Educar para la democracia: conoce experiencias y esfuerzos por lograr la reconciliación en Colombia, Chile y Perú
En el simposio permanente, organizado por las universidades pontificias Javeriana, Católica de Chile y PUCP, se debatieron y compartieron las iniciativas y desafíos que estos 3 países tienen para lograr la paz y reconciliación en sus sociedades. Aquí presentamos un resumen de los primeros 3 paneles.
Texto:
Oscar García MezaFotos:
Alex Marroquín
¿De qué manera se pueden afrontar los complejos procesos de paz y reconciliación en nuestras sociedades sudamericanas? Para hablar de las características propias y puntos en común de Colombia, Chile y Perú, el panel “Procesos históricos de quiebre de la convivencia democrática” -realizado el 6 de mayo en las instalaciones de la Pontificia Universidad Javeriana (PUJ) de Bogotá, Colombia, como parte del primer día del Simposio permanente Educar para la democracia– contó con las ponencias de los destacados profesores, el politólogo Dr. Andrés Dávila, de la PUJ; el historiador Stephan Ruderer, de la Pontificia Universidad Católica de Chile (UC); y el Mag. Juan Miguel Espinoza, del Departamento de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Perú (PUCP).
Los procesos de paz en Colombia
El Dr. Dávila definió así la historia de su país: “Colombia vive simultáneamente, desde sus orígenes republicanos, en una constante coexistencia de la democracia con la violencia y los conflictos”. Recapitulando, mencionó que los procesos de paz han estado marcados por paradojas, por ejemplo la Constitución de 1991, que incluyó al M-19 pero no a las FARC ni al Ejército de Liberación Nacional. “Curiosamente, este acuerdo no disminuyó el conflicto porque a fines del siglo XX vivimos la peor fase de violencia”, mencionó.
Colombia vive simultáneamente, desde sus orígenes republicanos, en una constante coexistencia de la democracia con la violencia y los conflictos”.
Ya en el presente siglo, el politólogo resaltó que la paz propuesta por el presidente Santos fue planeada y bien desarrollada. Sin embargo, el proceso que lleva el actual presidente Gustavo Petro “da la sensación de que no nos reconcilia sino nos polariza”, dijo. Por último, Dávila resaltó las iniciativas por la paz realizadas en la sociedad civil. “En términos de reconciliación y democracia, estamos frente a un futuro muy complejo y desafiante, pero las experiencias de largo plazo histórico nos permiten tener esperanza”, enfatizó.
El rol de la Iglesia católica en la reconciliación chilena
El Dr. Ruderer contó que si bien en Chile se ha fomentado la reconciliación desde 1990, hay muchos sectores que no reconocen los crímenes de la dictadura ni quieren pedir perdón. “Si la Iglesia católica quiere cumplir con el rol de mediador en la reconciliación de la sociedad, ¿puede estar en ambos bandos o es necesario tomar partido para convencer a los que quieren reconciliarse y excluir a los que no?”, se preguntó el historiador y docente de la UC haciendo reflexionar a todo el público.
En un detallado recorrido histórico, el especialista comentó que la Iglesia católica reaccionó de manera cautelosa ante el golpe dado por Pinochet -porque temía que sucediera una guerra civil- pero luego tomó una postura crítica al ver las torturas y desapariciones. Asimismo, la institución religiosa destinó recursos a favor de la defensa de los derechos humanos y en apoyo a las víctimas. Por último, señaló la similitud del pronunciamiento de los obispos chilenos medio año después del golpe con una publicación de los jesuitas chilenos del 2023. En ambos casos, se menciona que para lograr la reconciliación se necesita primero pedir perdón.
El historiador Stephan Ruderer de la Pontificia Universidad Católica de Chile (UC) comentó que la Iglesia católica reaccionó de manera cautelosa ante el golpe dado por Pinochet -porque temía que sucediera una guerra civil- pero luego tomó una postura crítica al ver las torturas y desapariciones. Asimismo, la institución religiosa destinó recursos a favor de la defensa de los derechos humanos y en apoyo a las víctimas.
