La calidad y creatividad de las propuestas presentadas por nuestra universidad en Pedagogías: Concurso de Proyectos de Talleres de Diseño 2010-2012 llevaron a que la PUCP sea la institución más laureada. “Esto es un hecho trascendental, puesto que la PUCP ha sido reconocida a nivel nacional, y ha demostrado que nuestros arquitectos son los mejores del medio”, señala, entusiasmado, el Arq. Manuel Flores, director de Estudios de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo y asesor de una de las alumnas galardonadas.

De las 18 propuestas premiadas por este concurso organizado por la prestigiosa revista de arquitectura A35, 11 tienen sello PUCP. Entre ellas, los primeros puestos en las tres categorías de las que constaba el concurso: “Básico”, “Formativo” e “Integral”, que comprenden proyectos desarrollados en los primeros cuatro ciclos de la carrera, en los siguientes cuatro y en los dos últimos, respectivamente.

Hablan los ganadores

“Es una gran satisfacción que mi proyecto haya quedado en el primer puesto luego de competir con muchos otros de todo el país. Esto demuestra el esfuerzo dedicado a desarrollar un proyecto innovador y, a la vez, necesario para los habitantes de esa zona, ya que lo que busca un arquitecto es estar al servicio de la sociedad mediante su arquitectura”, cuenta Julissa Casas, que obtuvo el primer puesto en el nivel “Formativo” con una propuesta para crear una planta de teñidos de fibra de alpaca en el Cañón del Colca. “La idea es promover entre los habitantes la tradición de la elaboración de tintes naturales y el pintado de madejas, que  se está perdiendo debido a los tintes sintéticos”, comenta.

La misma actitud al servicio de la sociedad está presente en el proyecto de Martín Montañez, primer puesto en la categoría “Integral”. Él presentó un museo de paleontología en plena Costa Verde, ya que allí es posible apreciar “los estratos y sedimentos acumulados a lo largo de millones de años. La masa del acantilado es un elemento que permite medir el tiempo”, explica. Su trabajo, que fue elaborado bajo la supervisión de Jean Pierre Crousse, Cynthia Watmough y Alfredo Benavides, docentes de nuestra casa de estudios, “propone un método constructivo que vaya acorde con las particularidades del terreno y, a la vez, posibilite descender al generar cavidades en las cuales se puedan exponer las piezas”.

Por su parte, María Gracia Cebrecos, ganadora en la categoría “Básico”, presentó el proyecto “Tres terrazas”, cuyo campo de acción era un edificio público ubicado en el asentamiento humano de Cajamarquilla, en el distrito de San Juan de Lurigancho. Según señala, la propuesta consistía en “tomar un terreno baldío, que, de cierta forma, ya era activo por cualidades de la zona, y repotenciarlo con la intervención. El manejo de la topografía es un factor clave que se da en mi propuesta. Se plantean espacios en los que no solo se da una función específica, sino varias, por ejemplo, la losa deportiva, que no funciona como losa, sino también como plaza y anfiteatro. Además, se conserva un flujo peatonal que ya existía, evidente por las huellas en el terreno”, señala María Gracia. Y agrega: “Es un gran orgullo haber ganado este concurso, un gran mérito personal que me ha causado una de las mayores satisfacciones. El mérito no es solo mío, sino también de mis profesores, especialmente del Arq. Manuel Flores, quien fue que me motivó a participar y presentar un proyecto que hice en su taller”.

Además de ellos, otras ocho propuestas hechas por estudiantes de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo fueron reconocidas. En la categoría “Básico”, Alexis Salinas Mark recibió la segunda mención honrosa; en la categoría “Formativo”, Paola Liza Hernández, la segunda mención honrosa, Gabriela Garay Bullón, la tercera mención, y Renzo Pascual Velásquez, la cuarta; y, en la categoría “Integral”, Pablo Quiñones Reyes recibió el segundo puesto, Angélica Piazza Risi, la primera mención honrosa, Conrad San Roman Flores, la segunda mención honrosa, y Eliana Cabrera Mendoza, la tercera. Definitivamente, nuestros arquitectos no dejan de sorprendernos.