Este audio fue generado con inteligencia artificial
Hace 20 años, PuntoEdu comenzó como una visión pionera: darle a la PUCP un medio informativo en el cual contar sus historias con identidad y voz propia. Desde entonces, ha acompañado la vida de nuestra comunidad, recogiendo logros y desafíos, y mostrando cómo la Universidad aporta al país desde la investigación, la academia y el compromiso con la sociedad. Con el portal renovado y multimedia, hoy celebramos con ustedes nuestras dos décadas de camino ininterrumpido.
Reportaje
Joana Cervilla
Los orígenes: del boletín a un semanario
Para contar el inicio de la historia de PuntoEdu debemos remontarnos a los tiempos en que el boletín en blanco y negro —editado por la Secretaría General de la Universidad, de apenas una página tamaño A4— era el encargado de informar lo básico de la vida universitaria. Sin embargo, este formato que funcionó varios años, quedaba corto para una comunidad tan diversa y efervescente como la PUCP. “Era un boletín modesto, casi artesanal”, recuerda el exrector, el ingeniero Luis Guzmán Barrón. Es bajo su gestión, y gracias a la Dirección de Comunicación Institucional (DCI), liderada entonces por Carla Colona, que se gestó la idea de dar un salto audaz: crear un periódico semanal, a todo color y en formato tabloide que reflejara la vida académica y el pulso de la Universidad.
Si bien en 2005 el proyecto vio la luz, el arranque no fue sencillo. Desde el inicio, hubo preocupación en cuanto al costo, el tiraje e incluso el contenido. Pero el entusiasmo, la paciencia y, sobre todo, la calidad de la información fueron convenciendo poco a poco a la comunidad de que valía la pena seguir adelante. El nombre inicial también generó un debate: originalmente el medio se iba a llamar “Huerequeque”, en honor a un ave que habita en el campus. Finalmente se eligió PuntoEdu ➚. Sin embargo, como guiño a esa primera idea, el suplemento cultural y de vida universitaria se bautizó como Q.
Es así como PuntoEdu nació con la convicción de comunicar hacia adentro y hacia afuera, con visión, coherencia y credibilidad. Vale la pena recordar que, en esos años, casi ninguna universidad en el Perú apostaba por la comunicación institucional. Mucho menos por un periódico propio con espíritu periodístico. Aunque concebido como un medio institucional, PuntoEdu quiso ser más que eso. “Un periódico institucional habla de imagen, mientras que un periódico universitario habla desde el conocimiento. Y la universidad significa diversidad”, explica Carla Colona.
Esa diversidad se tradujo en un esfuerzo consciente por cubrir a todas las facultades, departamentos, centros e institutos de manera equitativa. “Éramos una ciudad universitaria de más de 20 mil personas y teníamos que reflejar esa riqueza. Nos tomó seis meses conocer a fondo la Universidad antes de darle forma al periódico”, recuerda.Muy pronto, PuntoEdu empezó a salir del campus. Llegó a colegios gracias a la Oficina de Admisión, y también, a las embajadas, convirtiéndose en carta de presentación de la PUCP. “Se volvió no solo un medio, sino el repositorio de la memoria de la Universidad”, nos cuenta Colona con orgullo.
Con PuntoEdu, la PUCP fue pionera en entender que la comunicación no era un accesorio, sino una herramienta estratégica para tender puentes con la sociedad y mostrar el conocimiento que genera.
Hoy, al mirar atrás, queda claro lo que significó ese paso. “PuntoEdu es un triunfo universitario, un triunfo de la palabra universitaria. Demostramos que se podía comunicar con respeto, rigor y creatividad, y que la Universidad podía dialogar de manera abierta con el país”, señala Colona.
La gran apuesta periodística
El reto de darle forma editorial al periódico recayó en Patricia del Río, primera directora periodística entre 2005 y 2006. Ella venía de trabajar en medios nacionales y pensó que sería un desafío más tranquilo. Pronto se dio cuenta de que estaba equivocada. “Concebir, diseñar y sacar adelante PuntoEdu ha significado uno de los retos más complejos y satisfactorios de mi carrera”, señala.
