Cada vez son más los jóvenes profesionales que se animan a hacer negocios con el gigante asiático que en el 2013 fue considerado la primera potencia comercial del mundo. Roy Chason asegura que un aspecto positivo para los emprendedores es que en China existe una infinidad de rubros en los que se puede iniciar un nexo comercial. “Hay oportunidades de negocio en casi todos los sectores, porque China es una de las economías más diversas del mundo. Están los sectores agrícola, salud, tecnología, alimentación, todo el ámbito del retail, energías renovables y, más que nada, está creciendo muchísimo en China todo lo que tiene que ver con servicios”, indica.

Según Chason, en China hay grandes oportunidades de abrir nuevos mercados. Por ejemplo, refiere que varios empresarios están exportando al país oriental diversos productos alimenticios que son nuevos para el paladar de los chinos, pero que pueden convertirse en todo un éxito con una buena estrategia comercial. “Por ejemplo, hace veinte años nadie tomaba café en China, era muy amargo para ellos, pero se ajustó el sabor y ahora el chino toma su café con mucha leche. Actualmente, Starbucks y otras cadenas están teniendo un éxito increíble. Se pueden abrir nuevos mercados, nuevos productos, nuevas tendencias claramente. El chino es muy abierto a probar otros productos y por eso hay tanta oportunidad, pero también dificultad, cambiar hábitos no es fácil”, precisa.

Pese a las grandes oportunidades que ofrece, el especialista advierte que hacer negocios con China no es nada sencillo. “El mercado chino es uno de los más competitivos y más difíciles del mundo sin duda, pero la oportunidad de ganancias son casi infinitas. Por eso todo el mundo intenta ir al mercado chino, pero así como muchos fracasan, muchos también tienen éxito”, señala.

Para aumentar las posibilidades de tener éxito, Roy Chason, quien vive desde hace tres años en la ciudad de Shangai, recomienda a los jóvenes emprendedores aprender mandarín y tener un buen nivel de inglés. Pero, sobre todo, aconseja vivir una temporada en el país oriental. “Yo creo que se requiere vivir un tiempo en China, entender la cultura, entender cómo es su forma de comunicación. Además, es importante construir amistades con chinos, que tienen diferentes costumbres a las occidentales, que uno tiene que conocer y entender, pero en realidad son muy abiertos”, recalca.

Por último, recomienda a los jóvenes empresarios que deseen hacer negocios desde nuestro país hacerlo en sectores como el turismo, un rubro que no ha sido explotado del todo. “En turismo, hay mucho por hacer, Perú no es tan conocido en China. Los chinos suelen viajar en grupos, comen mucho de su comida local en el exterior. Por un lado, está el turismo masivo para chinos de clase media, y por otro lado, el turismo de lujo para gente que tiene muchísimo dinero en China y que quiere algo diferente. En promedio cada turista chino suele gastar un promedio de mil dólares al día, más que cualquier otro turista”, concluye.