Imparables. El equipo de wushu trajo a casa un total de veintiocho medallas tras su participación en el Torneo Metropolitano organizado por la Federación Deportiva Universitaria del Perú (Fedup). En esta ocasión, nuestros practicantes de wushu destacaron en las modalidades de formas a mano libre taolu y taichí, sumaron así doce galardones de oro. Por ello, en el acumulado de la tabla general, fuimos los vencedores.
El wushu competitivo se compone de dos disciplinas: sanda, que significa combate, y taolu o exhibición de técnicas. De esta manera, con tan solo veintidós deportistas, nuestra selección se impuso a nueve casas de estudios con grandes delegaciones.

¿La clave de su éxito? Preparación constante y compromiso. “Este es buen grupo. Su asistencia ha sido permanente, por lo que se ha hecho un buen trabajo y se ha notado la diferencia frente a otras universidades”, señala el entrenador y maestro shifu, Paul Jiménez. Y no es para menos, un seleccionado de wushu debe entrenar tres veces por semana un promedio de dos horas y media por sesión. A ello, debe agregarle la carga académica que tiene por los estudios en la PUCP. Aunque la mayoría viene ejercitándose desde las vacaciones de verano, la temporada fuerte inicia con el ciclo regular.

LOS DEPORTISTAS 

Selene Quispe, de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, nunca había pensado practicar un arte marcial. Sin embargo, no se arrepiente para nada de su elección. Antes de la competencia se notaban sus nervios, pero sus compañeros con más experiencia trataban de tranquilizarla. Al final del día, dos medallas de oro colgaban en su cuello: había sido la mejor en taolu tradicional mano libre y arma larga.

Para el seleccionado Renato Calderón, estudiante de Ciencia Política y Gobierno, el wushu es más que un deporte, se ha convertido en una forma de vida. “Es filosofía, es aplicarlo diariamente y vivir cada uno de los entrenamientos como si fuera un aprendizaje en muchos aspectos”, añade.

Resalta la importancia, además, del trabajo en equipo. El logro que acaban de conseguir solo lo piensa en colectivo, ya que ha encontrado en sus compañeros y entrenador, una gran familia.

Sus gestos en el tatami —el área de competencia del wushu— inspiran respeto. Luego, son todo sonrisas y relajación. Es que, para ambos deportistas, la concentración juega un rol importante. “No miro a nadie, solo me mentalizo en qué errores podría cometer y cómo solucionarlos. Pienso en cómo ver al jurado, cómo salir y qué posición poner”, dice Selene. Renato, por su parte, intenta ingresar calmado y hacer sus formas con tranquilidad; una pequeña distracción puede malograr por completo la rutina.

Ahora, el equipo, que ya conoce de podios, se prepara concentrado para la segunda parte del torneo Metropolitano en octubre. No obstante, su más grande desafío llega en el 2020, año en el que intentará retener su título en las competencias nacionales. Seguramente seguiremos escuchando noticias de ellos, porque este es solo el inicio de una generación brillante.

NUESTROS CAMPEONES

Álvaro Mendivil, Carlos Mendoza, José Morillo, Fernando Hidalgo, Leonardo Ubillús, Raúl Reinoso, Jorge Luna, Willy Chan, Elvira Vergara, Marilia Navarrete, Flavio Aguilar, Óscar Ramírez, Ernesto Ortiz, Renato Calderón, Alex Herrera, Daniel Serván, Selene Quispe, Brandon Lara, Alessandra Missa, Kelly Rodríguez, Cristian Gamboa, Carlos Quispe. Delegada: Diana Núñez. Entrenador: Paul Jiménez.