Del Río recuerda esa etapa como intensa y enriquecedora, ya que el medio se convirtió en un verdadero laboratorio donde estudiantes y recién egresados podían aprender en un entorno profesional exigente. “Queríamos que PuntoEdu fuera un espacio de formación. Teníamos que ser rigurosos, porque la Universidad no podía equivocarse en lo que comunicaba y, al mismo tiempo, encontrar temas atractivos todas las semanas”, explica.
Además, los académicos, que muchas veces se mantenían distanciados de los medios, encontraron aquí un lugar donde sus investigaciones podían ser divulgadas con respeto y claridad. Y, para los jóvenes periodistas, fue el inicio de un camino que muchos continuaron en medios nacionales. PuntoEdu fue semillero y trampolín: una experiencia donde la creatividad, el rigor y la exigencia profesional se combinaban con la misión universitaria.
https://www.youtube.com/shorts/00jO1LCmojM
Las historias que contamos
Durante dos décadas, PuntoEdu ha acompañado la vida universitaria con reportajes, entrevistas y coberturas que marcaron época. Desde emergencias nacionales hasta visitas históricas, pasando por el reconocimiento a figuras académicas y culturales nacionales e internacionales, nuestras páginas han sido testigo del pulso de la PUCP y del país.
Los suplementos que marcaron época
Desde el inicio, PuntoEdu diversificó su propuesta editorial con suplementos temáticos que respondían a distintos momentos de la comunidad universitaria y del país.En 2005, acompañando al periódico desde su primer número, nació Q, el suplemento de cultura y entretenimiento dirigido a estudiantes, que en 2008 se consolidó como una revista pequeña, juvenil y dinámica.
En 2009 apareció NEO, una publicación quincenal que difundía la ciencia, la tecnología y la innovación desde la PUCP, alcanzando 90 números. En 2011, en pleno contexto electoral, se lanzó DEMOS, suplemento que en 9 ediciones abrió debates sobre el buen gobierno del Perú. Ese mismo año, en medio del conflicto de nuestra Universidad con el Arzobispado, se publicaron 5 ediciones de En defensa de la PUCP, que explicaban en detalle los pormenores de la controversia.
Estos suplementos demostraron la capacidad de PuntoEdu para adaptarse a las coyunturas y dar respuesta a las necesidades de su comunidad y del país. Fueron también una prueba del dinamismo del medio, que no solo informaba, sino que intervenía activamente en los debates nacionales con el sello de la Universidad.
Pasaron por PuntoEdu
Los exintegrantes de PuntoEdu son parte de nuestra memoria: redactores, diseñadores, fotógrafos y editores que dejaron huella en nuestras páginas. Ellos nos cuentan cómo esta experiencia marcó su trayectoria profesional y personal, y cómo el espíritu de comunidad y servicio que caracteriza a PuntoEdu sigue acompañándolos en sus nuevos caminos.
“Aquí están nuestras amanecidas y amistades eternas”
Diego AvendañoRedactor creativo y dibujante
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“PuntoEdu fue una verdadera escuela de periodismo y de vida”
Lourdes Mochizuki Tamayo Funcionaria del Servicio Diplomático
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“PuntoEdu fue y sigue siendo un espacio de libertad”
Miguel SánchezEscritor, periodista y profesor PUCP
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“Nos fortaleció como comunidad y nos conectó con el país”
Jack LoDirector de la carrera de Periodismo PUCP
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“Cada asignación era una oportunidad de aprender algo nuevo”
Sharún GonzálesFuncionaria del Servicio Diplomático
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Del papel al ecosistema digital
En 2018 llegó otro gran cambio. Si bien PuntoEdu tenía una versión digital desde el 2009 y utilizaba las redes sociales de la PUCP para difundir estas noticias, la edición impresa seguía concentrando la atención de nuestra comunidad. Con la dirección en la DCI de Verónica Salem se inició un fortalecimiento de nuestro ecosistema digital para seguir el ritmo de los nuevos modos de consumo de información. “Lo primero que hicimos fue revisar cómo estaba funcionando PuntoEdu. Habían pasado muchos años desde su creación y las necesidades eran otras. Decidimos hacer un rediseño”, nos cuenta Rosario Yori, quien regresaba a la DCI como Jefa de la Oficina de Contenidos, luego de haber sido editora del medio entre 2010 y 2012.
