¿Y si la historia del Perú no ha sido la que siempre hemos visto? Esta es la pregunta que nos plantea Rolando Arellano en su nuevo libro de ficción El Tesoro. A lo largo de nuestros años siempre nos han dicho que fueron los españoles que conquistaron América, que si hubieran venido los ingleses seríamos más desarrollado o que las migraciones a las grandes ciudades fueron una tragedia. Pero, ¿cuán cierto es esto?

“Cuando uno ve los medios, lee los diarios o a los líderes de opinión, generalmente, se habla de lo mal que estamos y nunca de lo bueno que nos está pasando. Traté de explicar el por qué de esa posición tan pesimista y llegué a la conclusión de que eso tenía que ver también con un poco de autoestima sobre nuestra historia”, explica Rolando Arellano, licenciado en Psicología por nuestra Universidad y docente de Centrum PUCP.

En los medios, generalmente, se habla de lo mal que estamos y nunca de lo bueno que nos está pasando. En mi libro, traté de explicar el por qué de esa posición tan pesimista".

Un enfoque diferente

A veces puede ser un poco complicado conocer exactamente cómo sucedió nuestra historia. Sin embargo, existen ciertas herramientas para hacer este camino más ameno. Uno de las decisiones que tomó Arellano para este libro fue hacerlo en forma de novela de ficción. Es decir, si bien hay personajes y espacios reales, ensaya los hechos desde un punto de vista positivo para que este sea de lectura amplia.

“El libro habla de una especie de conspiración o un grupo secreto de peruanos que, a lo largo de toda nuestra vida histórica, ha tratado de mostrar el lado positivo contra las fuerzas oscuras”, describe. Retrata este viaje visto en muchas historias y películas, pero enfocado en nuestra historia. Para ellos se ha basado en datos corroborados por historiadores que incluso inspiran algunos capítulos.

El Tesoro comienza en Caral y termina en Villa María del Triunfo. A través de estos dieciséis capítulos, un grupo de aventureros recorre cada uno de los párrafos. Uno de ellos es un profesor francés retirado que regresa al Perú después de 30 años. Junto a él hay un niño que vive en las periferias de Lima, también un perro y hasta un estudiante de historia. Todos ellos y más van encontrando quipus y documentos con los cuales se van comunicando con personajes como Ricardo Palma o Andrés Avelino Cáceres.

Plasmando los personajes

Un segundo punto, que Arellano vio importante en su nuevo libro, fue el de mostrarle al lector cómo se verían realmente los personajes que él había imaginado. Para eso, el libro incluye ilustraciones del artista José Lara, quien trabajó el cuerpo y rostro de cada uno de los viajeros. “Lara me ayudó mucho en esto, porque cuando hablamos de la historia, él mismo iba imaginando cómo serían los personajes y eso ayudó mucho a que en cada capítulo se pueda saber qué está pasando”, comenta el autor. Este tipo de recurso, añade, le va a permitir al lector joven o adulto imaginar mejor de quién se trata y puedan hasta identificarse con ellos.

El Tesoro

Rolando Arellano

Encuéntralo en quioscos y librerías, a S/25.