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"La imitación es una forma de arte y está dentro de la libertad de expresión"

El caso de joven que no quiso ceder su asiento en el Metropolitano, programas de farándula y programas como ‘Yo soy’ tienen algo en común, nos plantean el uso de imágenes de personas, ya sean famosas o no. Conversamos con Alfredo Maraví, docente del Departamento de Derecho y de la Facultad de Ciencias y Artes de la Comunicación y especialista en propiedad intelectual.

  • Alfredo Maraví
    Docente del Departamento de Derecho y de Comunicaciones
  • Texto:
    Gonzalo Silva
  • Fotografía:
    Jorge Ruiz

¿Qué alcances tiene el derecho a la imagen?

Todos sin excepción tenemos derecho a nuestra imagen. Pero en algunas circunstancias no es necesario el permiso.

¿Se supone, entonces, que un fotógrafo de prensa tendría que pedir permiso antes de empezar a fotografiar?

Cuando se va a entrevistar a una persona, los hechos demuestran que la persona ha aceptado. Por cuestiones de seguridad el personal de prensa debería asegurarse con una firma, algo que lo pueda acreditar, pero los hechos dan pie a pensar que la persona aceptó. Ahora, cuando están grabando en la calle, si uno se fija en los reportajes que salen en Estados Unidos o Europa, muestran a las personas en las calles, pero difuminan sus caras. En el Perú no se hace eso. En otros países la reacción sería “tengo la oportunidad de denunciar a la empresa y pedir una compensación por usar mi imagen”. Acá no pasa eso porque el Poder Judicial es demasiado lento y el proceso es demasiado engorroso.

¿Qué sucede en casos como el joven que no quiso ceder su asiento en el Metropolitano?

Este caso no está dentro de estas excepciones: no era una persona notoria. Si bien estaba en un lugar público, no cumplía con los requisitos de hechos de interés general. Que una persona no ceda el asiento, por más que sea sancionable dentro de las reglas sociales, no es de interés, por lo menos al punto de mostrar su imagen. Para balancear un poco, suponiendo que sea de interés público, quizá sí sería válido si la cara de la persona no se ve.

¿Hasta qué punto un hecho es de interés público o no? El límite no queda claro…

Las leyes no pueden ser exactas. ¿Qué es exactamente un hecho de interés público? Dependerá de cada caso. De todas maneras, poniéndonos en el caso de que los hechos del Metropolitano sean de interés público, no parece proporcional entre el derecho de formar opinión pública y uso de la imagen.

¿Por qué programas como los de Magaly Medina tienen la autoridad de mostrar la imagen de alguien solo por ser famoso?

Las personas de notoriedad obviamente están más expuestas al lente de periodistas porque, justamente, son famosas. Sin embargo, eso no debe significar que no tengan un derecho propio a la imagen, a la voz o sobre todo el que más se viola: a la intimidad. Tienen un espacio más reducido porque justamente el ser notorios los hace de interés público. Por ejemplo, si un futbolista se lesiona, es de interés público porque tiene que ver con el aspecto que lo hace famoso. Pero lo que ha pasado muchas veces es que se publican imágenes cuando el futbolista se está divorciando y eso, en realidad, forma parte de su esfera íntima. No tiene que confundirse un deseo de chisme con el interés público.

En este caso, ¿la persona tiene el derecho de demandar por utilizar su imagen y promover una noticia que no es de interés público?

Ya que todas las personas tienen derecho a la imagen, a la voz, a la intimidad, en el caso de que estas se vean afectadas por no contar con autorización o no estar en los casos de excepción: sí, cualquier persona, notoria o no, puede demandar. Nos damos cuenta ahora porque las sanciones son más fuertes. No es una situación anómala, pero es la primera vez que encontramos que los jueces aplican estas normas y determinan quién es el que tiene la razón.

Pero las denuncias hacia Magaly Medina son más por difamación que por uso de imagen…

Sí, es cierto. Por una cuestión social se podría decir que se aceptó y que tiene una lógica dentro del sistema: si soy artista, aunque digan algo malo me conviene estar presente. Lo mismo sucede con los políticos. ¿Por qué participan en programas cómicos donde se burlan de ellos? Porque piensan que la mala publicidad es mejor a que nadie los conozca. Si me difaman sí me afecta, pero si publican una noticia de que soy mujeriego a lo mejor eso me sirve, sea cual sea mi profesión, porque voy a tener múltiples oportunidades. Si no hay tantas denuncias; no es por el aspecto legal, sino por el social. Es más una cuestión de cómo se maneja nuestra sociedad, y no solo la nuestra.

¿Cuál es la situación de programas como ‘Yo soy’, donde se busca lograr una imagen casi exacta de un famoso?

Es una pregunta muy interesante y es algo que pone al derecho en jaque porque vamos a tener un conflicto de dos situaciones: por un lado el personaje famoso tiene derecho a una voz y a una imagen. Pero, por otro lado, la imitación es una forma de arte y como tal está dentro de la libertad de expresión. Entonces, tenemos una aparente colisión: un derecho a la imagen del artista y un derecho a la expresión artística del imitador. Cuando hay estas colisiones lo que se busca es hacer un balance. Lo que he podido ver es que no podría existir el imitador como forma de arte si no se le permitiera copiar a alguien famoso. Bajo este balance sí sería válido, incluso considerando que el imitador está haciendo una actividad de lucro. ¿Por qué no hay estas demandas? Por una situación similar a la que hemos visto con los políticos: si me están imitando, también me están ayudando a hacerme conocido o a mantenerme vigente, entonces no me conviene perseguir a mis imitadores porque, en realidad, estoy teniendo cierto beneficio.

¿Ayuda que el programa se venda como uno de imitación donde nadie busca adueñarse de una identidad, sino lograr la mejor imitación?

Sí, porque definitivamente sería una situación totalmente diferente que aparezca una persona diciendo que es Tito Nieves y que ofrezca, por ejemplo, cantar en una fiesta… Eso ya sería una suplantación. En el programa sabemos claramente que no es Tito Nieves; estamos buscando a la persona que logre ser lo más convincente con su imitación.

El Perfil

Nombre: Alfredo Maraví

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