La misión era dejar de pensar en un solo soporte y consolidar una red comunicacional. Para ello, recuerda Yori, “redujimos el formato, eliminamos los suplementos y dejamos de pensar en un único medio para pasar a un ecosistema de comunicación: redes sociales, portal web y boletín digital”.
Además, la idea era publicar el número 500 en papel como cierre simbólico y, desde allí, dar el salto definitivo al entorno digital. Pero la pandemia de 2020 aceleró todo.
La pandemia como acelerador
El 15 de marzo de 2020, con el estado de emergencia, la comunidad universitaria pasó a la virtualidad. PuntoEdu, que ya venía adaptándose al cambio, se volvió un puente indispensable. “Gracias a que ya teníamos el boletín implementado y las redes fortalecidas, nunca perdimos la comunicación con la comunidad”, recuerda Yori.
El equipo creó nuevos productos, como En vivo PUCP un programa de entrevistas transmitido por Facebook Live que conectó a miles de personas con especialistas, en tiempo real. “Fue emocionante descubrir esa nueva forma de acercarnos a la comunidad. No dejamos de trabajar ni un día. Fue una etapa dura, llena de retos, pero salimos adelante”, comenta Yori.
Más allá de la crisis, la pandemia se convirtió en un momento de reinvención. PuntoEdu pasó de ser un medio con tiempos semanales a operar con la lógica de la inmediatez digital. Aprendió a convivir con la urgencia informativa y a experimentar con nuevos formatos multimedia.
El rediseño de los 20 años
Hoy, dos décadas después, PuntoEdu celebra sus 20 años con una web renovada, pensada para ser más visual, accesible y cercana. “Desde hace tiempo sabíamos que necesitábamos actualizar PuntoEdu, pero el impulso definitivo vino con el aniversario número 20”, señala el equipo de editores de PuntoEdu. El proceso de rediseño arrancó formalmente en noviembre de 2023. “No queríamos una simple reestructuración visual, sino una propuesta que surgiera de un diagnóstico real sobre nuestras audiencias y su relación con el medio”.
Ese diagnóstico involucró encuestas a más de mil personas, entrevistas en profundidad y ejercicios de usabilidad con públicos internos (estudiantes, docentes, administrativos) y externos. “Recogimos muchas expectativas y críticas útiles. Nos dijeron, por ejemplo, que querían una web más clara, más intuitiva, con contenidos personalizados y visualmente más atractivos”, recuerda el equipo.
Es por ello que este rediseño va más allá de lo estético y combina la tradición periodística con las posibilidades de lo multimedia. “En nuestras secciones y boletines se visibilizan las voces y el análisis de investigadores, académicos y creadores. La credibilidad de nuestra información, siempre sustentada en el conocimiento, es muy importante en estos tiempos de desinformación global”, añade Rafaella León, actual jefa de la Oficina de Contenidos de la DCI.
Los atributos de la nueva web
La actualización de nuestro portal incluye un diseño moderno y accesible. Más visual, organizado por disciplinas y con la voz de nuestros expertos al centro, refleja la diversidad y la actualidad de la vida universitaria PUCP.
Más que un portal, un espacio de conocimiento
En este nuevo diseño, uno de los ejes centrales es la visibilidad de los investigadores y académicos de la Universidad. “En nuestras secciones y boletines semanales se visibilizan sus voces, sus aportes y su análisis. Trabajamos con rigurosidad y pluralidad tanto los temas relacionados con la vida universitaria como los que forman parte del debate ciudadano”, explica León.
