La zona de la Costa Verde abarca diversos distritos y está compuesto por un conglomerado de materiales granulares gruesos, en cuya matriz se encuentra el limo y la arcilla, es decir, que es una grava arenosa. El ingeniero explica que al ser taludes con pendientes muy pronunciadas, hace que la brisa marina, las lluvias y los pequeños sismos, aflojen los materiales y producen la caída de piedras.

Soluciones

El ingeniero Olcese menciona que el enmallado es una solución temporal que no resuelve el problema y que antes de hacerlo se debe proceder con un análisis a la caída de piedras, pasando por la modificación del talud para que sea estable. “Los taludes naturales tienen una forma muy en vertical por lo que es necesario realizarles un corte para poder echarlo, si no las rocas al caer irán de frente a la pista”, explica el ingeniero.

Para esto primero se debe hacer un análisis topográfico del talud y luego cortarlo para que la caída de piedras pueda contenerse de diferentes maneras. El ingeniero explica que la solución del enmallado requiere de ciertas mallas especiales y una sujeción y anclaje específico.

“Todos los análisis, en primer lugar, pasan por cortar el talud, ya que así como está, con su forma tan vertical, la caída de rocas será permanente y por más que se ponga una malla, no podrá contenerlas”, explica el ingeniero y hace hincapié en que la solución del talud pasa primero por una limpieza, luego cortarlo para que darle una inclinación adecuada y luego proponer un sistema de contención, “existen diversas soluciones pero todas tienen que ser diseñadas de una forma adecuada”, agrega.

Peligro constante

La Costa Verde abarca diversos distritos y las características son diferentes. El ingeniero explica que en los estudios realizados, fueron analizando distrito por distrito y encontraron que hay zonas como Barranco y Miraflores, donde el talud natural necesitaría un corte bien extenso para hacerlo estable sísmicamente, esto implica que es necesaria una intervención más fuerte por parte de las autoridades y, si bien este es un proceso costoso, se debe tomar en cuenta la seguridad de las miles de personas que circulan por ahí.

Los trabajos y análisis que se han hecho han concluido que el talud de la Costa Verde debe ser intervenido, el ingeniero explica que hay zonas más críticas y si bien algunos distritos han sembrado plantas o le han colocado pintura, esto no cambia que el riesgo de que se den grandes desprendimientos de rocas y que se sigan produciendo más accidentes.