Nuestra egresada de Economía Mónica Com, actualmente, es la única socia mujer del Grupo Macro, la firma líder en consultoría económica y financiera del Perú, donde también fue pionera al ser la primera mujer en asumir la gerencia general de Macroconsult.

Con cerca de 30 años de trayectoria en el sector empresarial, Mónica tuvo que labrar su camino paso a paso, aprovechando cada oportunidad para dar lo mejor de sí misma. En esta entrevista, comparte, entre otras cosas, su experiencia como estudiante universitaria a fines de la década de 1980, durante una de las peores crisis de la historia del Perú.

En la PUCP hice grandes amigos, aprendí mucho académicamente y pude acceder a otra visión del mundo".

Has formado parte del Grupo Macro por más de 20 años. Fue uno de tus primeros empleos y, desde hace más de una década, también eres socia. ¿Qué retos has tenido que superar para llegar a esta posición?

Considero que han sido retos acordes con los tiempos que hemos vivido como país. Terminé mi carrera a fines de los 80, con la debacle del primer gobierno de Alan García. He sido testigo de ciclos económicos, de auge, y crisis económicas y políticas, que también se reflejaron en mis desafíos profesionales y familiares. Creo que el contexto define muchos de los retos que nos toca enfrentar. En mi caso, y a pesar de la crisis, pude concluir la Universidad con excelentes calificaciones, desempeñarme en mi profesión, y tener la oportunidad de trabajar y aprender mucho en Macroconsult en mi labor de consultora de empresas. Empecé trabajando como analista de economía y casi 20 años después asumí el cargo de gerenta general hasta el 2012. 

Durante tres décadas, el país se abrió a los mercados internacionales, tuvimos estabilidad y crecimiento económico, accedimos a financiamiento a largo plazo para proyectos, fomentamos el respeto a la inversión. Se desarrollaron mercados que no existían o desaparecieron por años de crisis: una agroindustria de exportación, el sistema privado de pensiones, un mercado de créditos hipotecarios, entre otros. Albergamos inversionistas de talla mundial. Este contexto produjo el florecimiento de una generación de profesionales que sustentaron la toma de decisiones basados en el conocimiento y especialización, y ayudaron a la consolidación del crecimiento y la prosperidad económica del país.

El reto actual, como país, es reconstruirnos".

Estudiaste en la PUCP entre 1985 y 1990 en uno de los momentos más duros para el país, en medio de grandes crisis económicas, políticas y con la violencia de Sendero Luminoso. ¿Cómo viviste la experiencia universitaria en esta coyuntura?

Empecé mis estudios al inicio del primer gobierno de García y mi último año en la PUCP coincidió con la histórica hiperinflación de 7,000%. La crisis económica fue un factor que determinó que muchos tuviéramos como prioridad terminar la carrera lo antes posible, porque el pago de nuestras pensiones no estaba asegurado. Mis padres son migrantes chinos y yo pertenezco a la primera generación de mi familia que nació en el Perú. Mi familia pertenece a esa clase media inmigrante que busca que sus hijos logren mejores condiciones de vida. Todo esto influyó en la dedicación y fuerza de voluntad que tuve para estudiar y cumplir con mis objetivos. En toda esta coyuntura, estudiar en la PUCP fue un privilegio, toda una experiencia de vida, hice grandes amigos, aprendí mucho académicamente y pude acceder a otra visión del mundo.

¿Cuál fue tu mayor aprendizaje en la Universidad?

La PUCP representó un antes y un después en mi vida. Los Estudios Generales te exponen a un conjunto de especialidades que te permiten madurar y elegir mejor tu carrera. Ahora me doy cuenta de que a los 17 o 18 años se está poco preparado para definir a qué dedicarnos el resto de la vida. En ese entonces, sin tener la claridad sobre qué carrera seguir, sabía que tenía que estudiar mucho para progresar, era lo que mi familia necesitaba de mí. En mi caso, los cursos que más me llamaron la atención fueron los de Humanidades. Si bien puede no parecer tan relevantes para el mundo de hoy, son fundamentales para la formación integral de un profesional, puesto que te ubican en un contexto más amplio y te invitan a mirar otras formas de ver el mundo.

Creo en la empresa privada y que en el Perú las empresas pueden ser de talla mundial".

¿Qué caracteriza a los estudiantes y egresados de la PUCP?

En términos generales, creo que si eres egresado de la PUCP, posiblemente, vas a ser un profesional preparado, competitivo, de calidad internacional. Esa es la promesa de valor de la Universidad. Además, considero que la PUCP te abre muchas posibilidades al formar parte de una comunidad que busca la excelencia académica y los altos estándares éticos. Me siento orgullosa de ser parte de la PUCP y, aunque actualmente me encuentro un poco alejada del mundo académico, respeto mucho el aporte que le puede dar a los otros ámbitos.

Como país seguimos atravesando crisis políticas, económicas y sociales que se han agravado con la crisis sanitaria global. ¿Qué lecciones te ha dejado la pandemia?

Muchas. Desde la economía, la pandemia nos dice que no importa cuánto progreso económico tuvimos, importa menos “el milagro peruano” cuando hay situaciones, brechas sociales, que no se han resuelto.  La pandemia está cambiando vidas, empresas, proyectos. Está afectando a muchas familias. Nos ha pegado fuerte como país. Nadie puede estar contento con esa situación. Ahora, el reto actual, como país, es reconstruirnos.

Éxito es irte a dormir por la noche y estar contento con la vida".

En el 2020, mencionaste en un artículo que este 2021 sería un punto de inflexión para poder recuperar la economía, que dependería principalmente del avance de la vacunación en el Perú. ¿Cuál es tu balance del 2021 y cuáles son tus expectativas para el 2022?

Luego de la crisis sanitaria del 2020, la economía peruana se ha venido recuperando paulatinamente, aunque en algunos sectores aún sin llegar a los niveles previos a la pandemia. En general, las expectativas económicas para 2022 están muy condicionadas a las acciones del gobierno actual. Estas tienen un efecto directo sobre las inversiones y el ambiente general para los negocios. Por otro lado, un tipo de cambio alto y precios favorables de metales benefician a los sectores de exportación, pero perjudican a los sectores que dependen de las importaciones.

La PUCP busca formar profesionales con un alto compromiso social. El lema de la campaña actual es «eres grande cuando haces algo grande por los demás» e invita a los estudiantes a “ser grandes”. Desde esa perspectiva, ¿qué implica para ti “ser grande”? ¿Qué es lo que más valoras en un profesional?

Para mí, ser grande tiene que ver con un conjunto de características. Para empezar, ser grande es buscar hacer el bien; además, tener resiliencia, visión, inteligencia y compasión. No hay nada que pueda detener a una persona con estas características. Yo quisiera que, a través de mi trabajo, de mis ideas y de mi experiencia, las empresas con las que colaboro sean destacadas, reconocidas, influyentes y exitosas. Creo en la empresa privada y que en el Perú las empresas pueden ser de talla mundial.

¿Qué representa tener éxito?

Tomando como referencia mi herencia oriental, considero que el éxito es un estado de paz de la mente y del cuerpo. Éxito es irte a dormir por la noche y estar contento con la vida. Saber que ese día diste lo mejor de ti y que tu trabajo contribuyó a hacer el bien.