Ir al contenido principal Ir al menú principal Ir al pie de página
Institucional

“El consenso global en derechos humanos se ha resquebrajado”: Juan Pablo Artinian llegará a la PUCP para el XX Encuentro de Derechos Humanos

El historiador argentino inaugurará el XX Encuentro de Derechos Humanos con una conferencia sobre genocidios, justicia internacional y la crisis actual del consenso global. Desde una mirada comparativa y personal, Artinian propone repensar la defensa de los derechos humanos desde América Latina.

  • Texto y entrevista:
    Eduardo Dávila Lynch
  • Foto:
    Archivo personal

Del 2 al 5 de junio de 2025, la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) albergará el XX Encuentro de Derechos Humanos, que este año lleva por título “La crisis del consenso global”. Este evento, organizado por el IDEHPUCP, buscará reflexionar sobre los retrocesos en la arquitectura internacional que surgió tras la Segunda Guerra Mundial para garantizar los derechos fundamentales.

La conferencia de apertura estará a cargo del historiador argentino Juan Pablo Artinian, doctor en Historia y docente de la Universidad de Buenos Aires. Su ponencia, titulada “Genocidios y crímenes contra la humanidad desde una mirada comparativa”, analizará cómo ese consenso global se ha erosionado frente a nuevas formas de violencia y autoritarismo. En entrevista con PuntoEdu, Artinian habló sobre la ruptura del consenso global, las lecciones de la Segunda Guerra Mundial, las limitaciones del derecho internacional y el papel que debe asumir América Latina en este escenario.

Consenso global, genocidios y academia

¿Qué significa para ti el consenso global en derechos humanos?

Después de la Segunda Guerra Mundial hubo una serie de instituciones —como la ONU— que se crearon para prevenir nuevos crímenes masivos. El consenso fue normativo, institucional y ético. Pero no fue una historia lineal. Desde el inicio hubo tensiones: no se incluyó el genocidio político ni el cultural, por ejemplo. Hoy, a 80 años, estamos viendo el derrumbe de una arquitectura que costó mucho construir.

Hay una falta de decoro en la reivindicación de crímenes y genocidios, y una menor condena por parte de instituciones internacionales".

Dr. Juan Pablo Artinian
Doctor en Historia y docente de la Universidad de Buenos Aires

¿Qué factores sostuvieron el consenso en el siglo XX y cuáles lo están debilitando hoy?

En términos éticos, lo que surge, después de la Segunda Guerra Mundial, son estas instituciones que te señalé, pero también un contexto de un mundo bipolar producto de lo que es el contexto de la Guerra Fría. Ese fue el marco en el que se da la creación de esta especie de consenso en torno a derechos humanos, en torno a la sanción del crimen de genocidio. En términos éticos, creo que hay toda una cuestión que va más allá de lo institucional y que pasa por las luchas de distintos organismos, asociaciones y grupos.

¿Hay un retroceso en el consenso global?

Sí, hay una falta de decoro en la reivindicación de crímenes y genocidios, y una menor condena por parte de instituciones internacionales. El consenso global posterior a la Segunda Guerra Mundial se ha resquebrajado.

Hay una interrelación entre democracia y derechos humanos que se ha visto vulnerada por el ascenso de figuras autoritarias y la erosión de la noción de representación".

Democracia y derechos humanos

¿Esta ruptura del consenso afecta la democracia?

Claramente. Hay una interrelación entre democracia y derechos humanos que se ha visto vulnerada por el ascenso de figuras autoritarias y la erosión de la noción de representación.

¿Qué rol ha tenido América Latina?

Desde América Latina tenemos una experiencia y una práctica muy importante en torno a la defensa de los derechos humanos, donde esa dimensión ética claramente está en distintas entidades no ambientales, de distintos grupos, diversas asociaciones. También hay sectores en Argentina, Uruguay, Brasil, de exiliados, exiliados políticos, organizaciones de derechos humanos, familiares de detenidos desaparecidos. Creo que es importante ir desde una mirada que vaya más allá de las traducciones de Europa.

¿Qué nos enseña Auschwitz sobre la intervención internacional?

Lo que enseña Auschwitz —y Camboya también— es que solo una intervención eficaz puede detener un genocidio. El Ejército Rojo liberó el campo. Vietnam entró a Camboya. No estoy hablando de justificar intervenciones imperialistas, pero sí de que, a veces, no hacer nada tiene consecuencias peores. La idea de que basta con condenar y mirar de lejos no funciona. Una de las lecciones de los genocidios (obviamente, una espera que necesita prevención y que haya conciencia) es que es la intervención clara, sostenida y eficaz va a detener estas políticas de exterminio.