La reconciliación después del conflicto armado interno peruano
Nuestro docente del Departamento de Teología Mag. Juan Miguel Espinoza empezó su ponencia citando la enseñanza del Papa Francisco, que nos dice que la verdadera reconciliación no escapa del conflicto, se logra a través del diálogo y la negociación transparente.
“La república peruana se ha construido sobre una asimetría de poder donde unos pocos tienen mayor influencia sobre el conjunto y muchos son excluidos de la toma de decisiones”, sostuvo Espinoza para explicar el caso peruano. Asimismo, brindó un repaso histórico del conflicto armado interno.
Era imprescindible que los perpetradores respondieran por sus crímenes. Lamentablemente, el foco se centró en la sanción y se descuidó la reconciliación como refundación del pacto social".
Luego de la caída de Fujimori, explicó nuestro docente, se constituyó la Comisión de la Verdad y Reconciliación. “Era imprescindible que los perpetradores respondieran por sus crímenes. Lamentablemente, el foco se centró en la sanción y se descuidó la reconciliación como refundación del pacto social”, explicó. Uno de los mecanismos en el que más se ha avanzado es el de las reparaciones, que ha atendido a más de 200 mil personas; sin embargo, citando a nuestras profesoras Dra. María Eugenia Ulfe y Ximena Málaga, dijo que se puede mejorar pues se ejecuta desde una mirada tecnocrática y urbana.
Mira aquí el Panel 1 «Procesos históricos de quiebre de la convivencia democrática»
Novedosas iniciativas de reconciliación con distintos actores de la sociedad
El segundo panel “Experiencias y aprendizajes de reconciliación” contó con las exposiciones de la egresada de Ciencia Política de la PUJ Valentina Rodríguez; la profesora de la Escuela de Psicología de la UC Dra. Marcela Cornejo; y la docente del Departamento de Artes Escénicas de la PUCP Dra. Lorena Pastor. Todas ellas compartieron novedosas experiencias de reconciliación que han investigado e incluso han organizado.
Un emprendimiento social que contribuye a la reconciliación
Memorias Colombia es un colectivo social de emprendimiento en el cual se juntan las víctimas del conflicto armado interno, exmiembros de las FARC y representantes de la sociedad civil para ofrecer sus productos. Sobre esta novedosa iniciativa nos habló la egresada de Ciencia Política de la Pontificia Universidad Javeriana Valentina Rodríguez, quien precisamente hizo su tesis sobre este tema.
“A partir del diálogo, escucha y voluntad, se puede lograr este cambio que necesitamos como sociedad para alcanzar la reconciliación”, dijo Rodríguez, quien resaltó que el proyecto tiene una perspectiva social y se enfoca en el contexto del posconflicto armado. Sin duda, una manera creativa de ir sanando las heridas sociales.
A partir del diálogo, escucha y voluntad, se puede lograr este cambio que necesitamos como sociedad para alcanzar la reconciliación”.
Apoyar desde las universidades las iniciativas de reconciliación
La profesora de la UC Dra. Marcela Cornejo nos brindó un recorrido por las diferentes Comisiones de la Verdad establecidas por el Estado chileno. Entre ellas la de 1990; la mesa de diálogo de 1999, que convocó a representantes de la sociedad civil, política, Iglesia y fuerzas armadas; y la implementada por la presidenta Bachelet en el 2010. Además de estas comisiones, señaló que hay iniciativas orientadas a la reparación material y simbólica a las víctimas.
La docente se preguntó si se puede hacer todo lo pendiente en reconciliación y reparaciones: “Es importante priorizar y establecer planes de trabajo realistas y que se reconozcan objetivos, así como condiciones sociales, económicas y políticas. En este sentido, es importante que como universitarios nos hagamos escuchar y apoyemos las políticas públicas para retomar lo ya realizado y mejorar en el camino”.
Es importante que como universitarios nos hagamos escuchar y apoyemos las políticas públicas para retomar lo ya realizado y mejorar en el camino”.
Devolver la dignidad y el valor como personas a los presos
Nuestra docente del Departamento de Artes Escénicas, antropóloga y artista Dra. Lorena Pastor contó su experiencia al frente del proyecto de investigación y creación escénica en penales “Soy libertad”, que realiza la PUCP con el INPE desde hace 10 años. “Nos concebimos como una comunidad artística intra y extramuros que tenemos entre nuestros principios la horizontalidad, el juego, escucharnos y sostenernos”, comentó.
