El interés por esta profesión se gestó en el hogar pues su abuelo y su padre trabajaron en la producción y logística de una de las minas más grandes del Perú durante los sesenta y setenta. “A pesar de la creciente demanda de profesionales calificados en el país, quería adquirir los conocimientos de ingeniería de minas aplicados en el planeamiento y en las operaciones, para mejorarlos y aplicarlos en un futuro en el Perú. La tecnología minera canadiense es muy avanzada y los estándares de seguridad para los trabajadores son importantes. Además, quería tener la experiencia de trabajar con gente de diferentes nacionalidades”, recuerda.

Al norte de América

Fue así que David ingresó a las filas de Iron Ore Company of Canada, la más grande productora de hierro del país, proveedora líder de pellets y concentrados de hierro a nivel mundial. Miembro del grupo Rio Tinto, esta mina se encuentra en la provincia de Terranova y Labrador, ubicada en el extremo más oriental de Norteamérica. A mediados de los sesenta, la compañía fundó Labrador City, un pueblo acondicionado para alojar a sus trabajadores y cuya población actual se estima en 7200 habitantes. Desde hace tres años, David vive allá junto con su esposa y dos hijas.

Como parte del Departamento de Planeamiento y Operaciones de Mina, David se encarga de definir el plan de minado diario, semanal y mensual de una operación a tajo abierto, junto con el superintendente y el jefe de departamento. Además, brinda solución a los problemas que se presenten diariamente, como fallas de corriente en la maquinaria, complicaciones en la perforación y voladura, presencia de agua en los tajos, disponibilidad de equipos, etc. “A veces es bastante estresante pero te ves gratificado cuando las cosas se resuelven y logras los objetivos planeados».

La era del hielo

Adaptarse a una nueva localidad nunca resulta una tarea sencilla, menos aún si te mudas a uno de los puntos más gélidos de Canadá: “Hay solo dos estaciones al año en Labrador City: verano e invierno. El verano es cálido (podemos llegar a los 25 °C), pero solo dura dos meses. El resto del año estamos en invierno y durante los meses de enero y marzo la temperatura desciende hasta -60 °C con vientos fríos y con 2.5 metros de nieve anual”.

Evidentemente, estas condiciones climáticas dificultan el desempeño de los trabajadores y la maquinaria. Como anécdota, David recuerda que el año pasado, mientras manejaba una camioneta 4×4 de la compañía camino a una inspección, se quedó atrapado más de dos horas bajo un gran montículo de nieve. Por fortuna, pudo llamar por radio a sus compañeros y con su ayuda, logró salir de allí con frío pero a salvo. «El proceso de adaptación viene de a pocos, no es de noche a la mañana. Pero cuando uno tiene voluntad y deseos de superación, nada es imposible», refiere.

Si deseas trabajar en el extranjero, David te recomienda:

• Aprende el idioma: “Lo más importante en un centro de labores y en la vida cotidiana es tener una buena comunicación. Si deseas estudiar una maestría en Canadá, tener excelente dominio del inglés es fundamental”.
• Infórmate: “Estar siempre actualizado en las nuevas herramientas informáticas aplicadas en su campo te da un plus para que seas más atractivo en el mercado laboral”.
• Establece relaciones: “Tener una amplia red de contactos vinculados al mismo sector facilita obtener nuevas oportunidades académicas o profesionales”.
• Atrévete a cambiar: “El deseo de adecuarte a una nueva cultura contribuye a que tengas un buen desempeño en el nuevo entorno donde te desarrollarás”.

«Tengo la oportunidad de trabajar con diferentes profesionales, egresados de las más prestigiosas universidades en Canadá, Australia y Estados Unidos. A ellos siempre les digo que la PUCP es una Universidad muy competitiva. La enseñanza que recibí fue muy completa, con una plana docente altamente calificada y con un currículo bastante diverso. La PUCP me ha dado los conocimientos necesarios para desempeñarme como ingeniero en Perú y en el extranjero, con una base ética y académica muy sólida», acota David.

Fotos: David Ponce, archivo personal