Para Raquel Cuentas, magíster en Estado de Bienestar Social, la ley ha generado una expectativa positiva. Esta supone la recuperación de un derecho, ya que con el retiro de los fondos podrán decidir sobre el dinero que fue descontado de su sueldo mensualmente por años. Por su parte, el economista y docente de la Diplomatura de Microfinanzas, José Loayza, muchos de los potenciales beneficiados no están al tanto sobre las implicancias de esta ley, lo que les impide tomar decisiones adecuadas.

Qué factores tener en cuenta

La promulgación de la ley ha dejado muchas interrogantes, sostiene Cuentas, ya que ha sido pensada para aquellos que tienen un fondo considerable, de S/. 125 mil como mínimo, por lo que contarían con el equivalente a dos sueldos mínimos mensualmente. Sin embargo, este no es el perfil de la mayoría de adultos mayores. Por ello, antes de realizar el retiro se debe determinar cómo ellos llegan a la jubilación, para José Loayza esto se puede medir con tres variables: el nivel de gasto que tienen, sus ingresos mensuales y, finalmente, su nivel de deuda.

Qué hacer con el dinero

Luego de haber resuelto el perfil económico de cada persona recién se puede definir cuánto dinero quedará y qué se debe hacer con este. La primera opción es el ahorro, para esto, el economista exhorta a elegir una entidad regulada por la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) para que, ante la eventualidad de la quiebra de la institución, se cuente con un fondo de seguros. Otra posibilidad es la inversión en bolsa, aunque esta no es recomendable para adultos mayores ya que estas inversiones son pensadas para dentro de 10 o 15 años. Una tercera opción es poner un negocio, aunque esto va a depender también de las propias capacidades del jubilado. La última opción sería dejar el dinero en la misma AFP bajo la modalidad de fondo mutuo y eligiendo el perfil de riesgo; el economista recomienda elegir un fondo bajo en rentabilidad que es muy seguro o uno intermedio donde se arriesga un poco más y la rentabilidad es moderada.

Los especialistas enfatizan que se debe considerar que al decidir retirar el 95.5% de los fondos, el afiliado no tendrá derecho a ningún beneficio de garantía estatal, como por ejemplo el programa Pensión 65. Es decir, a excepción de los servicios brindados por EsSalud, garantizados con el 4.5% de los fondos sin retirar, el adulto mayor quedaría sin respaldo social.

Raquel Cuentas, quien además es coordinadora de la Diplomatura de Microfinanzas, señala que al hablar de adultos mayores no solo debemos pensar en la parte económica, sino que es necesario pensar en una intervención integral que debe garantizarse con los programas sociales ya implementados en el país, pero que aún no han sido vinculados con la atención directa de las personas adultas mayores.

Los especialistas nos dan cuatro recomendaciones:
1. Tener la mayor cantidad de información posible antes de tomar cualquier decisión.
2. Desconfiar de recomendación sobre negocios milagrosos, nada es fruto de la maravilla.
3. No jugar con el dinero, preferir las inversiones seguras.
4. Exigir al Estado e instituciones, servicios y productos que puedan generar una mejor calidad de vida y bienestar.