"La extrema derecha comienza a posicionarse de a pocos"
Tras los comicios de la semana pasada en Gran Bretaña, que le dieron fin a 13 años de laborismo, se vuelve a confirmar que Europa va como un péndulo hacia la derecha. Si bien a los conservadores no les faltó mucho para obtener mayoría absoluta, la necesidad de tender puentes con otros partidos se mostró urgente para poder gobernar. Luego que el líder laborista Gordon Brown anunciara el cese de su gestión, hoy el nuevo primer ministro británico, David Cameron, inició un gobierno de coalisión con los liberal demócratas.
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Óscar Vidarte Arévalo
Profesor del Departamento de Ciencias Sociales
En las recientes elecciones de Gran Bretaña, el partido conservador no obtuvo la mayoría absoluta en el Parlamento, ¿cuál es el camino que David Cameron debe seguir para poder gobernar?
No se daba el caso de un partido ganador sin mayoría desde el año 1972. El camino más fácil para los conservadores es la alianza con los liberales de Nick Cregg, liberales que se esperaba tuvieran mucha más participación. Aunque su votación no ha sido mala, los conservadores obtuvieron 36 % contra 29 % de los laboristas y 23 % de los liberales. Esto en el Perú debería indicarnos que entre laboristas y liberales hay un espacio muy reducido, pero debido a las particularidades del sistema electoral británico, los conservadores tienen mucha ventaja. Desde la semana pasada, los conservadores buscan una alianza con los liberales y esto significa ceder en algunas cosas.
¿Una coalición?
Un gobierno de coalición implica más poder que un simple acuerdo político, como determinados cargos exclusivos para los liberales.
¿Cuál sería otra opción?
De no darse la alianza entre liberales y conservadores, ya se sabe que la segunda opción de los conservadores es buscar una alianza con los pequeños partidos regionales de Irlanda del norte, Escocia y Gales. Pero estas alianzas implicarían mayores costos con estos sectores nacionalistas que históricamente han sido enfrentados a los conservadores británicos.
¿A qué se debería el ascenso del partido conservador y la caída del partido laborista?
Te puedo dar una respuesta bastante coyuntural que no necesariamente es cierta, la crisis económica. En el caso inglés, la inestabilidad económica, sumada a 13 años de gobierno laborista; un gobierno desgastado por el tiempo en una tradición británica que no admite más de tres gobiernos; nos da a entender la necesidad de recambio.
¿Qué tanto afecta la crisis económica a un gobierno? La crisis económica puede tener dos grandes consecuencias. Que aumente dentro de la población la tendencia a rechazar lo externo, los migrantes, en ese contexto el discurso de los partidos de derecha es más favorable. Por otro lado, la crisis económica puede implicar mayores medidas proteccionistas de parte del Estado frente a causas externas, y ese discurso lo maneja mejor la izquierda.
En teoría, las consecuencias de una crisis económica pueden ser favorables tanto para uno u otro sector.
¿Es factible una reforma del sistema electoral británico?
Una de las mayores propuestas de los liberales, que quieren romper con el clásico bipartidismo británico, fue justamente una reforma electoral. En un gobierno conjunto entre conservadores y liberales, este sería uno de los grandes temas.
La democracia británica es un sistema fundamentado en títulos nobiliarios y personas favorecidas por la Corona, es lo más antiguo y retrógrado que es existe en política en el mundo. Los liberales quieren cambiar un poco las reglas de juego, actualmente el sistema británico no se puede mostrar más representativo porque favorece el bipartidismo. Esta sería la negociación más dura si se alían con los conservadores.
Tampoco esperemos grandes cambios como salir de la monarquía parlamentaria para entrar a una monarquía presidencial, pero pueden haber cambios en la forma de votación, de representatividad, o en la manera de elegir a los congresistas para que sea un reflejo de lo que la población quiere.
¿Por qué el impulso de los partidos de derecha en Europa?
Vemos que el avance de la derecha en Europa, de la derecha regular no extrema, ha sido muy importante a nivel de las elecciones para el Parlamento Europeo, y a nivel de los países en los cuáles se sustenta la Unión Europea, como en el caso de Alemania, Francia y Reino Unido, sin olvidarnos de la Italia de Berlusconi. Además, en el caso de países intermedios como España, Portugal y Grecia, la izquierda se encuentra con graves problemas y son los países europeos que más afectados se han visto con la crisis mundial en este momento. Estamos ante situaciones que no se veían desde hace 20 o 30 años, como el caso alemán en donde la derecha gobierna con la izquierda en una coalición.
A todo esto se le puede sumar el papel de la extrema derecha, que comienza a posicionarse de a pocos. La vimos con fuerza cuando en el año 2002, en Francia, Le Pen fue a la segunda vuelta con Jacques Chirac. Haider también fue gobierno en Austria, y hace poco, en las elecciones de Hungría la extrema derecha sacó un 18 %, siendo la tercera fuerza política del país.
La extrema derecha se concentra en el análisis nacional y el origen de todos sus males son los inmigrantes. Sus parámetros pueden ser raciales o nacionalistas, pero por ejemplo, en una España con 20 % de desempleo un discurso así que puede calar muy bien.
Hoy los políticos de ultraderecha son cuadros jóvenes, profesionales y muy atractivos para la población. El gran cambio de los movimientos de extrema derecha es que antes eran partidos que cuando entraban al gobierno eliminaban a toda la oposición, eran poco democráticos, pero la extrema derecha de ahora juega en el papel democrático.
Y si a esto le sumamos expresiones que no vienen de la extrema derecha, sino de los conservadores, como la prohibición de la burka, de todas maneras la extrema derecha tiene un papel importante. El problema es que los sectores de derecha influenciados o coalicionados con sectores de extrema derecha comiencen a fomentar una línea dura en torno al papel del inmigrante. Uno se pregunta dónde está esa Europa liberal de apertura y de respeto a todos los credos.
¿Sería el final del soft power europeo?
Espero que no porque la política exterior europea tiene al soft power como uno de sus fundamentos, en donde se determina que sus ejes principales frente al mundo son buscar la integración, defender la democracia y los derechos humanos, y la apertura comercial. ¿Qué tanto va a durar esta política exterior europea con el avance de la derecha y en algunos casos de la extrema derecha?
¿Con la entrada en vigor del Tratado de Lisboa los países europeos le darían más poder al organismo supranacional, es decir a la Unión Europea?
¿Están dispuestos los partidos de derecha? Parte del voto que se le da a Cameron en Gran Bretaña es básicamente un voto anti-Europa, anti-Euro, contra las reformas europeas. ¿De qué Unión estamos hablando? Ya han pasado vergüenza hace unos años cuando Estados Unidos invadió Irak y su política exterior se partió en cuatro, y hoy día Grecia tiene un problema y no la pueden salvar. Ese panorama es bastante desolador.
Entrevista: Florence Couillaud
Foto: Franz Krajnik
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