Álvaro es un artista tusán y, desde sus últimos años en la PUCP, empezó a trabajar la temática del legado prehispánico y oriental. “Hay algunos puntos de conexión entre las dos culturas; especialmente, en la manera en que ambas aprecian la naturaleza y sus creencias mitológicas”.

Para el concurso, Álvaro eligió trabajar la figura de un dragón. “Esta criatura en la mitología china está asociada con el intelecto, la fuerza, la prosperidad y el agua, elemento que aseguraba la abundancia”, explica. “Las sociedades prehispánicas de los Andes también representaban dragones sobrenaturales. En mi imaginario, este dragón es la misma criatura conocida y representada por nuestros antepasados peruanos y chinos al estar conectados por un mismo horizonte en el océano Pacífico”, declara.

Junto con el de Álvaro, los trabajos de 40 destacados artistas tusanes forman parte de la muestra Chinarte, que va hasta el 20 de octubre en el Mall del Sur. Cabe destacar que los finalistas fueron todos de la Especialidad de Escultura de nuestra Facultad de Arte y Diseño. Posteriormente, la obra ganadora, la de Macalopú, será instalada en los jardines ubicados en el frontis del Centro de la Amistad Peruano China, en Jesús María, en formato grande: 3 por 5 metros.