¿Cómo anticipar un genocidio hoy?

El genocidio, vale aclarar, es un crimen que se comete en tiempos de guerra y de paz. Hay patrones: deshumanización, propaganda, asesinatos selectivos, desplazamiento y luego negación. Sin embargo, estos procesos no son necesariamente lineales. Hoy, con los celulares, los drones, las redes sociales, es posible documentar en tiempo real. Hay un sitio que se llama Genocide Watch que justamente trata de monitorear de esa forma. Pero no basta con registrar: falta voluntad política.

El genocidio, vale aclarar, es un crimen que se comete en tiempos de guerra y de paz. Hay patrones: deshumanización, propaganda, asesinatos selectivos, desplazamiento y luego negación".

¿Cómo ves el caso de Gaza y otros conflictos actuales?

El fenómeno genocida vuelve de forma atroz. No solo en Gaza, también en Sudán, en lo que pasó en Siria. Hay un desprecio absoluto por la vida humana y, al mismo tiempo, una especie de parálisis del sistema internacional. La prevención, que era uno de los pilares, está completamente colapsada. Nos encontramos hoy en un mundo donde el fenómeno del genocidio vuelve de forma atroz.

¿Qué relación ves entre migración y genocidio?

Los movimientos migratorios masivos, muchas veces, tienen su origen en situaciones de violencia estructural o genocidio. Pero lo que vemos hoy es un cierre de fronteras, un rechazo institucionalizado, una criminalización de la movilidad humana. Eso también forma parte del colapso del consenso.

¿Qué opinas sobre nuevas categorías como el gendericidio o el politicidio?

Son categorías que emergen desde la academia para dar cuenta de formas de exterminio que no están contempladas en la Convención de 1948. El gendericidio, por ejemplo, visibiliza la violencia masiva por razones de género. El politicidio permite pensar las persecuciones contra sectores ideológicos. Aún no tienen marco legal, pero son necesarias para ampliar la comprensión.

¿Cómo evalúas la efectividad de los tribunales, el acuerdo penal internacional o los procesos de justicia transicional?

Los tribunales militares fueron los primeros en establecerse después de la Segunda Guerra Mundial, pero luego los tribunales civiles, como en Argentina, jugaron un papel importante. La Corte Penal Internacional representa un avance cualitativo, aunque hay un desbalance de poder en su aplicación.

¿Qué rol debería asumir la academia?

Primero, evitar la polarización absurda. Segundo, mantener un debate riguroso y con inserción social. Y tercero, producir conocimiento autónomo desde América Latina. No podemos seguir repitiendo marcos teóricos eurocéntricos. Tenemos experiencias propias, memorias propias. Hay que darles valor.

Estos encuentros permiten reconocernos desde América Latina, revalorizar nuestras experiencias históricas y reforzar nuestro papel en un mundo en transición".

¿Por qué es importante que haya estos encuentros de derechos humanos, especialmente en el contexto de crisis del consenso global?

Estos encuentros permiten reconocernos desde América Latina, revalorizar nuestras experiencias históricas y reforzar nuestro papel en un mundo en transición, promoviendo una producción de conocimiento independiente y creativa.

La participación de Juan Pablo Artinian abrirá un espacio fundamental de reflexión crítica en el XX Encuentro de Derechos Humanos de la PUCP. Su lectura comparativa de los genocidios del siglo XX y su advertencia sobre la fragilidad del orden internacional apuntarán a recuperar el sentido ético de la justicia global en un mundo donde los pactos multilaterales se tambalean.

Desde América Latina, Artinian propondrá que se puede —y debe— construir otras formas de compromiso con la vida, la dignidad y la memoria. Así, el XX Encuentro de Derechos Humanos se perfila como un lugar para pensar, con lucidez y desde el sur, los desafíos más urgentes del presente global.

Mira el programa e inscríbete

Deja un comentario

Cancelar
Sobre los comentarios
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los comentarios pasan por un proceso de moderación que toma hasta 48 horas en días útiles. Son bienvenidos todos los comentarios siempre y cuando mantengan el respeto hacia los demás. No serán aprobados los comentarios difamatorios, con insultos o palabras altisonantes, con enlaces publicitarios o a páginas que no aporten al tema, así como los comentarios que hablen de otros temas.