Si tu vocación es la docencia en educación superior, la Escuela de Posgrado ofrece para ti la nueva Maestría en Docencia Universitaria. Estos estudios ofrecen un espacio para la reflexión en la enseñanza que desarrollas con tus estudiantes.

Esta maestría está dirigida a personas que tengan experiencia en la docencia, ya que, muchas veces, los docentes suelen empezar la labor sobre la marcha y de forma intuitiva. “La experiencia es el conocimiento del que vamos a partir para ofrecer los contenidos y actividades de la maestría. Por lo tanto,se  parte de la experiencia y se regresa a ella, a través de todos los aportes teóricos, conceptuales y metodológicos que tiene este campo de estudio”, explica la Dra. Del Mastro, directora de la maestría.

En cada curso a lo largo de la maestría, se partirá del análisis de cómo están trabajando los participantes. Tomando en cuenta esta reflexión, se propondrán innovaciones o mejoras en los distintos ámbitos para contribuir al aprendizaje de los estudiantes. Por ejemplo, planes de estudio, programas de cursos, sílabos, metodologías, sistemas de evaluación, tecnologías de la información y telecomunicación.

Trabajo interdisciplinario

La maestría está disponible para todas las especialidades. “La maestría no solo se centra en la parte pedagógica, también contempla la enseñanza universitaria como un campo interdisciplinario donde confluyen las distintas especialidades”, enfatiza la Dra. Cristina del Mastro. Además, este posgrado cuenta con un equipo de especialistas asesores y un seminario interdisciplinario sobre la enseñanza.

El sello PUCP

El propósito de esta maestría es profesionalizar a los docentes universitarios en la enseñanza de su disciplina. A su vez, permite desarrollar propuestas de innovación desde un punto de investigación aplicada y la experiencia docente, de acuerdo a los retos actuales. “La sociedad ha cambiado y exige una serie de habilidades, de capacidades, de valores y actitudes en todas las personas”, sostiene Del Mastro.

El motor de la maestría es dar respuesta a las necesidades sociales de enseñar no solo a partir de los conocimientos que puedan traer los profesores, sino en función de las necesidades que puedan tener los estudiantes. “Esta es una oportunidad para complementar la formación disciplinaria con aspectos que puedan ayudar a focalizarse en el aprendizaje de los estudiantes. De este modo, se busca ayudar a los alumnos a desarrollarse de manera integral y aportar un mejor desarrollo social”, comenta la directora de la maestría.

Admisión

Para aplicar, necesitas escribir un ensayo sobre tu interés por estudiar esta maestría, entregar una carta de presentación de la institución de educación superior técnica o universitaria y una prueba de la Escuela de Posgrado.

Para más información, ingresa a la web de la Maestría en Docencia Universitaria.

Escenario equilibrado

Después de participar en Equality y Miseal, dos proyectos con 20 universidades de América Latina y Europa, el Grupo de Investigación en Estudios de Género PUCP observó que la situación de las mujeres y los hombres en las universidades presentaba muchas brechas.

Durante el 2014 y el 2015, el grupo elaboró un documento que muestra qué sucede con la docencia y cuáles son los problemas de estudios de posgrado. «Vimos las diferencias en la conciliación entre trabajo y familia entre hombres y mujeres. Eso nos permite entender por qué las mujeres no ocupaban los puestos de docentes principales o por qué su carrera es más larga”, explica la Dra. Patricia Ruiz Bravo.

Con esta data, el equipo elaboró un plan que sirvió de base para las políticas de igualdad de género aprobadas por el Consejo Universitario en el 2015. “Todo esto permite promover a mujeres que tienen hijos, y puedan terminar sus estudios de doctorado y maestría”, agrega la Dra. Ruiz Bravo.

Estas son algunas normas establecidas:

– Descarga académica de hasta 6 horas para profesoras de tiempo completo con hijos de hasta 12 años y que se encuentren cursando un programa para obtener los grados de magíster o doctora.
– Cuando se recomiende una edad para el ingreso a la docencia ordinaria, la edad de las mujeres candidatas se disminuirá en 3 años por cada hijo o por cada persona a su cuidado (enfermos y ancianos).
– Cuando evalúe o pondere méritos, no se tomarán en consideración los periodos de salida o retiro debidos a maternidad o cuidado de niños, adultos mayores o enfermos.

Para conocer más detalles, lee las políticas de igualdad de género para la docencia.