periodo de la formación, pues es determinante para el comportamiento y desarrollo de habilidades en niños menores de 5 años.

Bernardo Aguilar es uno de los ponentes internacionales que ha llegado a la PUCP para ser parte de este Congreso. El especialista mexicano opina que los primeros 1,000 días de vida, desde el inicio del embarazo, son muy importantes pues aquí empieza la construcción de las bases de la personalidad, desarrollo de los sentidos, capacidad socioemocional y vínculo con el exterior del niño.

“Las neurociencias indican que el cerebro tiene determinada plasticidad que permite al niño recuperar muchas veces el tiempo no invertido por sus padres en esta etapa. Sin embargo, el costo de recuperación es muy alto porque otros niños pueden aprovechar mejor los aprendizajes de la escuela al mismo tiempo. El costo de reducir falencias de lo ‘no aprendido’ es muy alto, por eso en educación antes siempre es mejor”, explica el educador.

La familia

La familia es el inicio de los procesos de formación del niño. Si en la configuración más relevante de nuestras vidas falta papá o mamá, por ejemplo, la afectividad se ve afectada y el aprendizaje es más difícil. “La construcción de las capacidades de los niños empieza en casa. El entorno de afectividad le da al niño facilidad para comunicarse y confianza en sí mismo. Trabajar con la familia es muy importante en niños menores de cinco años, pues hay que escucharlos, entenderlos y saber qué sienten o piensan para poder darles mejores consejos y soluciones”, comenta el experto.

El Estado

En el país urgen políticas que reconozcan la importancia de esta etapa de formación para generar espacios que brinden educación, salud y nutrición adecuadas; no solo proyectos aislados. “En el imaginario de una sociedad debe reconocerse la importancia de esta etapa del desarrollo. El Estado debe sensibilizar por qué es vital que el niño construya, lo antes posible, las bases adecuadas para que aprenda con facilidad lo que desee en el futuro”, agrega Bernardo Aguilar.

Interacción temprana

Robert Myers es un educador estadounidense que también llegó a la PUCP para ser parte de este Congreso. Él fue muy directo en su afirmación y dijo que la educación debe empezar antes del nacimiento, pero polemiza a la vez y sostiene que el término “estimulación temprana” no es exacto. “Sería mejor referirnos como ‘interacción temprana’, pues debe haber un ida y vuelta en la comunicación, incluso en el embarazo”, concluye el experto.