Justamente uno de los principales cambios de fondo es el fortalecimiento del perfil de los expertos PUCP. “Nuestros docentes no solo enseñan, también investigan, publican, opinan y crean. PuntoEdu debía reflejar eso con más claridad”.
En ese sentido, ahora cada profesor o investigadora que participa en una nota tiene un perfil individual que incluye su biografía, trayectoria profesional, premios, líneas de investigación y todas las notas en las que ha aparecido. “El objetivo es doble: reconocer su trabajo y facilitar que otros —como periodistas o medios— puedan contactarlos. Si alguien quiere una voz experta sobre minería, cambio climático o política internacional, la encontrará fácilmente en la web”, destaca el equipo.
En palabras de los editores, este rediseño marca un antes y un después: “Es el inicio de una nueva etapa. PuntoEdu tiene que seguir siendo un laboratorio de narrativas, formatos y temas, y una tribuna de la Universidad”.
Mirando hacia el futuro
Los próximos años representan un reto: mantenerse vigente en un entorno saturado de información. Para León, la clave es clara: “El aporte de nuestros investigadores refuerza a la PUCP como el lugar donde se forman los mejores. De ahí la importancia de seguir siendo el medio para divulgar todo lo que se crea, se investiga y se innova en la Universidad, y al mismo tiempo informar a un público más amplio sobre lo que sucede en nuestro entorno”.
La comunidad PUCP —y también el público externo— está invitada a explorar, interactuar, comentar y compartir en nuestro renovado portal.
Créditos
Redacción, investigacióny edición general:
Joana Cervilla
Edición fotográfica:
Sulsba Yépez
Fotografía:
Archivo PuntoEdu, Roberto Rojas, Hanslitt Cruzado y Jorge Cerdán
Realización y edición de video:
Víctor Mendoza
Infografías:
Luis Amez
Diseño web:
Solange Avila
ESPECIAL
20 años de PuntoEdu
La historia que sigue escribiéndose desde la PUCP
Hace 20 años, PuntoEdu comenzó como una visión pionera: darle a la PUCP un medio informativo en el cual contar sus historias con identidad y voz propia. Desde entonces, ha acompañado la vida de nuestra comunidad, recogiendo logros y desafíos, y mostrando cómo la Universidad aporta al país desde la investigación, la academia y el compromiso con la sociedad. Con el portal renovado y multimedia, hoy celebramos con ustedes nuestras dos décadas de camino ininterrumpido.
Reportaje
Joana Cervilla
Los orígenes: del boletín a un semanario
Para contar el inicio de la historia de PuntoEdu debemos remontarnos a los tiempos en que el boletín en blanco y negro —editado por la Secretaría General de la Universidad, de apenas una página tamaño A4— era el encargado de informar lo básico de la vida universitaria. Sin embargo, este formato que funcionó varios años, quedaba corto para una comunidad tan diversa y efervescente como la PUCP. “Era un boletín modesto, casi artesanal”, recuerda el exrector, el ingeniero Luis Guzmán Barrón. Es bajo su gestión, y gracias a la Dirección de Comunicación Institucional (DCI), liderada entonces por Carla Colona, que se gestó la idea de dar un salto audaz: crear un periódico semanal, a todo color y en formato tabloide que reflejara la vida académica y el pulso de la Universidad.
Si bien en 2005 el proyecto vio la luz, el arranque no fue sencillo. Desde el inicio, hubo preocupación en cuanto al costo, el tiraje e incluso el contenido. Pero el entusiasmo, la paciencia y, sobre todo, la calidad de la información fueron convenciendo poco a poco a la comunidad de que valía la pena seguir adelante. El nombre inicial también generó un debate: originalmente el medio se iba a llamar “Huerequeque”, en honor a un ave que habita en el campus. Finalmente se eligió PuntoEdu ➚. Sin embargo, como guiño a esa primera idea, el suplemento cultural y de vida universitaria se bautizó como Q.
