Ir al contenido principal Ir al menú principal Ir al pie de página

Sobre los decretos de promoción de la inversión y los conflictos sociales

El Gobierno ha expedido el decreto de urgencia N 001-2011 que tiene como objetivo dictar disposiciones extraordinarias para facilitar la inversión privada en determinados proyectos de inversión, asociaciones público-privadas y concesión de obras públicas de infraestructura y de servicios públicos.

  • Marlene Anchante Rullé

En dichas disposiciones se declara de necesidad nacional y ejecución prioritaria por Pro Inversión a 33 proyectos que sin duda son importantes para el país. Y por tanto, es evidente que el interés del Ejecutivo es facilitar las  condiciones y acelerar las inversiones en el país.

Sin embargo, la rapidez que es una virtud, también puede engendrar un vicio que es la prisa y la consecuente «negligencia», «percepción de falta de transparencia», etc. Por tanto, si bien es un decreto que por un lado, pretende acelerar las inversiones en el país, por otra parte, también es tierra fértil para generar más conflictos sociales.

Y en esto los estudios de impacto ambiental (EIA) juegan un papel clave. Pues son precisamente estos estudios los que teóricamente deberían permitir identificar previamente los impactos ambientales y sociales de un proyecto a fin de mitigarlo o remediarlo. Regresamos a un tema que si bien resulta agotador repetir sigue vigente por su trascendencia. ¿Quién y cómo se hacen los EIA? ¿Quién los revisa y autoriza?.  Existe desconfianza y se critica ampliamente el conflicto de interés en el cual se ven las instituciones encargadas de autorizar EIA, al tener que a la vez  promover la inversión; pero es evidente que  no hay interés de cambiar esta contradicción.

No podemos pretender alcanzar el desarrollo del país si solo vemos la arista económica, pues los aspectos ambientales y sociales son decisivos. Pareciera que estos decretos los han olvidado o los han rezagado, que no les han dado su verdadera importancia. Los que queremos desarrollo para el país, deseamos que este sea un desarrollo humano, vale decir con las personas como fin último. La riqueza económica es absolutamente necesaria como un requisito previo pero no es el fin mismo del desarrollo. El conflicto social siempre se dará, más aún en un país con crecimiento pero a la vez con desigualdad social. Si bien no es posible evitarlo si debemos aprender a anticiparlo y canalizarlo constructivamente si queremos caminar hacia el desarrollo.

Nota: El decreto de urgencia N 001-2011 incluye modificatorias en el decreto 002-2011.

Deja un comentario

Cancelar
Sobre los comentarios
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los comentarios pasan por un proceso de moderación que toma hasta 48 horas en días útiles. Son bienvenidos todos los comentarios siempre y cuando mantengan el respeto hacia los demás. No serán aprobados los comentarios difamatorios, con insultos o palabras altisonantes, con enlaces publicitarios o a páginas que no aporten al tema, así como los comentarios que hablen de otros temas.