Cuando iniciamos las clases nos enfrentamos a nuevos retos y responsabilidades, los que tratamos de cumplir de forma exitosa organizando nuestro tiempo. Sin embargo, algunas veces, en nuestro afán de que las cosas salgan bien -tanto en las actividades académicas como en nuestra vida social-, podemos llegar a sentirnos saturados y presionados, y le dejamos la puerta abierta a la ansiedad.

La ansiedad, en sí, es una respuesta automática y natural de nuestro cuerpo ante situaciones que resultan amenazantes o desafiantes. Cuando tenemos un mal manejo de nuestras prioridades o nos obsesionamos con algo, esta respuesta  se puede salir de control, y hacernos sentir intranquilos y preocupados constantemente.

Justamente, para trabajar la ansiedad en la Universidad, la Oficina de Servicio de Orientación al Estudiante (OSOE) pone a tu disposición una serie de talleres que te ayudarán a manejarla y a conocerte mejor.