PuntoEdu es un triunfo de la palabra universitaria. Demostramos que se podía comunicar con respeto, rigor y creatividad, y que la Universidad podía dialogar de manera abierta con el país”.
Es así como PuntoEdu nació con la convicción de comunicar hacia adentro y hacia afuera, con visión, coherencia y credibilidad. Vale la pena recordar que, en esos años, casi ninguna universidad en el Perú apostaba por la comunicación institucional. Mucho menos por un periódico propio con espíritu periodístico. Aunque concebido como un medio institucional, PuntoEdu quiso ser más que eso. “Un periódico institucional habla de imagen, mientras que un periódico universitario habla desde el conocimiento. Y la universidad significa diversidad”, explica Carla Colona.
Esa diversidad se tradujo en un esfuerzo consciente por cubrir a todas las facultades, departamentos, centros e institutos de manera equitativa. “Éramos una ciudad universitaria de más de 20 mil personas y teníamos que reflejar esa riqueza. Nos tomó seis meses conocer a fondo la Universidad antes de darle forma al periódico”, recuerda. Muy pronto, PuntoEdu empezó a salir del campus. Llegó a colegios gracias a la Oficina de Admisión, y también, a las embajadas, convirtiéndose en carta de presentación de la PUCP. “Se volvió no solo un medio, sino el repositorio de la memoria de la Universidad”, nos cuenta Colona con orgullo.
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ediciones impresas de PuntoEdu
Con PuntoEdu, la PUCP fue pionera en entender que la comunicación no era un accesorio, sino una herramienta estratégica para tender puentes con la sociedad y mostrar el conocimiento que genera.
Hoy, al mirar atrás, queda claro lo que significó ese paso. “PuntoEdu es un triunfo universitario, un triunfo de la palabra universitaria. Demostramos que se podía comunicar con respeto, rigor y creatividad, y que la Universidad podía dialogar de manera abierta con el país”, señala Colona.
Queríamos que PuntoEdu fuera un espacio de formación. Teníamos que ser rigurosos, porque la Universidad no podía equivocarse en lo que comunicaba».
La gran apuesta periodística
El reto de darle forma editorial al periódico recayó en Patricia del Río, primera directora periodística entre 2005 y 2006. Ella venía de trabajar en medios nacionales y pensó que sería un desafío más tranquilo. Pronto se dio cuenta de que estaba equivocada. “Concebir, diseñar y sacar adelante PuntoEdu ha significado uno de los retos más complejos y satisfactorios de mi carrera”, señala.
Del Río recuerda esa etapa como intensa y enriquecedora, ya que el medio se convirtió en un verdadero laboratorio donde estudiantes y recién egresados podían aprender en un entorno profesional exigente. “Queríamos que PuntoEdu fuera un espacio de formación. Teníamos que ser rigurosos, porque la Universidad no podía equivocarse en lo que comunicaba y, al mismo tiempo, encontrar temas atractivos todas las semanas”, explica.
Además, los académicos, que muchas veces se mantenían distanciados de los medios, encontraron aquí un lugar donde sus investigaciones podían ser divulgadas con respeto y claridad. Y, para los jóvenes periodistas, fue el inicio de un camino que muchos continuaron en medios nacionales. PuntoEdu fue semillero y trampolín: una experiencia donde la creatividad, el rigor y la exigencia profesional se combinaban con la misión universitaria.
Las historias que contamos
Durante dos décadas, PuntoEdu ha acompañado la vida universitaria con reportajes, entrevistas y coberturas que marcaron época. Desde emergencias nacionales hasta visitas históricas, pasando por el reconocimiento a figuras académicas y culturales nacionales e internacionales, nuestras páginas han sido testigo del pulso de la PUCP y del país.
