¿Qué es el hábeas corpus?
Significa del latín “tengamos el cuerpo” o “mostradme el cuerpo”. Constituye un mecanismo procesal para garantizar la vigencia de nuestros derechos fundamentales como lo es la libertad de las personas.

¿Qué derechos defiende?
El hábeas corpus defiende los siguientes derechos que conforman la libertad personal: a) derecho a la integridad personal; derecho a no ser sometido a tortura, y derecho a no ser objeto de una desaparición forzada b) derecho a no ser compelido a declarar contra sí mismo, su cónyuge, sus parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad; y derecho a ser asistido por un abogado libremente elegido c) derecho a ingresar, transitar o salir del territorio nacional; d) derecho a no ser detenido sino por mandato escrito y motivado del juez, o por las autoridades policiales, en caso de flagrante delito; o si ha sido detenido a ser puesto dentro de las veinticuatro horas a disposición del juzgado que corresponda e) derecho a que se observe el trámite debido cuando se trate de la detención de las personas; derecho del detenido o recluso a no ser objeto de un tratamiento carente de razonabilidad y proporcionalidad, respecto a la forma y condiciones en que no se cumple el mandato de detención o la pena.

¿Qué requisitos tiene que cumplir?
Tratándose de algo tan urgente y vital para la vigencia de nuestros derechos, las exigencias formales son mínimas. Lo puede presentar cualquier ciudadano debidamente identificado. Incluso, lo puede presentar una persona que lo represente correctamente. Necesitamos identificar aquellas situaciones fácticas que comprometan injustamente la libertad de la persona.

¿En qué momento se puede presentar el hábeas corpus?
El Ministerio Público iniciará una investigación preliminar sin que formalmente exista un proceso penal. El Ministerio Público se ubica en una etapa pre-jurisdiccional. Y el hábeas corpus puede ser perfectamente presentado en ese momento.

¿Quién declara su procedencia o improcedencia?
El juez constitucional. Los actos arbitrarios en la etapa de investigación preliminar configurados por el fiscal tienen que ser debidamente controlados por el juez constitucional. El Ministerio Público tiene que estar sujeto, como todos los ciudadanos, a un control constitucional.

¿Tiene vacíos su aplicación en el Perú?
El hábeas corpus puede ser mal aplicado por el poder con la finalidad de obtener impunidad. Es sumamente importante analizar la procedencia para evitar que esta institución procesal constitucional no cumpla la finalidad para la que fue diseñada. Lo que sucede es que la flexibilización de garantías procesales penales, característica de políticas criminales que deben confrontar altos niveles de criminalidad organizada, exige en contrapartida un serio control de constitucionalidad, precisamente, para que la lucha contra la criminalidad gane en legitimidad y, por ende en eficiencia. El hábeas corpus, creo, contribuirá a tal propósito. Hay que cuidar también los intereses de la sociedad debidamente representados por el Ministerio Público. Tenemos el derecho como sociedad a defendernos y asegurarnos de perseguir los delitos.

¿Cuál es el objetivo de la investigación que usted ha realizado el hábeas corpus contra actos de investigación preliminar?
En mi libro El Hábeas corpus contra actos de investigación preliminar busco prevenir e identificar situaciones potenciales o riesgosas durante una investigación preliminar que vulnerarían la vigencia de la libertad personal. Lo que queremos es controlar los actos de investigación que no sean fundados en la legalidad, el debido proceso o en razonabilidad. Queremos que los derechos fundamentales sean concurrentes en el proceso de investigación. Por otro lado, con la criminalidad organizada muchas libertades se han flexibilizado y es necesario reforzar algunos mecanismos para encontrar cierto equilibro entre quien persigue y el perseguido.