Cinco alumnos de Arte presentan propuesta en Selvámonos
Un grupo conformado por cinco alumnos de la Facultad de Arte fue seleccionado por los organizadores del Festival Selvámonos para presentar una propuesta artística de tres elementos durante la semana cultural que precedió a la realización del festival en Oxapampa.
Texto:
Luciana Alva
Además de ser un festival de música, Selvámonos es un espacio para apreciar y presentar expresiones artísticas de distinto tipo. La semana previa al inicio de los conciertos es conocida como la Semana Cultural, en la que distintos artistas y colectivos comparten sus obras con los asistentes a la feria y la comunidad de Oxapampa. Para la semana cultural de este año, los organizadores realizaron un concurso dirigido a alumnos de la Facultad de Arte de la PUCP, quienes debían presentar una propuesta artística bajo la temática de los mitos. La propuesta ganadora fue la presentada por los alumnos Pierina Másquez, Paola Franco y Carlos Molina, de Pintura; y por Ibrain Plácido y Celeste Vargas Hoshi, de Grabado.
Con la ayuda de la profesora Eliana Otta, del Departamento de Arte, el equipo planteó una propuesta creativa al tema designado por Selvámonos, donde tuvieron especial cuidado de no caer en estereotipos. “Muchos estudios de antropología y sociología ven que el mito es un espacio fundacional para las comunidades y las tribus, y que explica más o menos cómo se llega al presente. Entonces nos dimos cuenta de que hay un sentido histórico en el mito y la intención de explicar las cosas por medio de una ficción; entonces enfocamos nuestra propuesta como “realidad y ficción”, explica Ibrain. Luego de, aproximadamente, un mes de coordinación y preparación, el grupo viajó a Oxapampa para presentar su propuesta del lunes 22 al viernes 26 de junio. La primera actividad fue una exposición de los trabajos de cuatro de los integrantes.
La exposición, nombrada “Muestra sobre naturaleza”, fue realizada en la Biblioteca Municipal de Oxapampa. Ibrain, quien fue el curador de la muestra, explica que buscaron presentar una visión completa de la naturaleza que recuerde que el ser humano forma parte de ella. “Escogí la obra de Pierina como hilo conductor para el resto de cosas. Su obra es muy curiosa, porque es un libro sobre cómo matar animales para comerlos. Entonces ahí habla bastante sobre la naturaleza del humano; de tener que matar algo para consumirlo, pero que ya no es una naturaleza instintiva, sino que es cultural, porque está sujeta a una serie de rituales”, indica.
A partir de ahí, se seleccionaron una serie de paisajes pintados por Carlos, que recordaba el afán del ser humano por “enclaustrar la naturaleza”; una colección de fanzines realizada por Paola, que hablaba sobre la mutación y la deformación de rostros de humanos y monos; y, finalmente, Celeste presentó un trabajo sobre podología, que reflexionaba sobre la relación del cuerpo humano con la naturaleza desde puntos ubicados en los pies.
Los dos días siguientes a la realización de la muestra, el grupo desarrolló un taller para niños del Colegio Agropecuario. Aquí, el grupo trabajó con niños de entre 9 y 13 años. Se buscaba que los niños combinaran la realidad con la ficción por medio de cuentos y de dibujos. El resultado final fue una ilustración en secuencia de un cuento colectivo en el que participaron todos los niños asistentes.
Desde el martes hasta el viernes previo al inicio de los conciertos, el grupo armó un taller itinerante de grabado, donde aprovechaban los elementos presentes en el ambiente y utilizaban materiales de fácil acceso en la zona, cuenta Celeste. “Les pedíamos a las personas que trajeran monedas, hojas o cosas planas con estructura, y nosotros les enseñábamos cómo podían transferir estos objetos a una obra gráfica”, detalla.
El objetivo de esta propuesta era mostrar que el arte es una expresión democrática que permite a las personas crear de forma libre y que se puede realizar una obra completa con materiales fáciles de encontrar, como témperas, esponjas, hojas, monedas y colores. Al finalizar la exposición, y los dos talleres, el equipo considera que se logró el objetivo que se plantearon desde el inicio, y que los asistentes a Selvámonos hicieron suyas las técnicas y los materiales que les propusieron utilizar. “Salieron cosas que no se nos habían ocurrido. Había un espacio de creación muchísimo más amplio del que esperábamos”, cuenta Celeste.
Deja un comentario