Resaltó que esta iniciativa tiene como eje central la historia de vida de cada uno de los participantes. A partir de ello, se genera un proceso de indagación y creación con el objetivo de recolocar a los reclusos en el mundo como seres humanos que tienen igualdad de derechos y dignidad.
La reconciliación es un proceso imperfecto en el que debemos lograr salir de las dicotomías. En las universidades, tenemos que ir y construir conocimientos y saberes con otros espacios, comunidades y personas".
“La reconciliación es un proceso imperfecto en el que debemos lograr salir de las dicotomías. En las universidades, tenemos que ir y construir conocimientos y saberes con otros espacios, comunidades y personas. Escucharnos, conectarnos y ser capaces de poner en cuestión nuestro individualismo. Es difícil pero sí es posible en tanto podamos tener estos espacios de encuentro y reconocer en el otro a ese ser humano que tiene los mismos anhelos que uno”, resaltó nuestra profesora y artista.
Mira aquí el Panel 2 «Experiencias y aprendizajes de reconciliación»
El papel de la democracia y las enseñanzas del Evangelio en la reconciliación
El martes 7 de mayo se realizó el panel 3 “Significado, alcances, limitaciones y desafíos de la relación democracia-reconciliación”. Contó con las ponencias del politólogo y director del Doctorado en Estudios para la Paz de la PUJ-Cali Dr. Mauricio García, S.J.; el Dr Rodrigo Mardones, profesor del Instituto de Ciencia Política de la UC; y nuestro alumno de Psicología Gabriel Mejía.
¿Cómo se relaciona la democracia con la reconciliación?
Hay 4 visiones para entender la reconciliación, nos señaló el Dr. Mauricio García, S.J.: transtemporal, que conecta pasado, presente y futuro; asimétrica, que pone el esfuerzo en la recuperación de la víctima como ciudadano; interdependiente, la cual implica construir un futuro compartido entre todos; y multinivel, que demanda integrar tanto lo personal como lo comunitario, político e institucional.
“La clave de la relación entre democracia y reconciliación está en la participación amplia y real de los distintos actores sociales. No basta que sea una mera apariencia, sino una auténtica dinámica multinivel, interdependiente y transtemporal”, mencionó el padre García.
Referencias teóricas sobre reconciliación y democracia
En la línea de la anterior exposición, el Dr. Mardones nos brindó valiosas aproximaciones teóricas sobre este campo. Acerca de la democracia liberal representativa, explicó que en teoría debería resolver la desigualdad, exclusión y la violencia pero no lo puede lograr porque persiste en nuestras sociedades latinoamericanas una fuerte desigualdad política y en los estatus de los ciudadanos
“La política de reconciliación parecen estar centrada en la memoria pero en realidad es la construcción del futuro. Es un punto crítico para empezar a pensar en términos de generar inclusión, fundamentalmente de los grupos tradicionalmente excluidos, y la democracia de los movimientos sociales”, sostuvo el politólogo.
Escuchar al otro, y tejer lazos de amistad y escucha
“La reconciliación empieza por dejar los intereses propios y empezar a pensar en el bien común, sintiéndonos llamados a tejer lazos de amistad y de unión con los demás”, dijo al inicio de su intervención nuestro alumno de Psicología Gabriel Mejía, quien pertenece al movimiento Jóvenes por la paz, de la comunidad de Sant’Egidio.
Su exposición fue un certero diagnóstico acerca de la creciente popularidad de discursos a nivel mundial que socavan la democracia y los derechos humanos, así como el creciente individualismo al que nos empuja la sociedad actual.
“Parece imposible reconciliarnos pero no lo es. Hay que desplazar nuestras mentes, cuerpos y espíritus del lugar en el que solemos pensar. Es importante abrirnos al otro y romper así la soledad. En mi comunidad, creemos en la escucha del Evangelio, pues la Biblia es un ejemplo de que la sociedad humana ha intentado la paz, tal y como nos muestra que Dios nunca nos dejó solos”, dijo nuestro estudiante.
Deja un comentario