John Malkovich, actor de destacada trayectoria visita nuestro país. Consultamos al director general del TUC, Jorge Guerra (en la foto), sobre la trayectoria del guionista, director e intérprete de películas como Muerte de un viajante (1985) o Quieres ser John Malkovich (1999) que pisará nuestro país con la obra teatral The Infernal Comedy.

«Los actores estadounidenses tienen un sello bien marcado: su naturalidad. Sus actuaciones hechas sin ningún esfuerzo, casi no hay diferencia entre el personaje y el actor. El actor no trata de realizar una composición compleja que lo aleje de su forma de ser cotidiana. Malkovich tiene esa característica. Es uno de esos actores que se pone a un lado, empieza a hablar y el espectador le cree lo que dice porque lo hace con tal sencillez y naturalidad que no se nota su esfuerzo para llegar a convencernos. Es como si no le interesara hacerlo», responde , al preguntarle qué rasgo destaca de la carrera actoral de Malkovich.

Con una carrera teatral forjada desde 1976 y con más de 65 películas en su haber, John Malkovich ha ido y venido de ambos mundos de manera constante. Pero, ¿existe alguna diferencia entre actuar para cine y actuar para teatro? «Puede no haber ninguna diferencia. Depende mucho de los estilos de trabajo tanto de los directores de teatro como de cine. Lo cierto es que el cine se arma ante la mirada del actor, quien debe tener un control más estricto de la evolución de su personaje porque muchas veces se filma en desorden por cuestiones económicas. Si el actor no tiene noción de adónde va su personaje, este sale chato. El actor se enfrenta a los mismos problemas cuando actúa para la televisión, el cine o el teatro, solo que las características contextuales son distintas? precisa Guerra.

«Cada vez que sale Malkovich en pantalla, me recuerda a todo su trabajo anterior, pero siempre hay algo nuevo. Es un actor que se parece mucho a sí mismo pero al mismo tiempo crea cosas completamente distintas», finaliza Guerra, quien este sábado 29 estrena la obra La cura en Troya.