¿Cómo gestionan el trabajo en el hogar los hombres y las mujeres? ¿Cuánto se ha avanzado en equidad en Lima Metropolitana durante la última década? Estas son algunas de las interrogantes del estudio de Gestión y Distribución del Tiempo de las Mujeres y Hombres en el Perú, investigación desarrollada antes de la pandemia por el Centro de Investigación Liderazgo Socialmente Responsable, Mujer y Equidad de CENTRUM PUCP.

Según la Dra. Beatrice Avolio, directora del Centro de Investigación Liderazgo Socialmente Responsable, Mujer y Equidad, el último informe de distribución del uso del tiempo fue elaborado por el INEI en el 2010. Por ello, a fines del 2019, se realizó con Pulso PUCP (antes Instituto de Opinión Pública – IOP) un informe cuantitativo que consta de 950 encuestas presenciales a hombres y mujeres en Lima Metropolitana. “El objetivo era saber si al final de la década se habían producido avances respecto a los resultados del 2010”, señala la profesora Avolio.

Inequidad en el hogar

Ana es una trabajadora de 42 años que dedica alrededor de 50 horas a la semana a su trabajo remunerado. Manuel, su pareja, trabaja en promedio 58 horas semanales, ocho más que Ana. Sin embargo, la ecuación es distinta cuando vuelven a casa. Mientras Ana dedica 34 horas semanales al cuidado del hogar, Manuel solo invierte 16 horas. 

Se ha encontrado que hay un incremento de la autoexigencia en las mujeres más jóvenes. Esto podría traer potenciales consecuencias en su salud física y mental”.

Este es solo un ejemplo de lo que ocurre en nuestra capital. A partir de esta investigación cuantitativa, se evaluó el trabajo productivo remunerado y no remunerado, además de las actividades de cuidado personal. De acuerdo con este estudio, la carga de trabajo dentro y fuera de casa es de 83.4 horas en una mujer promedio, mientras que para los hombres es de 74.3 horas.

“Las mayores diferencias se aprecian en el trabajo no remunerado, donde no ha habido cambios desde hace una década”, acota Avolio, quien también es una de las autoras del informe. La especialista detalla que esta desigual distribución del tiempo para las tareas del hogar es relevante porque acarrea graves consecuencias para la mujer. “Esto ocasiona problemas de salud física y mental, y menor desarrollo económico y profesional”, añadió la Dra. Avolio.

Estrés y competitividad

María es una joven de 25 años sin hijos que acaba de terminar su carrera técnica. Ella dedica en promedio 51 horas a la semana al trabajo remunerado y otras 35 al cuidado de la casa. Participa continuamente en capacitaciones laborales, va al gimnasio, al nutricionista y hace voluntariado en su iglesia. En total, suma otras 78.4 horas de labores extras cada semana.

Su hermano Juan tiene 26 años y trabaja tantas horas como María, pero su aporte al hogar es menor: dedica 14 horas semanales a las labores domésticas. A su vez, Juan dedica 74 horas a las actividades personales, 4 horas menos que María. Este caso es un reflejo de la distribución del tiempo entre el grupo de jóvenes limeños de 18 a 29 años.

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de cada 10 mujeres inactivas en el mercado laboral (57.7%) se dedican a realizar quehaceres del hogar, mientras que en el caso de los hombres inactivos este porcentaje es del 17.8%.

“En todas las edades y sectores sociales, las mujeres se ocupan más de las actividades de cuidado y del hogar, además de mantener trabajo remunerado”, comenta Avolio. Escuchamos mucho la frase ‘El hombre ayuda’, lo que implica que no siempre asuman la responsabilidad de las tareas de manera equitativa. “Se ha encontrado que hay un incremento de la autoexigencia en las mujeres más jóvenes. Esto podría traer potenciales consecuencias en su salud física y mental”, añade Avolio.

CENTRUM PUCP proyecta elaborar otros estudios para conocer el impacto de la pandemia, del teletrabajo y de la teleducación en la distribución de las tareas del hogar entre hombres y mujeres. Investigaciones de este tipo permiten que se puedan implementar políticas que fomenten la equidad entre hombres y mujeres en el país.