Los suplementos que marcaron época
Desde el inicio, PuntoEdu diversificó su propuesta editorial con suplementos temáticos que respondían a distintos momentos de la comunidad universitaria y del país. En 2005, acompañando al periódico desde su primer número, nació Q, el suplemento de cultura y entretenimiento dirigido a estudiantes, que en 2008 se consolidó como una revista pequeña, juvenil y dinámica.
En 2009 apareció NEO, una publicación quincenal que difundía la ciencia, la tecnología y la innovación desde la PUCP, alcanzando 90 números. En 2011, en pleno contexto electoral, se lanzó DEMOS, suplemento que en 9 ediciones abrió debates sobre el buen gobierno del Perú. Ese mismo año, en medio del conflicto de nuestra Universidad con el Arzobispado, se publicaron 5 ediciones de En defensa de la PUCP, que explicaban en detalle los pormenores de la controversia.
Estos suplementos demostraron la capacidad de PuntoEdu para adaptarse a las coyunturas y dar respuesta a las necesidades de su comunidad y del país. Fueron también una prueba del dinamismo del medio, que no solo informaba, sino que intervenía activamente en los debates nacionales con el sello de la Universidad.
Pasaron por PuntoEdu
Los exintegrantes de PuntoEdu son parte de nuestra memoria: redactores, diseñadores, fotógrafos y editores que dejaron huella en nuestras páginas. Ellos nos cuentan cómo esta experiencia marcó su trayectoria profesional y personal, y cómo el espíritu de comunidad y servicio que caracteriza a PuntoEdu sigue acompañándolos en sus nuevos caminos.
“Aquí están nuestras amanecidas y amistades eternas”
En 2018 llegó otro gran cambio. Si bien PuntoEdu tenía una versión digital desde el 2009 y utilizaba las redes sociales de la PUCP para difundir estas noticias, la edición impresa seguía concentrando la atención de nuestra comunidad. Con la dirección en la DCI de Verónica Salem se inició un fortalecimiento de nuestro ecosistema digital para seguir el ritmo de los nuevos modos de consumo de información. “Lo primero que hicimos fue revisar cómo estaba funcionando PuntoEdu. Habían pasado muchos años desde su creación y las necesidades eran otras. Decidimos hacer un rediseño”, nos cuenta Rosario Yori, quien regresaba a la DCI como Jefa de la Oficina de Contenidos, luego de haber sido editora del medio entre 2010 y 2012.
Dejamos de pensar en un único medio para pasar a un ecosistema de comunicación: redes sociales, portal web y boletín digital”.
La misión era dejar de pensar en un solo soporte y consolidar una red comunicacional. Para ello, recuerda Yori, “redujimos el formato, eliminamos los suplementos y dejamos de pensar en un único medio para pasar a un ecosistema de comunicación: redes sociales, portal web y boletín digital”.
Además, la idea era publicar el número 500 en papel como cierre simbólico y, desde allí, dar el salto definitivo al entorno digital. Pero la pandemia de 2020 aceleró todo.
La pandemia como acelerador
El 15 de marzo de 2020, con el estado de emergencia, la comunidad universitaria pasó a la virtualidad. PuntoEdu, que ya venía adaptándose al cambio, se volvió un puente indispensable. “Gracias a que ya teníamos el boletín implementado y las redes fortalecidas, nunca perdimos la comunicación con la comunidad”, recuerda Yori.
El equipo creó nuevos productos, como En vivo PUCP un programa de entrevistas transmitido por Facebook Live que conectó a miles de personas con especialistas, en tiempo real. “Fue emocionante descubrir esa nueva forma de acercarnos a la comunidad. No dejamos de trabajar ni un día. Fue una etapa dura, llena de retos, pero salimos adelante”, comenta Yori.
Más allá de la crisis, la pandemia se convirtió en un momento de reinvención. PuntoEdu pasó de ser un medio con tiempos semanales a operar con la lógica de la inmediatez digital. Aprendió a convivir con la urgencia informativa y a experimentar con nuevos formatos multimedia.
El rediseño de los 20 años
Hoy, dos décadas después, PuntoEdu celebra sus 20 años con una web renovada, pensada para ser más visual, accesible y cercana. “Desde hace tiempo sabíamos que necesitábamos actualizar PuntoEdu, pero el impulso definitivo vino con el aniversario número 20”, señala el equipo de editores de PuntoEdu. El proceso de rediseño arrancó formalmente en noviembre de 2023. “No queríamos una simple reestructuración visual, sino una propuesta que surgiera de un diagnóstico real sobre nuestras audiencias y su relación con el medio”.
+10mil
contenidos en la web de PuntoEdu
Ese diagnóstico involucró encuestas a más de mil personas, entrevistas en profundidad y ejercicios de usabilidad con públicos internos (estudiantes, docentes, administrativos) y externos. “Recogimos muchas expectativas y críticas útiles. Nos dijeron, por ejemplo, que querían una web más clara, más intuitiva, con contenidos personalizados y visualmente más atractivos”, recuerda el equipo.
La credibilidad de nuestra información, siempre sustentada en el conocimiento, es muy importante en estos tiempos de desinformación global».
Es por ello que este rediseño va más allá de lo estético y combina la tradición periodística con las posibilidades de lo multimedia. “En nuestras secciones y boletines se visibilizan las voces y el análisis de investigadores, académicos y creadores. La credibilidad de nuestra información, siempre sustentada en el conocimiento, es muy importante en estos tiempos de desinformación global”, añade Rafaella León, actual jefa de la Oficina de Contenidos de la DCI.
Los atributos de la nueva web
La actualización de nuestro portal incluye un diseño moderno y accesible. Más visual, organizado por disciplinas y con la voz de nuestros expertos al centro, refleja la diversidad y la actualidad de la vida universitaria PUCP.
Más que un portal, un espacio de conocimiento
En este nuevo diseño, uno de los ejes centrales es la visibilidad de los investigadores y académicos de la Universidad. “En nuestras secciones y boletines semanales se visibilizan sus voces, sus aportes y su análisis. Trabajamos con rigurosidad y pluralidad tanto los temas relacionados con la vida universitaria como los que forman parte del debate ciudadano”, explica León.
Justamente uno de los principales cambios de fondo es el fortalecimiento del perfil de los expertos PUCP. “Nuestros docentes no solo enseñan, también investigan, publican, opinan y crean. PuntoEdu debía reflejar eso con más claridad”.
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En ese sentido, ahora cada profesor o investigadora que participa en una nota tiene un perfil individual que incluye su biografía, trayectoria profesional, premios, líneas de investigación y todas las notas en las que ha aparecido. “El objetivo es doble: reconocer su trabajo y facilitar que otros —como periodistas o medios— puedan contactarlos. Si alguien quiere una voz experta sobre minería, cambio climático o política internacional, la encontrará fácilmente en la web”, destaca el equipo.
En palabras de los editores, este rediseño marca un antes y un después: “Es el inicio de una nueva etapa. PuntoEdu tiene que seguir siendo un laboratorio de narrativas, formatos y temas, y una tribuna de la Universidad”.
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Mirando hacia el futuro
Los próximos años representan un reto: mantenerse vigente en un entorno saturado de información. Para León, la clave es clara: “El aporte de nuestros investigadores refuerza a la PUCP como el lugar donde se forman los mejores. De ahí la importancia de seguir siendo el medio para divulgar todo lo que se crea, se investiga y se innova en la Universidad, y al mismo tiempo informar a un público más amplio sobre lo que sucede en nuestro entorno”.
La comunidad PUCP —y también el público externo— está invitada a explorar, interactuar, comentar y compartir en nuestro renovado portal.
Créditos
Redacción, investigación y edición general:
Joana Cervilla
Edición fotográfica:
Sulsba Yépez
Fotografía:
Archivo PuntoEdu, Roberto Rojas, Hanslitt Cruzado y Jorge Cerdán
CEMDUC 
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